La historia de la civilización la escriben los hombres y mujeres quea lo largo de los siglos, gracias a su proceder, sus ideas, sus innovaciones o su ingenio; han hecho quela civilización, de un modo u otro,avance.
Si has llegado hasta aquí es porque tienes consciencia de la importancia que detentó Marco Fidel Suárez en la historia. El modo en que vivió y las cosas que hizo mientras estuvo en este mundo fue decisivo no sólo para quienes trataron a Marco Fidel Suárez, sino que tal vez produjo una señal mucho más insondable de lo que logremosimaginar en la vida de gente que tal vez jamás conocieron ni conocerán ya nunca a Marco Fidel Suárez en persona.Marco Fidel Suárez fue uno de esos seres humanos que, por alguna causa, merece ser recordado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.
Las biografías y las vidas de personas que, como Marco Fidel Suárez, seducen nuestro interés, tienen que servirnos en todo momento como referencia y reflexión para ofrendar un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Intentar comprender la biografía de Marco Fidel Suárez, el motivo por el cual Marco Fidel Suárez vivió del modo en que lo hizo y actuó del modo en que lo hizo en su vida, es algo que nos ayudará por un lado a entender mejor el alma del ser humano, y por el otro, la manera en que se mueve, de forma inevitable, la historia.
(Bello, 1856 - Bogotá, 1927) Escritor y político colombiano, presidente de Colombia entre 1918 y 1921. De origen muy humilde, deseó ser sacerdote, pero su condición de hijo natural se lo impidió. Desempeñó en su mocedad distintos cargos subalternos: portero de la Biblioteca Nacional, usado del Banco de Colombia, de un instituto, etcétera.; pero nunca abandonó el estudio y ha podido de esta forma ir consiguiendo una sólida preparación, singularmente en lo referente a los inconvenientes del lenguaje y del derecho en todo el mundo.
En el momento en que en 1881, con ocasión del centenario del nacimiento de Andrés Bello, fue convocado un certamen conmemorativo, Marco Fidel Suárez consiguió la medalla de oro con su Ensayo sobre la Gramática de don Andrés Bello, que publicó la Academia Colombiana en 1884 y se editó por año siguiente en La capital de españa. Suárez adquirió de esta manera relieve en el planeta de las letras y no tardó en tenerlo en el campo de la política, en el que su situación conservadora de hombre de derecho lo fue llevando a los puestos de diputado, senador, ministro de Instrucción Pública y de Relaciones Exteriores y, por último, a presidente de la República (1918-1921), cargo que abandonó antes que expirara su orden, frente al feroz ataque de que era objeto en el Congreso.
El gobierno de Marco Fidel Suárez resultó contradictorio desde sus principios, ya que al unísono que promulgaba la caridad cristiana y la benevolencia y asistencia de los ricos a los pobres como la mejor solución a los incipientes inconvenientes sociales, su acción fue abiertamente hostil a las reivindicaciones obreras. Sin embargo, se realizaron esenciales reformas en temas de ordenamiento: el 27 de noviembre de 1918 se creó el impuesto sobre la renta; el 5 de diciembre de 1919 se creó en Barranquilla la compañía de aviación Sociedad Colombo Alemana de Transporte Aéreo (SCADTA), predecesora de la presente Avianca, que se inauguró en el mes de julio de 1920 y que fue vanguardista en el transporte aéreo en América Latina.
Su gobierno definió una política exterior abiertamente pronorteamericana (su lema: respice polum, ver al norte), lo que correspondió en parte a la novedosa situación construída por la Primera Guerra Mundial, que acentuó la hegemonía económica de los Estados Unidos, y en parte a ocasiones locales mediadas por la firma del tratado Urrutia-Thomson y la determinación de la política petrolera por lo que respecta a las concesiones. Durante el orden de Suárez se memoró el centenario de la guerra de Boyacá y se creó la Cruz de Boyacá, condecoración para oficiales del ejército que después se realizó extensiva a los civiles.
En el lote económico, en el mes de octubre de 1920 se inició una agónica crisis económica: el café se cotizó entre diez y 11 centavos la libra, y el dólar se pagó al 130 por ciento. La crisis se acentuó frente a la cercanía de las selecciones de presidentes y la división del partido de gobierno, lo que tuvo como secuelas un incontenible descontento y desórdenes sociales, debidos asimismo a la intención de hacer más simple la aprobación del tratado con los Estados Unidos, que el Senado empezó a debatir el 22 de agosto de 1921. La bien difícil coyuntura económica, unida a algún negocio personal muy criticado y a la persistente presión de la Cámara de Representantes, singularmente de Laureano Gómez, provocaron la renuncia de Suárez el 11 de noviembre de 1921.
Sus últimos años fueron los mucho más fértiles de su historia literaria, ya que los dedicó fundamentalmente a la redacción de los Sueños de Luciano Pulgar. El propósito primordial de esta obra fue defenderse de ciertos cargos personales y de determinadas acusaciones que la prensa y el Parlamento habían hecho contra su gobierno. Como estos escritos, por su carácter polémico y por sus alusiones personales, despertaron vivo interés en el público, Marco Fidel Suárez resolvió continuarlos en serie prácticamente indefinida: su integridad ocupa cerca de 12 volúmenes.
Desde el criterio literario, los Sueños de Luciano Pulgar, redactados en forma dialogada, ponen de relieve todas y cada una de las virtudes estilísticas que hicieron de Suárez un escritor realmente tradicional. Desde su juventud había cultivado los estudios gramaticales, y a la vera de Rufino José Cuervo, Rafael María Carrasquilla, Miguel Antonio Caro y Antonio Gómez Restrepo, había señalado como uno de los más importantes profesores de la filología castellana. En cuanto a la materia tratada, hay en los Sueños de todo: historia política del país, temas gramaticales, cuestiones de orden jurídico y también en todo el mundo, temas religiosos, semblanzas y retratos literarios y recuerdos personales. Son una auténtica enciclopedia de la vida colombiana en sus múltiples puntos. El recuerdo de Quevedo asoma muchas veces, ya que la punzante ironía fue entre las armas de que se valió Suárez para derrumbar a sus contrincantes.
A pesar del enorme interés de los Sueños, no desmerecen al lado de ellos las series de Escritos, la primera de ellas aparecida en 1914, y la otra, tras su muerte (1935); 2 elijas de Escritos se han publicado en 1942 y 1954. Otras proyectos suyas son Estudios gramaticales y El español de mi tierra. Entre sus varios alegatos se destaca la Oración a Jesucristo, obra magna de la oratoria sagrada, pronunciado a lo largo del Congreso Eucarístico Colombiano de 1913. En su libro Semblanzas presentó a múltiples colombianos visibles y ciertos ensayos lingüísticos y también históricos.
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Está claro que conocer en profundidad a Marco Fidel Suárez es algo que está reservado a pocas personas, y que tratar de reconstruir quién fue y cómo fue la vida de Marco Fidel Suárez es una suerte de enigmaque con toda probabilidad alcancemos a reconstruir si cooperamos juntos.
Por ese motivo, si eres de esas personas que creen en que de modo colaborativo se puede hacer algo mejor, y conservas información en relación con la vida de Marco Fidel Suárez, o en relación con algún matiz de su figura u creación que no hayamos observado en esta biografía, te pedimos que nos lo hagas llegar.
Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son en todos los casos esenciales, ya que perfilan la diversidad, y en el caso de la vida de un ser como Marco Fidel Suárez, que tuvo su importancia en un momento histórico concreto, es indispensable procurar brindar una visión de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.
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