La historia de las civilizaciones la escriben aquellos hombres y mujeres quea lo largo de los siglos, gracias a su forma de actuar, sus ideales, sus hallazgos o su arte; han originado quela humanidad, de un modo u otro,progrese.
Si has llegado hasta aquí es porque eres sabedor de la relevancia que detentó Milos Forman en la historia. La forma en que vivió y lo que hizo durante el tiempo que estuvo en este mundo fue determinante no sólo para aquellas personas que conocieron a Milos Forman, sino que quizá legó una señal mucho más insondable de lo que logremosfigurar en la vida de gente que tal vez nunca conocieron ni conocerán ya nunca a Milos Forman en persona.Milos Forman ha sido una de esas personas que, por alguna causa, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.
Apreciar lo bueno y lo malo de las personas relevantes como Milos Forman, personas que hacen rodar y cambiar al mundo, es algo esencial para que seamos capaces de apreciar no sólo la existencia de Milos Forman, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por Milos Forman, gentes a quienes de de una forma u otra Milos Forman influenció, y por supuesto, comprender y entender cómo fue el hecho de vivir en la época y la sociedad en la que vivió Milos Forman.
(Cáslav, 1932 - Danbury, Estados Unidos, 2018) Director de cine checo. Iniciado como escritor de guiones, comenzó en la realización en 1963 y resaltó inmediatamente por su humanismo irónico, por su feroz crítica popular y por su enorme preocupación formal. Mereció el Oscar al mejor directivo en un par de ocasiones, primero por Alguien voló sobre el nido del cuco (1975), y prácticamente una década después por Amadeus (1984). En 1996 dirigió El escándalo de Larry Flynt, con la que consiguió el Oso de Oro del Festival de Berlín.
Tras ocuparse al teatro como actor, escritor de guiones y ayudante de dirección y terminar sus estudios cinematográficos en 1957, Milos Forman alcanzó notoriedad con el éxito de una de sus primeras y personales comedias, Los amores de una rubia (Lásky Jedné Plavovlásky, 1965), que cuenta la narración de una muchacha trabajadora checa que se conquista de un músico. Esta película y la próxima, ¡Al fuego, bomberos! (1968), fueron nominadas para el Oscar a la mejor película de charla no inglesa. Exiliado en Estados Unidos tras la Primavera de Praga (1968), Milos Forman comenzó en Hollywood con Juventud sin promesa (1970), una mordaz crítica a la clase media de su país de adopción, vapuleada por la crítica por tal atrevimiento.
Para su segundo largometraje, Forman decidió asegurarse el éxito crítico-comercial y amoldó el best seller de Ken Kessey Alguien voló sobre el nido del cuco (1975). En una interpretación que marcaría un jalón en su trayectoria, Jack Nicholson encarnó en este película a un criminal que, con la iniciativa de evadirse, finge haberse vuelto desquiciado para ser movido a un sanatorio mental, cuya cotidianidad apacible trastocará con sus inusuales ideas. El largometraje fue un éxito en taquilla y en la liturgia de los Oscar, de la que se llevó cinco estatuillas, entre ellas la de mejor directivo para Forman.
Milos Forman tardó 4 años en regentar el fallido musical hippy Hair (1979) y, antes de dejar Hollywood, efectuó Ragtime (1981), ambiciosa y también atrayente radiografía de la América de principios de siglo. Regresó a su tierra natal para regentar la superproducción estadounidense Amadeus (1984), largometraje basado en la envidia que el genio innato de Mozart lúcida en el mediocre Antonio Salieri; la historia procedía de una parte teatral amoldada a la enorme pantalla por su mismo creador, Peter Shaffer, que había recreado libremente en la escena una vieja y también injustificada tradición romántica sobre la desaparición de Mozart.
El cineasta checo triunfó nuevamente entre el público y la crítica con este magistral largometraje, que recibió nada menos que ocho Oscar y supuso para Forman su segundo Oscar al mejor directivo; no obstante, volvió a desaprovechar la posibilidad y tardó 4 años en estrenar Valmont (1988), perjudicada por el éxito de la superproducción de Stephen Frears fundamentada en exactamente la misma novela de Choderlos de Laclos, Las amistades peligrosas (Dangerous Liaisons, 1988).
En 1996 volvió a las pantallas con El escándalo de Larry Flynt; a este trabajo prosiguió Man on the moon (1999), en el que Jim Carrey da vida a un popular cómico estadounidense, y un año después cooperó como actor en el extenso film de Edward Norton Más que amigos (2000). Su último emprendimiento fue el drama histórico Los espectros de Goya (2005), que rodó en España con el actor español Javier Bardem como personaje principal.
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Está claro que conocer en profundidad a Milos Forman es algo que se reserva a escasas personas, y que tratar de reconstruir la persona que fue y el modo en que vivió la vida de Milos Forman es una suerte de enigmaque con toda probabilidad logremos rehacer si colaboramos todos a la vez.
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Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son en todos los casos esenciales, ya que destacan la singularidad, y en el caso de la vida de un ser como Milos Forman, que poseyó su relevancia en una época concreta, es vital tratar de mostrar un aspecto de su persona, vida y personalidad lo más rigurosa posible.
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