La historia de la civilización la cuentan los hombres y mujeres quea lo largo del tiempo, gracias a su forma de actuar, sus ideales, sus hallazgos o su arte; han ocasionado queel género humano, de un modo u otro,avance.
Ya sea inspirando a otros seres humanos o siendo una pieza esencial de la acción. Lidia Gueiler Tejada es una de esas personas cuya vida, indudablemente, merece nuestra consideración por el grado de influencia que tuvo en la historia.Conocer la existencia de Lidia Gueiler Tejada es conocer más sobre periodo preciso de la historia de la humanidad.
Apreciar las luces y las sombras de las personas relevantes como Lidia Gueiler Tejada, personas que hacen rotar y transformarse al mundo, es una cosa sustancial para que seamos capaces de valorar no sólo la vida de Lidia Gueiler Tejada, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por Lidia Gueiler Tejada, aquellas personas a quienes de un modo u otro Lidia Gueiler Tejada influenció, y ciertamente, comprender y entender cómo fue vivir en el momento de la historia y la sociedad en la que vivió Lidia Gueiler Tejada.
Las biografías y las vidas de personas que, como Lidia Gueiler Tejada, cautivan nuestro interés, tienen que ayudarnos siempre como referencia y reflexión para ofrendar un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Hacer un esfuerzo por entender la biografía de Lidia Gueiler Tejada, porqué Lidia Gueiler Tejada vivió del modo en que lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo durante su vida, es algo que nos ayudará por un lado a comprender mejor el alma del ser humano, y por el otro, la forma en que se mueve, de forma inexorable, la historia.
(Lidia o Lydia Gueiler Tejada; Cochabamba, 1926 - La Paz, 2011) Política boliviana que encabezó la República de Bolivia (1979-1980). Estudió en el Instituto Americano de Cochabamba, donde cursó sus estudios secundarios y comerciales y en los que consiguió el título de contadora. Desde 1948 militó en el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), en el que se formó políticamente y resaltó como dirigente femenina y de la juventud.
En 1951, al lado de otras veintisiete mujeres, se declaró en huelga de apetito en el Palacio de Justicia de La Paz para reclamar la independencia de compañeros presos y recluídos, la pacificación nacional y contra la anulación de las selecciones que había ganado Víctor Paz Estenssoro. Participó del movimiento de 1952 que dio la presidencia a Paz Estenssoro, el que ha podido comenzar de esta manera su primer orden (1952-1956). En 1953 viajó a Hamburgo como asesora del Consulado General de Bolivia. Más tarde se trasladó en misión diplomática a Bonn como agregada civil, y después como responsable de la legación, hasta el momento en que fue elevada al rango de embajadora. En 1957, en representación del gobierno de Bolivia, asistió a la asamblea de técnicas y líderes de las Oficinas del Trabajo de la Mujer, que sucedió en México.
Lidia Gueiler Tejada fue miembro del congreso de los diputados en las legislaturas 1956-1960 y 1960-1964. En 1963 se unió al Partido Revolucionario de Izquierda Nacional (PRIN), fundado por Juan Lechín Oquendo; Gueiler militaría en el PRIN hasta la década del setenta, en el momento en que regresó a su partido de origen, el MNR. El gobierno militar del general René Barrientos (1964-1969), que derribó en 1964 al presidente Paz Estenssoro, forzó el exilio de Gueiler a Santiago de Chile.
Con las selecciones de 1978, en las que no hubo una mayoría absoluta, el Congreso escogió presidente constitucional interino al presidente del Senado, Walter Guevara Arze, y para la presidencia de la Cámara de Diputados a Lidia Gueiler Tejada. El 1 de noviembre de 1979, el coronel Alberto Natusch Busch incitó un golpe para derrocar al gobierno, refrenando la reacción habitual en la llamada Masacre de Todos Santos en La Paz. Como presidenta de la Cámara de Diputados, Gueiler tomó parte activa en la búsqueda de una solución. El 16 de noviembre de 1979 el Congreso anuló el orden conferido a Walter Guevara Arze y confió el ejercicio de la Presidencia de Bolivia a la presidenta de la Cámara de Diputados. En esas situaciones, Lidia Gueiler se transformó en la primera mujer en el ejercicio de la presidencia de la República boliviana.
El gobierno de Lidia Gueiler, de carácter progresista, estableció una coalición con el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) y debió confrontar a una grave coyuntura económica que procuró reconducir con medidas impopulares, como la devaluación de la moneda, el aumento del precio de los carburantes y los cambios en los costes del transporte y de ciertos alimentos básicos de la cesta familiar; semejantes medidas fueron denunciadas por la Central Obrera Boliviana (COB), que convocó una huelga general y bloqueó los caminos.
En contestación, Gueiler convocó a selecciones para el 30 de junio de 1980, más allá de la oposición del Alto Mando de las Fuerzas Armadas. Allí existía un conjunto fuerte de oposición que retaba el poder civil. Las selecciones se hicieron y, de nuevo, no había un candidato con mayoría absoluta; la resolución quedó a cargo del Congreso. Sin embargo, dieciocho días tras las selecciones, el general Luis García Meza encabezó un golpe para derrocar al gobierno y se realizó con el poder. Lidia Gueiler fue obligada por los militares golpistas a firmar su renuncia a la presidencia. Encontró asilo en la Nunciatura Apostólica, donde continuó tres meses; después viajó a París.
Con el retorno de la democracia a fines de 1982, Lidia Gueiler Tejada fue nombrada embajadora en Colombia por el gobierno de Hernán Siles Zuazo (1982-1985). Durante el cuarto periodo presidencial de Paz Estenssoro (1985-1989) se estableció en Santiago de Chile, alejada de la función pública. Fue aspirante al Senado por Cochabamba con el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR).
Ahora en el Parlamento fue designada presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, vicepresidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores y presidenta de la Subcomisión de Política Social, Salud y Asuntos Campesinos. Como miembro del senado fue convocada por la Corte Suprema de Justicia para testificar en el juicio de responsabilidades contra el ex- dictador Luis García Meza. Entre 1990 y 1993 fue embajadora en Venezuela. En 1993 se retiró de la vida pública.
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