Junichiro Koizumi

La historia del mundo la narran las personas quea lo largo de los siglos, gracias a su forma de actuar, sus ideales, sus hallazgos o su arte; han ocasionado quela civilización, de una forma u otra,prospere.

Ya sea inspirando a otros seres humanos o formando parte de la acción. Junichiro Koizumi es una de las personas cuya vida, en efecto, merece nuestra consideración por el grado de influencia que tuvo en la historia.Comprender la biografía de Junichiro Koizumi es conocer más acerca de una época concreta de la historia de la humanidad.

Si has llegado hasta aquí es porque eres consciente de la importancia que atesoró Junichiro Koizumi en la historia. La forma en que vivió y aquello que hizo durante el tiempo que permaneció en la tierra fue decisivo no sólo para las personas que conocieron a Junichiro Koizumi, sino que a lo mejor dejó una huella mucho más insondable de lo que podamosimaginar en la vida de gente que tal vez jamás conocieron ni conocerán ya nunca a Junichiro Koizumi en persona.Junichiro Koizumi ha sido un ser humano que, por alguna causa, merece ser recordado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.

Apreciar lo bueno y lo malo de las personas relevantes como Junichiro Koizumi, personas que hacen girar y evolucionar al mundo, es una cosa fundamental para que podamos poner en valor no sólo la existencia de Junichiro Koizumi, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por Junichiro Koizumi, gentes a quienes de de una forma u otra Junichiro Koizumi influenció, y indudablemente, entender y comprender cómo fue vivir en la época y la sociedad en la que vivió Junichiro Koizumi.

Vida y Biografía de Junichiro Koizumi

(Yokosuka, 1942) Político japonés, presidente de Japón entre 2001 y 2006. Junichiro Koizumi nació el 8 de enero de 1942 en Yokosuka, prefectura de Kanagawa, feudo político de su familia, enlazada al PLD desde su fundación en 1955. Su abuelo fue vicepresidente de la Cámara de Representantes y ministro de Correos y Telecomunicaciones, y su padre, directivo general de la Agencia de Defensa, cargo semejante a ministro de Defensa. Estudió economía en la Universidad Keio, por la que se licenció en 1967, y más tarde amplió estudios en la London School of Economics.

Afiliado al PLD a los dieciocho años, empezó su trayectoria política como secretario parlamentario del presidente Takeo Fukuda en 1970. Fue escogido diputado por Kanagawa en 1972 y, desde esa fecha hasta 2001, fue reelegido sin interrupción. Secretario de Estado de Finanzas en 1979 y presidente del Comité de Finanzas del PLD, fue un par de veces ministro de Sanidad (1988-1989 y 1996-1998), cargo en el que logró una enorme popularidad.

Ministro de Correos y Telecomunicaciones entre 1992 y 1996, chocó abiertamente con la dirección del partido al ofrecer un plan para la desaparición del ministerio y la privatización de sus servicios postales y de ahorro, que a la postre no ha podido efectuar, si bien la iniciativa se consideró pertinente desde el criterio fiscal. A partir de ese episodio, quedó estigmatizado como un excéntrico en la recia composición del PLD.

El ascenso al poder

Candidato fallido a la presidencia de su partido en 1995 y 1998, el agravamiento de la crisis económica le ofreció una exclusiva ocasión política. Empezó por dejar el clan de Yoshiro Mori, el impopular presidente japonés, tan rápido como éste anunció su dimisión a inicios de 2001, y frente a las selecciones de presidentes primarias en el partido, abiertas a sus 2,3 millones de afiliados, montó una vibrante campaña bajo el lema de «Mudar el PLD, mudar Japón», en rivalidad con el jefe de la mucho más vigorosa facción del partido, el ex- presidente Ryutaro Hashimoto, heredero de los clanes de Tanaka y Takeshita, el más destacable ubicado en el corazón del sistema.

Rompiendo todas y cada una de las tradiciones y el pétreo caciquismo, en una ostentosa «revuelta de las provincias», las bases del partido se sublevaron contra las consignas de sus jefes habituales y brindaron el triunfo a Koizumi, que fue escogido presidente del PLD por una mayoría trascendente en la votación estructurada entre el 19 y el 23 de abril, donde consiguió 123 de los 141 sufragios de todas y cada una de las federaciones. Su contrincante Ryutaro Hashimoto, quien partía como preferido, solo logró 15 votos.

Tras la consagración de Koizumi por las bases, los parlamentarios del PLD se inclinaron frente al veredicto habitual y lo escogieron candidato a presidente, para realizar la tradición de que el presidente del PLD dirige el gobierno. La designación quedó extensamente ratificada por ámbas Cámaras de la Dieta el 26 de abril. En la Cámara de Representantes logró 287 votos, muy sobre la mayor parte requerida de 240, y logró 138 en el Senado, 14 votos mucho más de los precisos.

