Oswald Schmiedeberg

La historia de las civilizaciones está escrita por las mujeres y hombres quea lo largo del tiempo, gracias a su proceder, sus ideas, sus innovaciones o su ingenio; han originado queel género humano, de una forma u otra,avance.

Conocer lo bueno y lo malo de las personas destacadas como Oswald Schmiedeberg, personas que hacen girar y evolucionar al mundo, es una cosa básica para que seamos capaces de valorar no sólo la vida de Oswald Schmiedeberg, sino la de toda aquellas gentes que fueron inspiradas por Oswald Schmiedeberg, aquellas personas a quienes de de una u otra forma Oswald Schmiedeberg influenció, y por supuesto, comprender y entender cómo fue vivir en el periodo histórico y la sociedad en la que vivió Oswald Schmiedeberg.

Vida y Biografía de Oswald Schmiedeberg

(Kurland, 1838 - Baden-Baden, 1921) Farmacólogo alemán, probablemente la figura mucho más señalada de la ciencia farmacológica del siglo XIX. Demostró de manera exitosa la síntesis del ácido hipúrico en el riñón y descubrió la presencia de fermentos tisulares. Asimismo, determinó la fórmula de la histamina y contribuyó decisivamente al conocimiento farmacológico de los digitálicos y la muscarina. Bajo su férula, la Universidad de Estrasburgo desarrolló, entre 1871 y 1918, una esencial tarea en la fundación de la actualizada ciencia farmacológica.

Efectuó sus estudios de Medicina en la Universidad de Dorpat (Estonia), donde recibió las enseñanzas del que, en esos instantes, era entre las excelencia de la principiante farmacología: Rudolf Buchheim. Este había abierto una vía en el estudio de esa ciencia al erigir allí, en 1847, el primer Instituto de Farmacología Experimental de Europa. Schmiedeberg logró en el año 1866 el Doctorado al enseñar frente al tribunal universitario una proposición que versaba sobre la disolución del cloroformo en la sangre.

A pesar de que sus miras estaban puestas en objetivos mucho más superiores, decidió seguir a lo largo de cierto tiempo en Dorpat, donde se le ofreció, en 1868, un puesto de lector. Esta lealtad a la institución estonia, y sus espléndidos entendimientos farmacológicos, hicieron que se transformara en el sustituto de Buchheim en el momento en que este abandonó terminantemente su situación en el Instituto Farmacológico.

Siendo consciente de que debía dejar esa localidad para llevar a cabo situación su sueño de ofrecer carácter universal a la farmacología, en el año 1872 se dirigió a Estrasburgo, donde se le había brindado un puesto de instructor de farmacología en la facultad. Schmiedeberg creía que la manera más óptima de impulsar su ciencia era hacer un enorme centro farmacológico en el que alumnos de todo el planeta pudieran desarrollar las indagaciones primordiales (en esos instantes la farmacología era observada con cuidado por el estamento médico). El centro desarrollado por él se transformó, con el pasar de los años, en entre los mucho más esenciales de todo el mundo. Más de 150 farmacólogos fueron formados en sus salas. Cuando murió, en el año 1921, pasaban de 40 las cátedras de farmacología de europa ocupadas por estudiantes de su centro.

En Estrasburgo, Schmiedeber efectuó distintos estudios sobre los ácidos carbámicos y la relación entre su composición química y su eficiencia narcótica. También se centró en el análisis de las drogas y los venenos mucho más esenciales populares hasta el momento, entre aquéllos que se incluían la muscarina, la nicotina, el glucósido digitálico y múltiples metales pesados tóxicos. Sus primeras visualizaciones le enseñaron que la ingestión de alcanfor era excretada en forma hidroxilada con una substancia achicada, lo que le llevó al hallazgo del ácido glucurónico. Así fue como ha podido probar que el ácido glucurónico era un ingrediente del cartílago y actuaba como un disacárido de sulfato de condroitina.

La mayoría de sus sacrificios estudiosos la dedicó a desentrañar la química de los mucopolisacáridos y las mucoproteínas; con esto logró sintetizar los elementos del ácido hialurónico y la descripción de su relación con el sulfato de condroitina, el colágeno y los amiloides.

Oswald Schmiedeberg estableció sólidos cimientos para entender con rigor la relación que existe entre la composición química de un fármaco y su acción fisiológica. Él mismo definió la ciencia farmacológica, que solamente tenía cien años de vida, como el estudio de las acciones y los efectos de las drogas en los organismos vivos. A lo largo de su historia llegó a difundir algo mucho más de doscientos productos y libros, aparte de fundar, al lado de Naunyn y Klebs, el popular como Archiv für experimentelle Pathologie und Pharmakologie. Una de sus proyectos mucho más famosa fue Compendio de farmacología, publicada en 1908.

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