Ulpiano

La historia de las civilizaciones está escrita por aquellas mujeres y hombres quea lo largo del tiempo, gracias a su forma de actuar, sus ideales, sus hallazgos o su arte; han hecho queel género humano, de un modo u otro,prospere.

Ya sea inspirando a más personas o tomando parte de la acción. Ulpiano es una de esas personas cuya vida, sin duda alguna, merece nuestra atención debido al nivel de influencia que tuvo en la historia.Comprender la vida de Ulpiano es comprender más acerca de etapa determinada de la historia del género humano.

Si has llegado hasta aquí es porque sabes de la relevancia que detentó Ulpiano en la historia. La manera en que vivió y lo que hizo mientras estuvo en este mundo fue decisivo no sólo para quienes conocieron a Ulpiano, sino que quizá legó una señal mucho más vasta de lo que podamosconcebir en la vida de personas que tal vez nunca conocieron ni conocerán ya nunca a Ulpiano en persona.Ulpiano fue uno de esos seres humanos que, por alguna razón, merece ser recordado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.

Vida y Biografía de Ulpiano

(Domicio Ulpiano; Tiro, 170 - Roma, 228) Jurisconsulto de roma considerado entre los mucho más enormes de la historia del derecho. Miembro de entre las mucho más consagrados familias hípicos de la provincia romana de Siria, Ulpiano fue el acólito mucho más aventajado del insigne jurista tradicional de roma Papiano, de quien fue asesor en el momento en que éste ocupó el cargo de especial del pretorio en el año 203, cargo en el que continuó hasta el 212.

A lo largo del reinado del emperador Caracalla (211-217) fue magister liberorum, ya que sostuvo en el momento en que Heliogábalo (218-222) sucedió a Caracalla. Pero se vio obligado a dejar Roma en el momento en que el nuevo emperador, frente quien había caído en desgracia, le condenó al exilio. Regresó en el año 222 a Roma y también en el instante pasó a ser integrante del consilium del emperador Alejandro Severo (222-235), de quien había sido profesor a lo largo de su niñez. Su talento y condiciones personales llamaron la atención del emperador, quien le nombró especial de la anona y especial del pretorio, cargo este último guardado a los integrantes del orden ecuestre.

Este puesto tenía, al lado del mando militar, las funcionalidades de asesor jurídico del emperador y las trabajos de instancia suprema del sistema jurídico de roma. Ulpiano murió en el 228 a manos de los pretorianos, con los que había tenido duros combates, y quienes le degollaron en presencia del propio emperador. Uno de sus acólitos, Herenio Modestiano, se transformó en el jurista más importante de la próxima generación.

Proyectos de Ulpiano

Su producción, muy abundante, englobó todas y cada una de las ramas del derecho de roma. Se le atribuyó la autoría de 287 libros, lo que lo transforma en el jurista mucho más prolífico de su época. Entre sus proyectos recalcaron Libri LXXXI ad edictum praetoris y Libri II ad edictum aedilium curulium, en los que comentaba los contenidos de los edictos de los pretores y de los ediles. En ellos prosiguió con bastante rigor el orden de los edictos. Especial popularidad alcanzó De officio proconsulis, una suerte de guía para los gobernantes de provincias que fue muy seguida en su tiempo y más tarde, como refleja la mención a este escrito que figuraba en una inscripción de Éfeso del siglo IV.

Dejó incompleta una obra que tenía el título de Libri LI ad Masurium Sabinum, y escribió varias monografías dedicadas a los officia elaborados por los jueces imperiales. También fueron escenciales Libri VII regularum, Libri II Institutionum y Libri VII Regulae. De toda esta producción solo se preservan ciertos extractos de las Institutiones y el Liber singularis. El resto de sus proyectos conocidas nos llegaron en los extractos que han quedado reflejados en el Digesto.

Sus proyectos, poco auténticos si bien muy profundas, tuvieron un enorme éxito entre los juristas contemporáneos y siguientes. En ellas citaba a varios de los juristas precedentes y copió verdaderamente contenidos escritos de leyes y senadocunsultos. Hizo enormes comentarios enciclopédicos de las proyectos de autores precedentes, y más que nada del Edicto. Ulpiano trataba de coleccionar y ordenar todo el material que existe de la época tradicional; su intención era hallar realizar comprensible todo el ordenamiento jurídico en su grupo, de manera que su producción se encontraba envuelta de un colosal sentido práctico. Ulpiano llamó la atención de sus colegas por el especial dominio de todas y cada una de las materias que aparecían en sus escritos. Al centrarse en la tarea compiladora, sus tratados no aportaron noticias a la evolución del derecho de roma; en sus escritos se deshacía en continuos encomios hacia los juristas que le antecedieron en su trabajo.