Un emprendimiento reformista

Considerado como un heterodoxo, Koizumi se ha propuesto conectar de forma directa con los componentes del PLD y después con todos y cada uno de los ciudadanos, a través de un alegato populista y nacionalista que chocaba abiertamente con las arraigadas prácticas de los clanes intermedios, pero que resultó definitivo para una victoria llamada a modificar de forma irreversible el panorama político. Prometió reformas estructurales en el partido y de la administración a fin de sacar al país del marasmo económico y la parálisis institucional en que estaba sumido desde 1992. En sus primeras afirmaciones, Koizumi abogó aun por la reforma de las finanzas públicas y la racionalización del sistema bancario, los 2 óbices en que se habían estrellado hasta el momento todos y cada uno de los intentos de sobrepasar el estancamiento.

La capacitación del nuevo gobierno confirmó la responsabilidad y la osadía del emprendimiento reformista, con la incorporación de cinco mujeres y tres personalidades sin partido. Por primera oportunidad, una mujer, Makiko Tanaka, hija del ex- presidente Kakuei Tanaka, se encargó del Ministerio de Asuntos Exteriores. La constitución de un gabinete tan poco usual, sin haberlo consultado con los amos de las facciones, como era prácticamente preceptivo, desencadenó un auténtico seísmo en el PLD, cuyo nuevo secretario general era otro político revolucionario, el diputado Taku Yamasaki, que había caído en desgracia por procurar derruir a Mori.

Koizumi consiguió el respaldo de las formaciones de la coalición del gobierno, el Nuevo Komeito (testera de la fuerte secta budista Soka Gakkai) y el Partido Conservador, pero debió dejar ciertas de sus promesas electorales, entre ellas la de comprobar el producto 9 de la Constitución de 1947, por el que Japón renunciaba a la guerra y a tener un ejército. Inexperto en política exterior, se separó de lo predeterminado y también logró fruncir el ceño a ciertos socios o clientes del servicio, como China y Corea del Sur, al conocer el santuario de Yasukuni, templo sintoísta y tumba simbólica de los soldados nipones caídos a lo largo de la Segunda Guerra Mundial.

Como Mijail Gorbachov en 1985, con el que en ocasiones se le ha relacionado, Koizumi se presentaba como un populista sin complejos, persuadido de que solo el cambio de las construcciones atrofiadas, tanto en el PLD como en la administración estatal, dejaría socorrer al sistema y poner nuevamente a Japón en la vía del dinamismo popular, el resurgir económico y la prosperidad.

No obstante, como es lógico, la circunstancia de ver al PLD, pensamiento del inmovilismo, como agente de la revuelta resultaba cansado azarosa. Después de múltiples vivencias desilusionantes, varios observadores juzgan que el PLD, a imagen del desaparecido Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS), es una esclerótica maquinaria inútil de reformarse.

El lema político de Koizumi era una máxima de Confucio: «El principio primordial de la política es la seguridad». Su reputación de integridad corría paralela a su popularidad de iconoclasta, tanto en la política como en la vida privada. En su instante rechazó el certificado de buenos y fieles servicios que le fue concedido con ocasión de sus 25 años como diputado, distinción acompañada de una prima por mes de 300.000 yenes. Divorciado desde 1982, tiene 2 hijos, que siguen estudios universitarios, y vive con su madre. Vestido con trajes interesantes, con su extendida cabellera esmeradamente despeinada, reta todos y cada uno de los patrones sociales de los líderes del PLD.

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Obviamente llegar a comprender a Junichiro Koizumi es algo que está reservado a pocas personas, y que tratar de reconstruir quién y cómo fue la vida de Junichiro Koizumi es una especie de puzzleque posiblemente lleguemos a reconstruir si contribuimos todos juntos.

Por eso, si eres de aquellos que creen en que de forma cooperativa se puede crear algo mejor, y detentas información en relación con la vida de Junichiro Koizumi, o con respecto a algún faceta de su persona u creación que no hayamos observado en esta biografía, te pedimos que nos lo envíes.

Los matices y las sutilezas que llenan nuestras vidas son siempre esenciales, ya que destacan la singularidad, y en el caso de la vida de alguien como Junichiro Koizumi, que tuvo su trascendencia en una época determinada, es vital tratar de ofrecer una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más precisa posible.

Sin titubeos, contacta con nosotros para referirnos qué sabes tú en relación con Junichiro Koizumi. Estaremos complacidos de completar esta biografía con más información.