Ya sea inspirando a otros seres humanos o siendo una pieza esencial de la acción. Luis de Tapia es uno de esos seres humanos cuya vida, en verdad, merece nuestra consideración debido al grado de influencia que tuvo en la historia.Comprender la vida de Luis de Tapia es comprender más sobre periodo preciso de la historia de la humanidad.
Apreciar las luces y las sombras de las personas significativas como Luis de Tapia, personas que hacen girar y evolucionar al mundo, es algo fundamental para que podamos valorar no sólo la existencia de Luis de Tapia, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por Luis de Tapia, aquellas personas a quienes de un modo u otro Luis de Tapia influenció, y ciertamente, comprender y entender cómo fue vivir en el momento de la historia y la sociedad en la que vivió Luis de Tapia.
Las biografías y las vidas de personas que, como Luis de Tapia, seducen nuestro interés, tienen que servirnos en todo momento como referencia y reflexión para conferir un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Hacer un esfuerzo por comprender la biografía de Luis de Tapia, el motivo por qué Luis de Tapia vivió del modo en que lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo durante su vida, es algo que nos impulsará por un lado a comprender mejor el alma del ser humano, y por el otro, el modo en que avanza, de forma implacable, la historia.
(Madrid, 1871 - Quart de Poblet, Valencia, 1937) Poeta y periodista español. Fue secretario de la sección de literatura del Ateneo madrileño, diputado a Cortes (1931) y un candente defensor de la causa republicana. Su primera recopilación en un libro, Bombones y caramelos (1911), llevó prólogo de Benito Pérez Galdós, y desde ese instante sus reconocidas «coplas del día» formaron las partes mucho más populares de diarios liberales como España novedosa, La Libertad y Ahora, y fueron agarradas en los volúmenes de Coplas del año (1915-1918).
Tras licenciarse en derecho en Madrid, Luis de Tapia inició los estudios de ingeniería, que abandonó para ocuparse al periodismo. Empezó a redactar sus primeros productos y contenidos escritos en la publicación El Evangelio; tenía que ver con una especide de cánticos y epigramas versificados que trataban con picante desenfado temas políticos y de actualidad popular. El éxito de sus escritos le abrió las puertas de otras publicaciones periódicas, entre ellas El Imparcial, El Gato Negro, Nuevo Mundo, Madrid Cómico, La Zarpa y Alma Española, donde las llamadas “Coplas del día” hacían las exquisiteces de los que leen liberales. En 1907 creó una gaceta de carácter satírico con un título que delataba de manera perfecta su talante: Alegría. Algunos años después asimismo fue redactor de La Jornada y La Libertad.
Un buen número de sus mucho más festejadas poesías de juventud (en su haber se cuentan mucho más de diez mil) fueron compendiadas en los libros Salmos (1903-1904), Bombones y caramelos (quizás su título mucho más célebre, prologado por Pérez Galdós en su primera edición, 1911), Coplas (1914), Coplas del año (1915-1918) y Cincuenta coplas de Luis de Tapia (1933). Durante la I Guerra Mundial (1914-1918) escribió crónicas sobre la contienda desde Francia para El Imparcial, y con el advenimiento de la II República en 1931 resultó escogido diputado a Cortes (siempre y en todo momento se había relacionado con conjuntos políticos de izquierda).
De su obra en prosa, quizá no tan famosa como la poética, hay que nombrar los títulos Así vivimos (1916), En casa y en la calle (1917) y Un mes en París. Un día en Reims. Una hora en Madrid (1919), recopilación de las crónicas escritas en Francia. Por otra sección, de su actividad teatral, menos fecunda, resaltan la comedia Rosario o la viuda taimada (1920) y el juguete infantil Matemos al lobo (1922). Fue también secretario de la sección de literatura del Ateneo de Madrid, lugar desde el que defendió la independencia de pensamiento y de expresión a lo largo de los bien difíciles años de la Dictadura de Primo de Rivera (1923-1929).
Al iniciarse la Guerra Civil (1936-1939) se entregó a una incesante tarea periodística en defensa del Gobierno y el ejército republicano y contra el fascismo; en medio de una contienda la editorial El Socorro Rojo publicó una edición particular de sus últimas coplillas. En 1937 emigró a Valencia, donde por el momento no se restituyó de sus lesiones sentimentales. Tanto sus colegas de profesión como sus leyentes agradaron de llamarlo el “poeta del pueblo”.
¿Qué opinas de la crónica de la vida de Luis de Tapia? ¿Hallaste todo aquello que pensabas que ibas a hallar?
Sin duda descubrir en lo más recóndito a Luis de Tapia es algo que está reservado a un grupo limitado de personas, y que intentar reconstruir quién fue y cómo fue la vida de Luis de Tapia es una especie de rompecabezasque probablemente lleguemos a rehacer si cooperamos juntos.
Por esta razón, si eres de las personas que confían en que de modo colaborativo es posible elaborar algo mejor, y conservas información sobre la existencia de Luis de Tapia, o acerca de algún faceta de su personalidad u obra que no hayamos observado en esta biografía, te pedimos que nos lo envíes.
Los matices y las sutilezas que ocupan nuestras vidas son siempre imprescindibles, ya que destacan la singularidad, y en el tema de la vida de una persona como Luis de Tapia, que poseyó su importancia en una época concreta, es esencia tratar de mostrar una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más precisa posible.
No lo dudes y contacta con nosotros para contarnos qué sabes sobre Luis de Tapia. Estaremos complacidos de completar esta biografía con más información.