Para Ulpiano las prácticas en el derecho quedaban instituidas por su largo empleo. La autoridad de la práctica nacía del permiso del pueblo, lo que era asumido por las generaciones siguientes como el ideal de la nación romana. Describió la jurisprudencia como la ciencia del derecho que define la novedad de las cosas divinas y humanas, ciencia de lo justo y de lo injusto.

Ulpiano creía que el derecho se encontraba que viene dentro por el derecho público, o sea, las reglas que tratan sobre la organización del Estado, y por el derecho privado, que regula los intereses de los particulares. Para Ulpiano era derecho público todo lo que se refería al Estado de roma, y derecho privado lo que correspondía a la herramienta de los particulares. Redujo el derecho público a tres materias: Sacra, Sacerdotes y Jueces. Mantenía que el derecho natural era aquel que la naturaleza enseñó a todos y cada uno de los animales. Importante fue la definición que dio de la justicia, a la describió como la estable intención de tratar a cada uno de ellos como se merece.

En los reinados de Diocleciano y Constantino se prepararon novedosas ediciones de los comentarios de Ulpiano a los edictos del pretor, más allá de que se agregaron otros que respondían a las peculiaridades escolásticas de los autores de aquella época. Todo esto logró que sus proyectos se transformaran en las preferidas por los compiladores del Digesto que se realizó a lo largo del reinado de Justiniano.

Esto se debió a que Ulpiano vivió en la última una parte de la época tradicional, y su estilo era mucho más comprensible para los juristas siguientes que el de aquéllos que le habían antecedido en el cargo. En el Digesto se dieron a conocer mucho más de tres mil extractos cuya autoría se le adjudicaba, más allá de que se extrajeron de las copias posclásicas de sus escritos. Sus comentarios a los edictos tuvieron enorme difusión en la época posclásica, y han quedado reflejados en los Fragmenta Vaticana y en la Collatio legum Mosaicorum et Romanorum.

Sus proyectos fueron intensamente estudiados por los estudiantes de las academias de leyes del Imperio a lo largo del final del siglo III y inicios del siglo IV. Pronto se empezó a ofrecer una interpretación dogmática de sus escritos; se sistematizó su estudio, de manera que fuera mucho más simple, y se le atribuyó la autoría de proyectos que de todos modos habían sido escritas por juristas posclásicos que imitaban sus estilo, como fue la situacion de los Tituli ex- Corpore Ulpiani.

En el año 321 el emperador Constantino prohibió que se alegaran a lo largo de los juicios extractos de las proyectos que comentaban escritos de Ulpiano, puesto que se estimó que falseaban su pensamiento. Un decreto de Valentiniano III estableció en el año 426 que los únicos juristas que podían citarse en el transcurso de un juicio como autoridades del ius eran Papiniano, Paulo, Ulpiano, Modestino y Gayo; en el caso de que múltiples críticas entraran en enfrentamiento, debía predominar la de Papiniano. Los escritos de Ulpiano volvieron a ser leídos y compilados a fines del siglo V en Constantinopla.

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Está claro que conocer en profundidad a Ulpiano es algo que está reservado a escasas personas, y que intentar reconstruir quién fue y cómo fue la vida de Ulpiano es una especie de puzzleque probablemente consigamos reconstruir si contribuimos todos en conjunto.

Por eso, si eres de las personas que confían en que colaborando es posible crear algo mejor, y tienes información acerca de la existencia de Ulpiano, o acerca de algún detalle de su persona u obra que no se contemple en esta biografía, te pedimos que nos lo hagas llegar.

Los matices y las sutilezas que ocupan nuestras vidas son en todos los casos esenciales, ya que marcan la diferencia, y en la ocasión de la vida de una persona como Ulpiano, que detentó su relevancia en una época concreta, es vital tratar de brindar una visión de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.

No lo dudes y contacta con nosotros para narrarnos qué sabes sobre Ulpiano. Estaremos ilusionados de perfeccionar esta biografía con más información.