Ya sea inspirando a más personas o siendo parte de la actuación. Ken Loach es una de las personas cuya vida, sin duda alguna, merece nuestra atención por el grado de influencia que tuvo en la historia.Comprender la vida de Ken Loach es conocer más acerca de periodo preciso de la historia del género humano.
Las biografías y las vidas de personas que, como Ken Loach, cautivan nuestra curiosidad, tienen que valernos siempre como punto de referencia y reflexión para proponer un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Hacer un esfuerzo por comprender la biografía de Ken Loach, el motivo por qué Ken Loach vivió del modo en que lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo en su vida, es algo que nos ayudará por un lado a conocer mejor el alma del ser humano, y por el otro, la manera en que se mueve, de forma inevitable, la historia.
(Kenneth Loach; Nuneaton, Warwickshire, 1936) Director de cine británico, creador de títulos como Agenda esconde (1990), Tierra y independencia (1995) o Mi nombre es Joe (1998), en los que plasmó sus inquietudes político-sociales con un fuerte ingrediente de demanda. Realizador heredero del Free Cinema, su obra incidió especialmente en la situación de las clases mucho más desfavorecidas del Reino Unido, más que nada desde el ascenso al poder de Margaret Thatcher.
Hijo de un ingeniero eléctrico, Ken Loach fue un estudiante refulgente que decidió inscribirse en derecho en la riguroso Universidad de Oxford tras haber efectuado un par de años de servicio militar en la aviación del ejército británico. A los veinticinco años entró por vez primera en contacto con las artes escénicas a través del conjunto de teatro de la facultad. Fascinado por el hallazgo, decidió dejar por un tiempo de lado su capacidad carrera de letrado.
Una vez terminados sus estudios, comenzó como asistente de dirección en el Northampton Repertory Theatre, tras unos titubeantes principios en el planeta de la comedia. El cine ganó de forma rápida su atención, y en 1963, tras conseguir una beca concedida por la cadena de radio y televisión British Broadcasting Corporation (BBC), empezó a estudiar realización.
Sus primeras producciones, concebidas para la televisión, eran dramas falsos contados con apariencia de reportaje. En ellos daba cuenta de las contrariedades sufridas por individuos correspondientes a la clase obrera de un país que siempre y en todo momento manifestó una acusada sensibilidad popular. Carol White, la personaje principal de exactamente los mismos, trabajaría con el directivo en Poor Cow (1967), su primera producción para el cine.
A través de su amigo Alan Thornett, a fines de la década de 1960 Loach se realizó asiduo de las asambleas organizadas por la Liga Obrera Socialista (si bien no era integrante de la asociación), entre los movimientos activos de la izquierda británica en la temporada. Si bien fue entre las interfaces cuya ideología marcó mucho más intensamente el devenir político del realizador, la creciente personalización del partido en la figura del ultraortodoxo Gerry Healey le llevó a desvincularse de a poco de exactamente la misma. Loach reconocía el sectarismo de las distintas organizaciones que articulaban el trotskismo en el país, si bien siempre y en todo momento ha insistido en que eran “el único sitio en donde uno podía comprar una educación política”.
Entre 1968 y 1990 la práctica integridad de la producción de Loach fue para la televisión, con salvedad de ciertos largos apartados (como Kes, éxito de crítica en Cannes en 1970). Pero el ascenso al poder de Margaret Thatcher y el creciente desgarro popular favorecido por el ultraliberalismo de sus consecutivos gobiernos llevaron al realizador a mudar de medio.
Un cine puesto en compromiso
En 1990 Loach estrenó Riff Raff, largometraje con el que de alguna manera se reinventaba pese a sostener el alegato de sus prácticamente veinte producciones precedentes. Cine y conciencia de clase, Riff Raff reclamaba el estilo directo, de enorme fuerza narrativa, que había hecho de el el neorrealismo italiano por medio de profesores como Luchino Visconti o Roberto Rossellini. Aunque Loach siempre y en todo momento criticó el llamado realismo socialista (ha recordado en multitud de oportunidades que Trotsky postulaba que el partido debía sostenerse ajeno de la imposición de cualquier inclinación artística), la verdad es que su cine se muestra al público desvisto de todo artificio.
