Si has llegado hasta aquí es porque eres consciente de la relevancia que detentó Pedro Sancho de la Hoz en la historia. La forma en que vivió y lo que hizo durante el tiempo que permaneció en el mundo fue determinante no sólo para quienes conocieron a Pedro Sancho de la Hoz, sino que quizá produjo una huella mucho más insondable de lo que podamosimaginar en la vida de gente que tal vez jamás conocieron ni conocerán ya nunca a Pedro Sancho de la Hoz en persona.Pedro Sancho de la Hoz fue una de esas personas que, por alguna razón, merece ser recordado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.
Conocer las luces y las sombras de las personas destacadas como Pedro Sancho de la Hoz, personas que hacen rodar y cambiar al mundo, es algo fundamental para que seamos capaces de valorar no sólo la existencia de Pedro Sancho de la Hoz, sino la de toda aquellas gentes que fueron inspiradas por Pedro Sancho de la Hoz, gentes a quienes de de una forma u otra Pedro Sancho de la Hoz influenció, y desde luego, conocer y descifrar cómo fue el hecho de vivir en el periodo histórico y la sociedad en la que vivió Pedro Sancho de la Hoz.
Las biografías y las vidas de personas que, como Pedro Sancho de la Hoz, atraen nuestra atención, deben servirnos siempre como punto de referencia y reflexión para ofrendar un marco y un contexto a otra sociedad y otra época de la historia que no son las nuestras. Intentar entender la biografía de Pedro Sancho de la Hoz, el motivo por qué Pedro Sancho de la Hoz vivió como lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo durante su vida, es algo que nos impulsará por un lado a conocer mejor el alma del ser humano, y por el otro, la forma en que se mueve, de forma inexorable, la historia.
(Calahorra?, 1514 - Santiago de Chile, 1547) Cronista y conquistador español. Secretario de Pizarro, continuó la crónica de Estete que cuenta la conquista de Perú. Participó en la acción de Cajamarca y recibió parte del salve de Atahualpa, lo que le dejó regresar a España con una enorme fortuna (1534). Arruinado, volvió al Perú y tomó parte en la expedición de Valdivia a Chile, pero fue fallecido por el lugarteniente de Valdivia, Francisco de Villagra.
Hermano de Martín de la Hoz, que participó en la expedición de Alcazaba (1534) al ajustado de Magallanes y las islas Malvinas, Pedro Sancho de la Hoz llegó en 1534 a Perú para reemplazar a Francisco de Jerez como secretario de Francisco Pizarro. Éste le encargó la redacción de una crónica de los hechos que tuvieron rincón en Perú entre 1533 y 1534, obra cuyo original se ha perdido y que solo se guarda merced a una traducción italiana, vertida entonces al español para ser incluida en la Historia de la conquista del Perú de Prescott. La Relación de Sancho de la Hoz, fechada en Jauja (Perú) en 1534 y leída en presencia de Pizarro y otros capitanes, prosigue la crónica de Estete y luce por su descriptiva descripción del viaje de los conquistadores.
Sancho de la Hoz intervino en la acción de Cajamarca (Perú) donde Pizarro atrapó a Atahualpa, emperador de los incas, y actuó como escribano en el posterior reparto del fastuoso salve pedido por la independencia del emperador. Gracias a la parte que él mismo recibió, regresó a España y se estableció en Toledo, donde ejercitó como regidor y contrajo matrimonio con doña Guiomar de Aragón.
Sin embargo, poco después estaba arruinado, con lo que no tardó en viajar nuevamente rumbo al Perú (1539), una vez ungido por Carlos V con el título de gobernador de la Terra Australis, esto es, como capitán general de las tropas destinadas al hallazgo y la conquista de las tierras ubicadas al sur del ajustado de Magallanes. Allí, Pizarro le instó a que formara una sociedad conjunta con Pedro de Valdivia, que en esos instantes preparaba la expedición de conquista de Chile. Sin embargo, al no poder costear las cincuenta cabalgaduras, corazas y otras provisiones que debía dar, fue encarcelado en Lima por sus acreedores el suficiente tiempo a fin de que Valdivia partiese hacia Chile sin él, lo que motivó la primera enemistad de Sancho de la Hoz.
Puesto en independencia, viajó en pos de la expedición de Valdivia con la intención de matarlo, pero fue detenido y obligado por Valdivia a romper la sociedad (1540). Durante los años siguientes fomentó y también inspiró distintas tentativas de socavar la autoridad de Valdivia en Santiago de Chile; al final, una exclusiva conjura fue descubierta por Francisco de Villagra, gobernador de Santiago en sepa de Valdivia, quien prendió a Sancho de la Hoz, lo condenó a muerte, lo decapitó y paseó su cabeza por las calles de la ciudad más importante chilena (1547).
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Los matices y las sutilezas que llenan nuestras vidas son decididamente fundamentales, ya que marcan la diferencia, y en el tema de la vida de un ser como Pedro Sancho de la Hoz, que poseyó su significación en un momento histórico concreto, es imprescindible intentar brindar una visión de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.
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