La historia de las civilizaciones está escrita por aquellas personas queen el paso de los años, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han ocasionado quela humanidad, de una forma u otra,progrese.
Apreciar lo bueno y lo malo de las personas significativas como Zacarías, personas que hacen rodar y cambiar al mundo, es una cosa fundamental para que podamos apreciar no sólo la vida de Zacarías, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por Zacarías, personas a quienes de de una u otra forma Zacarías influyó, y por supuesto, entender y comprender cómo fue vivir en el momento de la historia y la sociedad en la que vivió Zacarías.
Las biografías y las vidas de personas que, como Zacarías, atraen nuestra atención, deben servirnos siempre como referencia y reflexión para conferir un marco y un contexto a otra sociedad y otra etapa de la historia que no son las nuestras. Hacer un esfuerzo por comprender la biografía de Zacarías, porqué Zacarías vivió del modo en que lo hizo y actuó del modo en que lo hizo durante su vida, es algo que nos impulsará por un lado a entender mejor el alma del ser humano, y por el otro, la manera en que se mueve, de forma inexorable, la historia.
Profeta bíblico que desplegó su actividad profética hacia los años 520-518 a. de C. y al que se asigna la autoría del Libro de Zacarías, libro del Antiguo Testamento correspondiente a los Libros Proféticos, en concreto al conjunto de los llamados Libros de los Profetas Inferiores.
El Libro de Zacarías se distribuye en 2 partes: episodios 1-8 y 9-14. En general, se considera que tan solo la sección primera es obra propiamente de Zacarías, al tiempo que la segunda, añadida más tarde, es obra de un creador o autores anónimos. En la sección primera, Zacarías es llamado el hijo de Baraquías, hijo de Ado, lo que da a comprender que pertenecía a una familia sacerdotal. Así se enseña el impulso que da al desarrollo iniciado por Ezequiel a favor del sacerdocio, impulso que después desembocaría en el dominio de la función profética a la sacerdotal. Zacarías se expone como un hombre de estable promesa y de lenguaje claro. Por eso proclama sus visiones viendo hacia el futuro, en un estilo apocalíptico (1,7-6.8). Nunca, no obstante, logró la independencia que caracterizó a los profetas precedentes al exilio.
La sección primera del Libro de Zacarías comienza con una exhortación al arrepentimiento y a la conversión, a la que prosiguen un grupo de ocho visiones nocturnas que el profeta experimentó en el 518 a.C. y una compilación de oráculos. En la exhortación se expone su exigencia de pureza y moralidad interiores, ya que no se contenta con condenar los fallos rituales, sino en sus expresiones se revela el sentido de pecado y de malicia; la transformación de la región debe llevar a la transformación del pueblo. Las visiones nocturnas, interpretadas por un ángel para Zacarías, adivinan la inminente llegada de una era mesiánica.
En contraste a la primera, la segunda parte no tiene alusiones históricas, y falta toda precisión cerca de datas y nombres; tampoco existe la preocupación por la construcción del templo, incesante en la sección primera. Mientras que el estilo de la sección primera es prosaico y redundante, el de la segunda es poético y de manera frecuente de bien difícil interpretación. No obstante, el espíritu apocalíptico de la primera prosigue en ésta y consigue en el capítulo 14 su mucho más alta expresión. Más que la obra de un preciso creador, esta segunda parte semeja la expresión final de una tradición inspirada. Su composición se debió alargar en todo el primer siglo de la época helenista (desde el 332, probablemente antes del 200 a.C.), ya que en el Eclesiástico ahora se hablan de los 12 profetas inferiores.
En esta segunda parte se distinguen tres partes: en la primera el oráculo se dirige a los pueblos sirio, fenicio y filisteo, de los que Dios va a sacar un resto que le servirá (9,1-11,3); la segunda es una suerte de acción simbólica en la imagen del pastor para expresar el abuso de los pésimos pastores y la venganza que sobre ellos va a tomar el Señor, a quien han menospreciado (11,4-17 con 13,7-9); por último, la tercera es una exposición de diecisiete entidades escatológicas, introducidas todas y cada una con la expresión "aquel día". El mensaje de esta segunda parte se enfoca en la doctrina mesiánica: se comunica el resurgimiento de la estirpe del rey David y la llegada de un Mesías humilde. Estos aspectos se armonizan en la persona de Jesucristo, razón por la que el Nuevo Testamento va a hacer referencia recurrente al profeta Zacarías.
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A causa de esto, si eres de las personas que creen en que colaborando se puede hacer algo mejor, y tienes información con respecto a la vida de Zacarías, o en relación con algún detalle de su persona u obra que no hayamos contemplado en esta biografía, te pedimos que nos lo hagas llegar.
Las sutilezas y las peculiaridades que llenan nuestras vidas son decididamente imprescindibles, ya que destacan la singularidad, y en el caso de la vida de un ser como Zacarías, que poseyó su trascendencia en una época determinada, es indispensable tratar de ofrecer un panorama de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.
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