La historia universal la cuentan las mujeres y hombres queen el paso de los años, gracias a su forma de actuar, sus ideales, sus hallazgos o su arte; han ocasionado quela sociedad, de una forma u otra,prospere.
Las biografías y las vidas de personas que, como Richard Wagner, seducen nuestra atención, tienen que valernos siempre como punto de referencia y reflexión para ofrendar un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Intentar comprender la biografía de Richard Wagner, el motivo por qué Richard Wagner vivió del modo en que lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo en su vida, es algo que nos ayudará por un lado a comprender mejor el alma del ser humano, y por el otro, el modo en que se mueve, de forma inexorable, la historia.
(Leipzig, de hoy Alemania, 1813 - Venecia, Italia, 1883) Compositor, directivo de orquesta, poeta y teorético musical alemán. Aunque Wagner prácticamente solo compuso para la escena, su predominación en la música es un hecho incuestionable. Las enormes corrientes musicales surgidas con posterioridad, desde el expresionismo hasta el impresionismo y por continuación o por reacción, hallan en Wagner su auténtico origen, hasta el punto de que ciertos críticos afirman que toda la música moderna nace de la armonía, rica en cromatismos y en discordancias no resueltas, de Tristán y también Isolda.
La niñez de Wagner se vio influida por su padrastro Ludwig Geyer, actor, pintor y poeta, que provocó en el niño su temprano entusiasmo por toda manifestación artística. La literatura, aparte de la música, fue desde el comienzo su enorme pasión, pero el saber de Carl Maria von Weber y, más que nada, el hallazgo de la Sinfonía núm. 9 de Beethoven lo orientaron finalmente hacia el cultivo del arte de los sonidos, si bien sin dejar por este motivo su vocación literaria, que le dejaría redactar sus guiones operísticos.
De capacitación autodidacta, sus progresos en la composición fueron pausados y bien difíciles, agravados por una desequilibrado coyuntura económica, la necesidad de ocuparse a tareas desagradecidas (transcripciones de partituras, dirección de teatros provincianos) y las adversidades para anunciar sus creaciones. Sus primeras óperas -Las hadas, La prohibición de querer, Rienzi- daban a conocer su supeditación a unos modelos en demasía evidentes (Carl Weber, Heinrich Marschner, Vincenzo Bellini, Giacomo Meyerbeer), sin descubrir nada del futuro arte del compositor.
Hasta el estreno, en 1843, de El holandés errante, no halló el compositor su voz personal y propia, aún deudora de ciertas convenciones formales que en siguientes trabajos fueron desapareciendo. Tannhäuser y Lohengrin apuntaron el sendero hacia el drama musical, la renovación de la música escénica que realizó Wagner, tanto a nivel teorético como práctico, en sus siguientes partituras: El oro del Rin (sección primera de la tetralogía El anillo de los nibelungos) y Tristán y también Isolda.
En estas proyectos se suprime la separación entre números, entre recitativos y partes cantadas, tal es así que todo el drama queda configurado como un fluido musical continuo, de carácter sinfónico, en el que la unidad viene dada por el empleo de unos breves temas musicales, los leitmotiv, cuya función, aparte de estructural, es simbólica: cada uno viene a ser la representación de un factor, una situación o un personaje que hace aparición en el drama.
La aportación wagneriana no solo fue revolucionaria en el aspecto formal (en los campos de la armonía, la armonía y la orquestación, con la utilización de una orquesta sinfónica de des muy superiores a las que tenían las comunes orquestas de ópera), sino asimismo dejó una huella perdurable. Su enorme aspiración no era otra que la de poder la Gesamtkunstwerk, la «obra de arte total» donde se sintetizaran todos y cada uno de los idiomas artísticos.
Sus ideas tuvieron muchos incondicionales como opositores. Uno de sus mucho más entusiastas seguidores fue el rey Luis II de Baviera, merced a cuya asistencia económica el músico ha podido crear el Festspielhaus de Bayreuth, un teatro designado de forma exclusiva a la representación de sus dramas musicales, cuya dificultad superaba con bastante la aptitud técnica de las salas de ópera comúnes. En 1876 se procedió a su solemne inauguración, con el estreno del período terminado de El anillo de los nibelungos.
Años antes, en 1870, el compositor había contraído matrimonio con la hija de Franz Liszt, Cosima, con quien había mantenido una tormentosa relación en el momento en que aún se encontraba casada con el directivo de orquesta Hans von Bülow. Wagner dedicó los últimos años de su historia a acabar la composición de Parsifal.
¿Qué te ha parecido la existencia de Richard Wagner? ¿Has podido leer la información que suponías que ibas a hallar?
Está claro que conocer profundamente a Richard Wagner es algo que se reserva a pocas personas, y que pretender recomponer quién y cómo fue la vida de Richard Wagner es una suerte de enigmaque tal vez alcancemos a reconstruir si contribuimos todos en conjunto.
Por eso, si eres del tipo de personas que confían en que de forma colaborativa es posible elaborar algo mejor, y tienes información sobre la existencia de Richard Wagner, o acerca de algún peculiaridad de su personalidad u obra que no hayamos observado en esta biografía, te pedimos que nos lo hagas llegar.
Los matices y las sutilezas que ocupan nuestras vidas son decididamente esenciales, ya que destacan la singularidad, y en el tema de la vida de alguien como Richard Wagner, que detentó su significación en un momento histórico concreto, es imprescindible intentar brindar una visión de su persona, vida y personalidad lo más precisa posible.
Sin titubeos, contacta con nosotros para narrarnos qué conoces sobre Richard Wagner. Estaremos complacidos de perfeccionar esta biografía con más información.