La historia de la civilización la cuentan los hombres y mujeres queen el paso de los años, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han ocasionado quela sociedad, de un modo u otro,prospere.
Las biografías y las vidas de personas que, como Rosario Castellanos, cautivan nuestro interés, deben valernos siempre como referencia y reflexión para ofrendar un marco y un contexto a otra sociedad y otra etapa de la historia que no son las nuestras. Tratar de entender la biografía de Rosario Castellanos, el motivo por el cual Rosario Castellanos vivió del modo en que lo hizo y actuó del modo en que lo hizo durante su vida, es algo que nos impulsará por un lado a comprender mejor el alma del ser humano, y por el otro, la forma en que avanza, de forma inevitable, la historia.
(Ciudad de México, 1925 - Tel Aviv, 1974) Narradora y poeta mexicana, considerada en este segundo género la más esencial del siglo XX en su país. Durante su niñez vivió en Comitán (Chiapas), de donde procedía su familia. Rosario Castellanos cursó estudios de letras Universidad Nacional Autónoma de México; por esos años se relacionó con escritores como Jaime Sabines, Ernesto Cardenal y Augusto Monterroso. En Madrid complementaría su capacitación con tutoriales de estética y estilística.
Trabajó en el Instituto Indigenista Nacional en Chiapas y en Ciudad de México, preocupándose de las condiciones de vida de los indígenas y de las mujeres en su país. En 1961 consiguió un puesto de maestra en la Universidad Autónoma de México, donde enseñó filosofía y literatura; más tarde desarrolló su tarea enseñante en la Universidad Iberoamericana y en las universidades de Wisconsin, Colorado y también Indiana, y fue asesora del Pen Club de México. Dedicada a la docencia y a la promoción de la civilización en distintas instituciones oficiales, en 1971 fue nombrada embajadora en Israel, donde murió tras tres años, víctima parece ser de un desgraciado incidente familiar.
Una absoluta sinceridad para poner de manifiesto su historia interior, la inadaptación del espíritu femenino en un planeta gobernado por los hombres, la experiencia del psicoanálisis y una melancolía meditabunda forman ciertos elementos definitorios de su obra. Su poesía, donde resaltan los volúmenes Trayectoria del polvo (1948) y Lívida luz (1960), revela las intranquilidades derivadas de la condición femenina, y llamó próximamente la atención de versistas y ensayistas como Octavio Paz y Carlos Monsiváis.
En los trabajos tardíos de este género charla de su experiencia escencial, los tranquilizantes y la sumisión a que se vio obligada desde la niñez por el hecho de ser mujer. Hay en sus poemas un aliento de amor mal correspondido, exactamente el mismo que domina el epistolario Cartas a Ricardo, aparecido póstumamente. Su poesía completa fue reunida bajo el título de Poesía no eres tú (1972).
Su planeta narrativo toma varios elementos de la novela costumbrista. Las novelas Balún Canán (1957) y Oficio de tinieblas (1962) recrean con precisión la atmósfera popular, tan mágica como religiosa, de Chiapas. El razonamiento de la segunda, una premonitoria rebelión indígena en el estado de Chiapas inspirada en un hecho real del siglo XIX, brotó de una toma de consciencia de la situación pobre del campesinado de esa zona mexicana, y de su abandono a los caciques locales por la parte del gobierno federal.
Rosario Castellanos escribió asimismo volúmenes de cuentos ubicados en exactamente el mismo registro: Ciudad Real (1960), Los invitados de agosto (1964) y Álbum de familia (1971). Estas piezas revelan, en una dimensión popular, la conciencia del mestizaje, y en una dimensión personal, la sensación de desamparo que aparece tras la pérdida del amor. Sus ensayos fueron reunidos en la antología Mujer que sabe latín (1974), título inspirado en el refrán sexista: "mujer que sabe latín, ni halla marido ni tiene buen fin", que puede considerarse representativa de su historia, su obra y su visión de la verdad.
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Está claro que conocer en profundidad a Rosario Castellanos es algo que está reservado a escasas personas, y que intentar reconstruir quién y cómo fue la vida de Rosario Castellanos es una especie de rompecabezasque a lo mejor consigamos rehacer si colaboramos juntos.
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Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son en todos los casos esenciales, ya que perfilan la diversidad, y en la ocasión de la vida de una persona como Rosario Castellanos, que tuvo su significación en un momento concreto de la historia, es fundamental tratar de brindar una visión de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.
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