La historia de las civilizaciones la narran aquellos hombres y mujeres queen el transcurrir de los siglos, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han hecho queel mundo, de un modo u otro,progrese.
Si has llegado hasta aquí es porque eres sabedor de la trascendencia que tuvo Sir Philip Francis en la historia. La forma en que vivió y aquello que hizo durante el tiempo que permaneció en el mundo fue decisivo no sólo para quienes trataron a Sir Philip Francis, sino que posiblemente legó una huella mucho más insondable de lo que logremosfigurar en la vida de gente que tal vez nunca conocieron ni conocerán ya jamás a Sir Philip Francis personalmente.Sir Philip Francis ha sido uno de esos seres humanos que, por algún motivo, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre nunca debe borrarse de la historia.
Apreciar lo bueno y lo malo de las personas destacadas como Sir Philip Francis, personas que hacen rotar y transformarse al mundo, es algo esencial para que seamos capaces de valorar no sólo la existencia de Sir Philip Francis, sino la de toda aquellas gentes que fueron inspiradas por Sir Philip Francis, gentes a quienes de de una forma u otra Sir Philip Francis influenció, y ciertamente, comprender y entender cómo fue vivir en la época y la sociedad en la que vivió Sir Philip Francis.
(Dublín, 1740 - Londres, 1818) Político y publicista británico. Notable polemista, militó en la oposición whig. En 1773 fue nombrado integrante del Consejo de Bengala, oponiéndose a Warren Hastings. Es considerado como el creador mucho más posible de las Cartas de Junius (1769-1772).
El político y escritor Philip Francis es popular singularmente como creador de las reconocidas Cartas de Junius, publicadas anónimas y de las que no reconoció jamás la paternidad; no obstante, buenas causas dejan atribuirle la autoría con una seguridad prácticamente absoluta. Inició sus ocupaciones políticas en 1756, en las dependencias de la Secretaría de Estado, y en 1762, tras un veloz ascenso, era ahora un considerable funcionario del Ministerio de la Guerra.
Philip Francis participó activamente en las polémicas contemporáneas de carácter político, y, pese a su situación oficial, escribió un alto (si bien impreciso) número de cartas y libelos que publicó siempre y en todo momento bajo pseudónimos. Desde el mes de enero de 1769 al de 1772 se dieron a conocer sus cartas, obra, naturalmente, de alguien que se encontraba muy cerca de personas de elevada situación y conocía por la parte interior hechos de suma importancia.
En marzo de este último año abandonó el Ministerio de la Guerra; tras un viaje por Europa, consiguió un cargo en la administración inglesa de la India, donde durante un decenio sostuvo empeñadas discusiones con el gobernador general Warren Hastings, divergencias que terminaron con un desafío en el que resultó dificultosamente herido. Una vez restituido volvió a Inglaterra, y en 1784 fue escogido integrante del Parlamento. Francis siguió inexorablemente su pelea contra Hastings, en la vana promesa de sucederle en el cargo de gobernador general, y, después de haber fracasado por un par de veces al procurar su reelección para el Parlamento, se retiró a la vida privada.
Sir Philip Francis fue un óptimo liberal y reformador, valeroso en los asaltos a individuos predominantes y también inexorable en la pelea contra la corrupción. Bregó siempre y en todo momento a favor de un gobierno realmente constitucional, mostró algunas simpatías hacia la Revolución francesa, se opuso al comercio de esclavos y figuró entre los creadores de la Society of the Friends of the People (Sociedad de Amigos del País), de cuyo programa original (1793) puede considerársele en parte importante creador. Hombre de espectacular actividad (tenía 4 secretarios y en ocasiones dictaba al tiempo a todos ellos) y de una enorme capacidad, fue vehemente y desprendido, pero asimismo insolente y vengativo en radical, y en determinados casos poco aprensivo en el altercado a sus contrincantes políticos.
Las Cartas de Junius fueron reunidas y publicadas en volumen en 1772. La selección y la sucesión de los temas de esta recopilación no tienen nada de casuales: la primera es un ataque contra los integrantes mucho más relevantes de la administración; en las próximas se agrede con insólita crueldad la carrera del duque de Grafton, como hombre y como ministro.
En julio de 1769, Junius toma partido en la campaña electoral a favor del demagogo John Wilkes, encuentra después una exclusiva víctima en el duque de Bedford, amigo del duque de Grafton, y concluye su invectiva con una llamada al rey, que tiene dentro una beligerante demanda de los actos públicos de Jorge III tras su subida al trono. En las últimas cartas Junius se hace vencedor del incipiente partido extremista que se venía formando por aquel tiempo en Londres bajo la guía de Wilkes; pero cada tema está subordinado al fundamento central: el odio hacia el duque de Grafton.
Junius, a quien Burke llamó "el enorme jabalí del bosque", era bastante con pasión y violento para ser siempre y en todo momento justo, y el tono de la requisitoria personal reemplaza con frecuencia en sus cartas a la objetividad política; pero, pese a esto, entiende los principios políticos con aguda intuición y nos ofrece una exposición de la doctrina whig de claridad inigualable. Vibran en sus acentos el cariño por el bien público, un candente patriotismo y la religión de la independencia. En su estilo se revela, mediante retumbantes invectivas, series de amenazas, epigramas sabrosos y habilísimos juegos verbales, un sólido fondo de buen sentido político expresado en la estabilidad de las oraciones ritmadas, que logró de su creador el mucho más especial libelista inglés de siempre.
¿Qué opinas de la existencia de Sir Philip Francis? ¿Hallaste todo aquello que suponías que ibas a encontrar?
Es cierto que conocer profundamente a Sir Philip Francis es algo que está reservado a escasas personas, y que tratar de reconstruir quién fue y cómo fue la vida de Sir Philip Francis es una especie de rompecabezasque probablemente logremos rehacer si contribuimos juntos.
A causa de esto, si eres del tipo de personas que creen en que colaborando se puede hacer algo mejor, y tienes información en relación con la vida de Sir Philip Francis, o en relación con algún elemento de su persona u obra que no hayamos observado en esta biografía, te solicitamos que nos lo envíes.
Los matices y las sutilezas que llenan nuestras vidas son siempre importantes, ya que destacan la singularidad, y en la ocasión de la vida de alguien como Sir Philip Francis, que poseyó su trascendencia en un momento histórico concreto, es imprescindible tratar de mostrar un aspecto de su persona, vida y personalidad lo más rigurosa posible.
No lo dudes y contacta con nosotros para narrarnos qué sabes tú con respecto a Sir Philip Francis. Estaremos encantados de ultimar esta biografía con más información.