Luis Coloma

Ya sea inspirando a otros o formando parte de la acción. Luis Coloma es uno de esos seres humanos cuya vida, sin duda alguna, merece nuestra atención debido al grado de influencia que tuvo en la historia.Conocer la existencia de Luis Coloma es conocer más acerca de un periodo concreto de la historia del ser humano.

Si has llegado hasta aquí es porque tienes conocimiento de la importancia que tuvo Luis Coloma en la historia. Cómo vivió y las cosas que hizo mientras permaneció en la tierra fue decisivo no sólo para quienes trataron a Luis Coloma, sino que a caso legó una huella mucho más insondable de lo que logremosfigurar en la vida de personas que tal vez jamás conocieron ni conocerán ya jamás a Luis Coloma de modo personal.Luis Coloma fue una de esas personas que, por alguna razón, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre nunca debe borrarse de la historia.

Vida y Biografía de Luis Coloma

(Luis Coloma Roldán, llamado el padre Coloma; Jerez de la Frontera, 1851 - Madrid, 1914) Escritor y espiritual jesuita español. Inició sus estudios en la Escuela Naval Preparatoria (1863) y después cursó derecho en Sevilla. Se trasladó más tarde a Madrid, donde comenzó a frecuentar las tertulias distinguidos, en las que reunió elementos que después habrían de servirle para la creación de su obra literaria. Aun en el momento en que letrado, no ejercitó la profesión; cooperó, en cambio, en 2 periódicos de Madrid y se realizó propagandista de la restauración borbónica.

Un hecho prácticamente mortal, una grave herida en el pecho gracias a habérsele disparado el revólver que limpiaba, consolidó su resolución de hacerse jesuita; y de esta manera, en 1873 ingresó en el seminario de Poyanne y el año siguiente era ordenado sacerdote. Sin embargo, no por este motivo abandonó el periodismo: lo mismo que el libro, el jornal le servía no tanto para entretener para aleccionar al público.

En su producción literaria pasó del costumbrismo de las Lecturas recreativas (1887) a la sátira popular de Pequeñeces (1891), novela cuya aparición provocó enorme revuelo, por cuanto su descripción de un planeta lleno de vicios y vergonzosas debilidades fue considerada una crítica personal; a lo largo de quince días el Heraldo de Madrid estuvo publicando juicios y equivocadas interpretaciones que fastidiaron al creador.

Pese a la oposición de determinados ámbitos conservadores, Luis Coloma adoptó las técnicas y principios naturalistas de Émile Zola, que defendía el objetivismo del creador y el determinismo de la conducta de los individuos, si bien matizadas por ciertos elementos propuestos por Paul Bourget que incitaban a la indagación sicológica de estos. La citada Pequeñeces (1890-1891), donde realizó una virulenta crítica de la sociedad madrileña y, singularmente, de la aristocracia de la Restauración, es su obra mucho más habitual.

Asimismo reflejó un moralismo componente en otras novelas y cuentos, como Retratos de otrora (1895), La reina mártir (1902), novela donde exalta la figura de María Estuardo, y, por ejemplo, Jeromín (1905-1907), donde recrea la vida de Juan de Austria. Interesantes son asimismo los Recuerdos de Fernán Caballero; Fernán Caballero era el seudónimo de su amiga Cecilia Böhl de Faber, autora costumbrista a quien Luis Coloma había imitado al comienzo, si bien sin igualar nunca su vigor. Muchos de sus títulos fueron traducidos a múltiples lenguas, y ciertos pasarían más tarde al cine en los tiempos de Francisco Franco. En 1908 ingresó en la Real Academia De españa; su alegato de ingreso versó sobre el padre José Francisco de Isla.

Al padre Luis Coloma se tienen que además de esto múltiples cuentos infantiles, como Periquillo sin temor, La Gorriona, Pelusa y uno especialmente popular: Ratón Pérez. Este último pasa por ser el primer cuento que tiene como personaje principal al Ratoncito Pérez, personaje clásico de viejos orígenes en distintas etnias que trae un obsequio a los pequeños en el momento en que se les cae un diente. Dedicado al futuro rey Alfonso XIII, que tenía entonces ocho años, apareció por vez primera en 1902 en la gaceta Nuevas Lecturas, al lado de otros cuentos; en 1911 se publicó como obra sin dependencia, con ilustraciones de Mariano Pedrero.

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A causa de esto, si eres del tipo de personas que creen en que de forma cooperativa se puede hacer algo mejor, y posees información en relación con la biografía de Luis Coloma, o acerca de algún pormenor de su personalidad u obra que no hayamos observado en esta biografía, te pedimos que nos lo hagas llegar.

Los matices y las sutilezas que llenan nuestras vidas son en todos los casos imprescindibles, ya que destacan la singularidad, y en la ocasión de la vida de alguien como Luis Coloma, que tuvo su trascendencia en una época concreta, es esencia intentar mostrar una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.

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