Si has llegado hasta aquí es porque tienes conocimiento de la relevancia que tuvo Salustiano Olózaga en la historia. La forma en que vivió y aquello que hizo durante el tiempo que permaneció en la tierra fue decisivo no sólo para quienes frecuentaron a Salustiano Olózaga, sino que posiblemente produjo una huella mucho más honda de lo que logremosconcebir en la vida de gente que tal vez jamás conocieron ni conocerán ya jamás a Salustiano Olózaga en persona.Salustiano Olózaga fue una de esas personas que, por alguna razón, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.
Conocer las luces y las sombras de las personas relevantes como Salustiano Olózaga, personas que hacen rodar y cambiar al mundo, es una cosa básica para que seamos capaces de apreciar no sólo la existencia de Salustiano Olózaga, sino la de toda aquellas gentes que fueron inspiradas por Salustiano Olózaga, aquellas personas a quienes de de una u otra forma Salustiano Olózaga influenció, y indudablemente, comprender y entender cómo fue vivir en el periodo histórico y la sociedad en la que vivió Salustiano Olózaga.
Las biografías y las vidas de personas que, como Salustiano Olózaga, seducen nuestro interés, tienen que servirnos siempre como referencia y reflexión para conferir un marco y un contexto a otra sociedad y otra época de la historia que no son las nuestras. Hacer un esfuerzo por entender la biografía de Salustiano Olózaga, porqué Salustiano Olózaga vivió del modo en que lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo en su vida, es algo que nos impulsará por un lado a vislumbrar mejor el alma del ser humano, y por el otro, la manera en que avanza, de forma inexorable, la historia.
(Oyón, Álava, 1805 - Enghien, Francia, 1873) Abogado y político liberal que alcanzó la jefatura del Gobierno en 1843. Durante el Trienio Liberal (1820-1823) participó en varios círculos constitucionalistas, empezó a ejercer como letrado, perteneció a la Milicia Nacional y, como integrante de esta, acompañó en 1823 a las Cortes en los desplazamientos a Sevilla (abril) y Cádiz (septiembre), en su escapada de las tropas invasoras conocidas como los Cien Mil Hijos de San Luis.
Restaurado ese año el rey Fernando VII en el absolutismo, debió pasar a la clandestinidad, donde se sostuvo hasta 1831, en el momento en que se exilió a Francia. Dos años después, antes del fallecimiento del Rey, regresó a España al favorecerse de la amnistía concedida por la reina gobernadora María Cristina de Borbón, mujer de este.
Integrante del Partido Progresista, en 1835 fue nombrado jefe político (gobernador civil) de Madrid por el presidente del gobierno, Juan Álvarez Mendizábal, cargo en el que continuó hasta la substitución de este un año después. Elegido diputado en el mes de febrero de 1836 y en el mes de septiembre del mismo año (en los comicios para las Cortes Constituyentes), participó en la elaboración de la Constitución de 1837. En 1840 fue enviado como embajador a París.
En abril de 1843 resultó escogido presidente del Congreso de los Diputados y, el 20 de noviembre siguiente, terminada la regencia de Espartero (en cuya caída tuvo bastante que ver), se le nombró presidente de gobierno. En ese cargo duró solo unos días (hasta el 5 de diciembre), en tanto que se le acusó de coaccionar a la reina Isabel II (quien, con trece años, terminaba de ser declarada mayor de edad) para disolver las Cortes y convocar novedosas selecciones.
Conspirador nato, estuvo detenido y desterrado en múltiples oportunidades a lo largo del predominio del Partido Moderado, pero en 1854, tras el triunfo de la Vicalvarada, volvió a desempeñar el cargo de embajador en París. Representó desde 1849 la pureza del progresismo, en oposición a la escisión democrática que pretendía radicalizar el sistema político, lo que no le impidió buscar resoluciones revolucionarias que derrocaran a Isabel II.
Tras la revolución de 1868, que destrono a esta y en cuya preparación había participado desde su exilio parisino, Salustiano Olózaga fue de nuevo escogido diputado en el mes de enero del año siguiente y encabezó la comisión encargada de redactar la Constitución de 1869, eje legal del Sexenio Democrático hasta la instauración de la I República.
¿Qué juicio te merece la existencia de Salustiano Olózaga? ¿Has hallado la información que deseabas hallar?
Evidentemente conocer profundamente a Salustiano Olózaga es algo que se reserva a escasas personas, y que tratar de recomponer la persona que fue y el modo en que vivió la vida de Salustiano Olózaga es una especie de puzzleque probablemente podamos reconstruir si contribuimos todos juntos.
Por ese motivo, si eres de las personas que creen en que de forma colaborativa se puede crear algo mejor, y conservas información sobre la vida de Salustiano Olózaga, o sobre algún aspecto de su figura u obra que no se contemple en esta biografía, te solicitamos que nos lo envíes.
Las sutilezas y las peculiaridades que llenan nuestras vidas son decididamente imprescindibles, ya que marcan la diferencia, y en la ocasión de la vida de un ser como Salustiano Olózaga, que tuvo su importancia en un momento histórico concreto, es esencia procurar ofrecer una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más rigurosa posible.
Sin dudarlo, contacta con nosotros para narrarnos qué sabes tú acerca de Salustiano Olózaga. Estaremos muy contentos de perfeccionar esta biografía con más información.