Ya sea inspirando a otros o siendo una pieza esencial de la acción. Tsuguharu Fujita es uno de esos sujetos cuya vida, realmente, merece nuestro interés por el grado de influencia que tuvo en la historia.Comprender la biografía de Tsuguharu Fujita es conocer más sobre un periodo concreto de la historia del género humano.
Conocer las luces y las sombras de las personas relevantes como Tsuguharu Fujita, personas que hacen rodar y cambiar al mundo, es algo esencial para que seamos capaces de valorar no sólo la existencia de Tsuguharu Fujita, sino la de toda aquellas gentes que fueron inspiradas por Tsuguharu Fujita, aquellas personas a quienes de de una forma u otra Tsuguharu Fujita influenció, y sin duda, comprender y entender cómo fue el hecho de vivir en el periodo histórico y la sociedad en la que vivió Tsuguharu Fujita.
Vida y Biografía de Tsuguharu Fujita
(Tokio, 1886 - Zürich, 1968) Pintor japonés popular asimismo en el planeta artístico como Fujita Tsuguji. Era integrante de una familia de samuráis de prominente rango. Realizó sus estudios de pintura en la Escuela Imperial de Bellas Artes de Tokio, donde se graduó en 1910. En 1911 logró un enorme éxito con su obra El emperador de Corea. En 1913 se trasladó a París. Durante su estancia en la ciudad más importante francesa estableció angostas relaciones con los pintores de europa más esencial del arte moderno, entre aquéllos que estaban Picasso, Matisse y Modigliani. Se transformó en 1919 en integrante de forma anual del Salón de Otoño, para ser integrante persistente del mismo desde el año siguiente.
Regresó a Japón en 1929, donde efectuó una exposición que fue recibida con enorme éxito de crítica. Permaneció allí en el transcurso de un año, para en 1930 establecerse de manera determinante en París. En 1931 viajó por medio de América del Sur, América Central y Norteamérica, pasando resumidamente por Japón en su viaje de regreso a Francia en 1933. Durante su corto estancia en Japón pintó múltiples murales, incluyendo el Evento Anual de Akita y el del Festival del Santuario de Miyosi en el Monte Taihei.
En su pintura interpretó con su peculiar estilo oriental distintos temas occidentales; aplicando las técnicas al óleo francesas a las estilos pictóricos nipones, halló la manera de sintetizar estas 2 tradiciones pictóricas de manera singular. Sus proyectos estaban efectuadas predominantemente a la acuarela y al óleo, técnicas que controlaba con enorme maestría. Entre sus temas favoritos resaltaban la naturaleza, los animales familiares, el desvisto femenino y el retrato. Siempre con la singularidad que reflejaba su capacitación en lo que se refiere al dibujo y la utilización de colores. Sus situaciones eran francesas, sus modelos de europa y sus líneas niponas.
De la pintura oriental adoptó en sus dibujos y cuadros los grafismos precisos y frágiles y la materia pictórica, que en ocasiones adquiría calidades de laca. Algunos críticos incluyeron su obra en el manierismo colorista. Sus trabajos mucho más relevantes, populares por su base negra diluida y un background despacio y blanco que recordaba a la cerámica, fueron Autorretrato con un gato, El gato, Desnudo, Mujer en la playa, Café, Notre-Dame, El salón de Montparnasse, Mi Estudio y Carnavalet.
Durante su historia efectuó esenciales exposiciones en múltiples capitales de europa. Algunas de sus proyectos aparecen en las salas de los mucho más esenciales museos de todo el mundo como el Museo de Arte Moderno de París y el Museo de Artes Decorativos de París. También muy alabada fue la decoración que efectuó por encargo del gobierno japonés para el Pabellón Japonés en la Ciudad Universitaria de París. Realizó ilustraciones para varias proyectos, ente las que resaltó un edición de Japón del Apocalipsis. Obra suya asimismo fueron las vidrieras y murales de la Capilla de Nuestra Señora de la Paz en Reims, efectuadas en 1966.
El estallido de la Segunda Guerra Mundial le forzó a regresar a Japón. Durante la contienda pintó situaciones de peleas para la marina y el ministerio de Defensa nipones. Utilizó su increíble aptitud gráfica y de composición para detallar los campos de guerra de China y el sureste asiático. En 1942 recibió el premio cultural Asahi, el máximo galardón que podía recibir un artista japonés, por su obra El último Día de Singapur.
En 1949 abandonó finalmente Japón. Antes de establecerse finalmente en Francia, continuó un año en Estados Unidos, aprendiendo el arte de tal país. Adoptó la nacionalidad francesa en 1955. Aquejado de una grave patología, se transformó al lado de su mujer al catolicismo. Ambos fueron bautizados en la catedral de Reims el 14 de octubre de 1959, recibiendo el pintor el nombre de Leonardo. Falleció en un centro hospitalario de Zürich.
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