La historia universal la cuentan los hombres y mujeres queen el paso de los años, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han hecho quela humanidad, de una forma u otra,avance.
Comprender lo bueno y lo malo de las personas relevantes como Yi Yin, personas que hacen girar y evolucionar al mundo, es algo fundamental para que podamos poner en valor no sólo la vida de Yi Yin, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por Yi Yin, gentes a quienes de de una forma u otra Yi Yin influyó, y desde luego, entender y comprender cómo fue el hecho de vivir en el momento de la historia y la sociedad en la que vivió Yi Yin.
Las biografías y las vidas de personas que, como Yi Yin, seducen nuestra atención, tienen que valernos en todo momento como referencia y reflexión para ofrendar un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Hacer un esfuerzo por entender la biografía de Yi Yin, el motivo por el cual Yi Yin vivió como lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo en su vida, es algo que nos ayudará por un lado a conocer mejor el alma del ser humano, y por el otro, la manera en que se mueve, de forma implacable, la historia.
Vida y Biografía de Yi Yin
(Yi Yin, Yiyin o Yi Zhi) Político chino que vivió hacia el año 1770 a.C. Fue ministro del emperador Tang, principal creador de la dinastía Shang (o Yin). Según la historia de historia legendaria, habría nativo de la zona de Caoxian (provincia de Shandong) a lo largo de la última temporada de la dinastía Xia.
Recién nacido, fue encontrado por una mujer, quien le llevó a casa de su señor, el príncipe Xin. Este encargó la educación del bebé a su cocinero. Con los años, se transformó en un hombre virtuoso, cuyo único deseo era dejar en libertad al país de la tiranía del emperador Jie. Para ello tenía en mente ponerse al servicio del rey Tang, a fin de asistirle a despedir al pervertido soberano.
Según otras fuentes, fue Tang quien, conociendo la sabiduría de Yiyin, solicitó al príncipe Xin que le dejara ir con él. Ante su negativa, Tang decidió tomar en matrimonio a la hija del príncipe, y este aceptó. Cuando el cortejo nupcial emprendió el sendero hacia la corte del rey Tang, Yiyin formaba una parte de este como cocinero. En cuanto llegó, Yiyin fue bañado, envuelto en humo y untado con la sangre de un cerdo sacrificado.
Ese rito de purificación recuerda las pruebas del agua y del fuego por las que debían pasar los ministros de la antigüedad antes de recibir su cargo. Después de la liturgia, Yiyin probó su sabiduría discurriendo frente al rey sobre el poder de los alimentos y de los sabores, y sobre la virtud que se precisa para gobernar.
Siguiendo los consejos de Yiyin, el rey Tang se negó a abonar al emperador Jie el tributo que le correspondía. Jie organizó una expedición para castigarle, y Yiyin, al revisar el poder del soberano, aconsejó al rey aguardar el instante conveniente. Al año siguiente, el rey volvió a denegar el tributo al emperador. Jie deseó reunir a sus vasallos para atacarle, pero estos no le prosiguieron. Viendo que el emperador había perdido su autoridad, Yiyin incitó al rey a sublevarse contra él.
La derrota de Jie puso fin a la dinastía Xia. Tang se transformó en el primer emperador de la novedosa dinastía Shang y Yiyin fue ascendido al puesto de presidente. A la desaparición de Tang, Yiyin prestó su servicio a sus hijos, primero a Waibing y después a Zhongren, a los que sucedió Taijia, nieto del emperador Tang.
Otras fuentes hacen de Taijia el sustituto directo de Tang, pero todas y cada una coinciden en recalcar su falta de virtud. Cuentan que Yiyin aceptó el poder tras haber mandado al joven Taijia a vivir cerca de la tumba de su abuelo a fin de que meditase sobre su conducta. Cuando Taijia se hubo arrepentido de sus faltas, Yiyin se reunió con él y le trajo el tocado y el vestido, emblemas de la soberanía. Entonces, Taijia se transformó en un emperador sabio y virtuoso.
Yiyin murió a lo largo del reinado de Woding, hijo de Taijia, quien le sepultó en el distrito de Yanshi, provincia de Henan, con todos y cada uno de los honores debidos a un emperador. El papel definitivo del ministro o del asesor, que asiste para su señor a tomar el poder, va a ser una incesante en la narración de los reyes en pos de la hegemonía a lo largo de la temporada de los Reinos Combatientes. Ambos forman una pareja donde el ministro, merced a su sabiduría, ocupa una situación predominante. De hecho, los viejos cronistas adoptaron exactamente el mismo esquema para relatar el desenlace de ámbas primeras dinastías Xia y Shang.
Los últimos emperadores de estas dinastías, los dos corruptos, fueron vencidos por los creadores de otra dinastía con el apoyo de un asesor virtuoso. Esto se enseña si se tiene presente que los viejos no trataban la historia como una sucesión de hechos reales, sino más bien como la ilustración de temas habituales.
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