Frecuentemente los equipos de rodaje de Loach intercalan actores expertos y no expertos, hermanados por una visión política común en relación al enfrentamiento y los hechos explicados en el guion. Riff Raff, que cuenta las vivencias de un conjunto de trabajadores de la construcción, respondía completamente a este esquema.
La fórmula se repitió en 1993 con Lloviendo piedras, para bastantes su mejor largometraje. La emocionante historia del irlandés en paro que se mete en líos con un prestamista ilegal para lograr adquirirle a su hija el vestido para la comunión golpeó la conciencia del público europeo, incluyendo el del Festival Internacional de Cine de Cannes, que concedió a la película el premio del Jurado. Contundente y no exento de humor, el cine de Loach se reclamaba al tiempo como una punzante herramienta de demanda popular y un acongojante modo de padecer en la obscuridad de una salón de cine.
En 1995, tras Ladybird, Ladybird, Loach acometió la que probablemente sea su película mucho más ambiciosa: Tierra y independencia (1995). Filme coral pensado en la Guerra Civil de españa, Tierra y independencia se enfoca en las experiencias de un joven combatiente inglés de las Brigadas De todo el mundo. Basada en parte en la obra de George Orwell Homenaje a Cataluña, pero asimismo en el recopilatorio Barcelona Roja: Dietario de la revolución (julio 1936 - enero 1939), era probablemente la mucho más emocionante película nunca dedicada al enfrentamiento, y asimismo la mucho más distanciada de los tópicos comunes en la mayoría de las varias producciones españolas en él centradas.
El ascenso al poder del Partido Laborista de Tony Blair en 1997 no alteró la actitud de Ken Loach, que criticó abiertamente el plan "Welfare to Work" (grupo de proyectos de capacitación laboral para personas desocupadas). El hecho de que el Banco de Inglaterra sugiriese que la tasa de desocupación se encontraba “bajo su nivel natural” llevó a Loach a preguntarse si el tiempo de fluido diálogo entre esta institución y Gordon Brown (ministro de Hacienda del Gobierno Blair) no escondía las auténticas pretenciones de un presidente mucho más habitual entre los partidos conservadores de europa que entre los socialdemócratas.
Desde ese momento, el cine de Loach fué repitiendo su fórmula: historias fáciles de los perdedores del capitalismo, individuos marginales ahogados por inconvenientes de clase que tratan de subsistir en un ambiente hostil. La canción de Carla (1996), Mi nombre es Joe (1998), La cuadrilla (2001) o Felices dieciséis (2002) son ejemplos de los caminos por los que transcurrió la cinematografía de un creador que corría serio peligro de transformarse en objeto de atención única de componentes izquierdistas.
Las cosas, por suerte, modificaron merced al éxito conseguido por la refulgente El viento que bate la cebada en su presentación en la 59ª edición del Festival Internacional de Cine de Cannes. El largometraje, que examina el origen de la guerra civil irlandesa y el nacimiento del IRA (Ejército Republicano Irlandés), consiguió la Palma de Oro del certamen y devolvió a su creador al primer chato de esta época. Loach, que aseguró que el emprendimiento le llevó diez años, se mostró francamente asombrado por el recibimiento que crítica y público dispensaron a su trabajo, al que proseguiría el largometraje These Times.
¿Qué te ha parecido la biografía de Ken Loach? ¿Has hallado todo aquello que pensabas que ibas a encontrar?
Está claro que llegar a comprender a Ken Loach es algo que está reservado a un grupo limitado de personas, y que tratar de reconstruir quién y cómo fue la vida de Ken Loach es una suerte de enigmaque probablemente alcancemos a rehacer si contribuimos juntos.
Por eso, si eres del tipo de personas que confían en que de forma cooperativa es posible elaborar algo mejor, y conservas información sobre la biografía de Ken Loach, o acerca de algún detalle de su figura u creación que no se contemple en esta biografía, te pedimos que nos lo hagas llegar.
Las sutilezas y las peculiaridades que llenan nuestras vidas son decididamente imprescindibles, ya que perfilan la diversidad, y en el tema de la vida de alguien como Ken Loach, que detentó su significación en una época concreta, es fundamental procurar mostrar una visión de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.
Sin titubeos, contacta con nosotros para relatarnos qué sabes tú con respecto a Ken Loach. Estaremos ilusionados de poder completar esta biografía con más información.