La historia del mundo la cuentan los hombres y mujeres queen el paso de los años, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han ocasionado quela humanidad, de un modo u otro,prospere.
Ya sea inspirando a más personas o siendo una pieza esencial de la acción. Ricardo Alegría es una de esas personas cuya vida, en efecto, merece nuestra consideración por el grado de influencia que tuvo en la historia.Conocer la existencia de Ricardo Alegría es conocer más sobre un periodo concreto de la historia del género humano.
Si has llegado hasta aquí es porque tienes conocimiento de la trascendencia que detentó Ricardo Alegría en la historia. La manera en que vivió y lo que hizo durante el tiempo que permaneció en este mundo fue determinante no sólo para las personas que frecuentaron a Ricardo Alegría, sino que tal vez legó una señal mucho más insondable de lo que logremossospechar en la vida de personas que tal vez jamás conocieron ni conocerán ya nunca a Ricardo Alegría de forma personal.Ricardo Alegría ha sido un ser humano que, por alguna causa, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre nunca debe borrarse de la historia.
Las biografías y las vidas de personas que, como Ricardo Alegría, seducen nuestra curiosidad, deben servirnos en todo momento como punto de referencia y reflexión para conferir un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Tratar de entender la biografía de Ricardo Alegría, el motivo por el cual Ricardo Alegría vivió de la forma en que lo hizo y actuó del modo en que lo hizo durante su vida, es algo que nos ayudará por un lado a conocer mejor el alma del ser humano, y por el otro, la manera en que avanza, de forma implacable, la historia.
(Ricardo Enrique Alegría Gallardo; San Juan, 1921 - 2011) Historiador y antropólogo puertorriqueño. Tras inclinarse desde su temprana adolescencia por el estudio de las disciplinas humanísticas, cursó el Bachillerato en la Universidad de Puerto Rico y marchó entonces a los Estados Unidos de América para efectuar, en Chicago y Harvard, estudios de postgrado.
En el país estadounidense, merced a una beca de la Fundación Guggenheim, ha podido cursar el doctorado (1953-55) y conseguir, por último, el título de doctor en Filosofía y Letras. De regreso a su país natal, Ricardo Alegría resaltó por sus estudios sobre la historia indígena de Puerto Rico, plasmados en varias indagaciones arqueológicas y en distintas trabajos académicos (libros, productos, charlas).
Próximamente se transformó en entre las figuras primordiales del panorama intelectual puertorriqueño, en el que desempeñó cantidad considerable de funcionalidades: fue principal creador y organizador de la Escuela y los Talleres de Artes Plásticas de Puerto Rico; promotor de la célebre Bienal del Grabado Latinoamericano; principal creador y directivo del Centro de Investigaciones Arqueológicas y Etnológicas; directivo y organizador del Museo de Antropología, Historia y Arte de la Universidad de Puerto Rico (Recinto de Río Piedras); catedrático de Antropología en tal facultad; directivo del Instituto de Cultura Puertorriqueña y directivo -también- de la gaceta que propaga este organismo. Además, Ricardo Alegría fue Presidente del Centro de Estudios Avanzados, organismo del que forman parte múltiples países del Caribe.
Su incesante interés por el legado arqueológico de los primeros pobladores de la isla antillana le valió, entre otros premios y distinciones, el galardón Cronic-Shield Award, que entrega el National Trust for Historic Preservation, de los Estados Unidos, y la Medalla Nacional de Humanidades, que recibió en 1993 de manos del presidente Bill Clinton.
En el estudio de la historia vieja puertorriqueña, Ricardo Alegría ahondó asimismo en el mestizaje de las tradiciones hispana y africana que se hallaron en la islas, con particular atención a la pervivencia de estas tradiciones en las prácticas, las maneras de vida, el arte habitual, la religión y el folclore de Loíza Aldea. De todo ello dejó un abundante material impreso en sus ensayos titulados La celebración de Santiago Apóstol en Loíza Aldea y Gozos a Santiago y cantos de vejigantes.
Además de estos títulos, el escritor dio a la imprenta otros importantes ensayos en los que abordó el estudio de la población boricua. Entre ellos, sobresalen los titulados Cacicazgo among the indígenas of the Wets Indies (1947) y La población aborigen antillana y su relación con otras áreas de América (1948); también, y con la colaboración de su mujer Carmen Pons en calidad de ilustradora, efectuó una adaptación de sus saberes históricos y antropológicos a los proyectos de la escuela elemental, a través de una obra llamada Historias de nuestros indios.
En su infatigable tarea cultural, con cerca de setenta años de edad, Ricardo Alegría aceptó la dirección de los trabajos premeditados a volver a poner el edificio del Seminario Conciliar (1989), donde después creó un programa de bachillerato sobre estudios puertorriqueños.
Su predominación y magisterio se dejaron ver en las novedosas generaciones de investigadores del pasado de Puerto Rico, entre aquéllos que Ricardo Alegría ha sobresalido asimismo por su encendida defensa del llamado término de "puertorriqueñidad" como clave de la búsqueda de una identidad propia para sus compatriotas.
¿Qué te ha parecido la crónica de la vida de Ricardo Alegría? ¿Hallaste la información que pensabas que ibas a hallar?
Sin duda alguna conocer en profundidad a Ricardo Alegría es algo que está reservado a escasas personas, y que intentar reconstruir quién fue y cómo fue la vida de Ricardo Alegría es una especie de rompecabezasque a lo mejor alcancemos a reconstruir si contribuimos conjuntamente.
Debido a esto, si eres de las personas que confían en que de modo colaborativo existen posibilidades de hacer algo mejor, y posees información en relación con la existencia de Ricardo Alegría, o con respecto a algún matiz de su figura u obra que no se observe en esta biografía, te solicitamos que nos lo envíes.
Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son decididamente fundamentales, ya que destacan la singularidad, y en la ocasión de la vida de alguien como Ricardo Alegría, que detentó su trascendencia en un momento histórico concreto, es vital procurar ofrecer un panorama de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.
No lo dudes y contacta con nosotros para narrarnos qué conocimientos tienes tú con respecto a Ricardo Alegría. Estaremos complacidos de poder completar esta biografía con más información.