Si has llegado hasta aquí es porque tienes consciencia de la relevancia que detentó Julio Llamazares en la historia. Cómo vivió y aquello que hizo mientras permaneció en este mundo fue decisivo no sólo para las personas que frecuentaron a Julio Llamazares, sino que a lo mejor dejó una señal mucho más honda de lo que logremosfigurar en la vida de gente que tal vez nunca conocieron ni conocerán ya jamás a Julio Llamazares en persona.Julio Llamazares fue una de esas personas que, por alguna razón, merece ser recordado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.
Conocer lo bueno y lo malo de las personas relevantes como Julio Llamazares, personas que hacen rodar y cambiar al mundo, es algo fundamental para que podamos poner en valor no sólo la vida de Julio Llamazares, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por Julio Llamazares, gentes a quienes de de una forma u otra Julio Llamazares influenció, y desde luego, entender y comprender cómo fue el hecho de vivir en el periodo histórico y la sociedad en la que vivió Julio Llamazares.
(Vegamián, León, 1955) Escritor español. Repartió su actividad literaria entre la poesía, la novela y los productos periodísticos. Aunque se le ubica en la Generación poética de los ochenta, antologada por Luis Antonio de Villena en Postnovísimos (1986), fue reconocido principalmente a causa de su trabajo como novelista. Licenciado en derecho, abandonó prontísimo el ejercicio de la abogacía para ocuparse al periodismo escrito, radiofónico y televisivo en Madrid, localidad donde estableció su vivienda.
Inició su trayectoria literaria con la publicación del libro de poemas La lentitud de los bueyes (1979). Posteriormente, publicó un insólito ensayo narrativo que se titula El entierro de Genarín (1981), y regresó a la poesía con Memoria de la nieve (1982), poemario que mereció el Premio Literario Jorge Guillén.
Su trabajo como novelista es popular desde la obra que le daría renombre, Luna de lobos (1985), donde aportó resoluciones poéticas al campo narrativo con una historia que versa sobre la sufrida vida de los maquis surgidos de la guerra civil de españa; una epopeya anónima contada a través de un lenguaje de hondo calado poético. De hecho, en su producción hizo gala de un acentuado régimen lírico del lenguaje, unido a una cercanía personal a la naturaleza y al planeta rural, de carácter prácticamente romántico.
Su segunda novela, La lluvia amarilla, de 1988, es un largo monólogo del último habitante de un pueblo del Pirineo de Huesca. La aldea de Anielle, dejada por sus vecinos, semeja desde una loma "un alud de lápidas y pizarras torturadas". Sólo queda allí Andrés de Casa Sosas, un adulto mayor que fué testigo de la progresiva desolación, de la partida de los últimos vecinos, de la desaparición de Sabina, su mujer. Entre el silencio y la soledad, el viejo Andrés merodea como un espectro por las viviendas descuidadas, imaginando, a solas monólogo interior, de qué manera reaccionarán los vecinos del pueblo próximo en el momento en que se enteren de que él está muerto.
Impenitente viajero, Julio Llamazares reunió sus peregrinas vivencias en distintos libros de viajes. En El río del olvido (1990) relató un viaje caminando siguiendo el curso del Curueño, el legendario río de su niñez "que atraviesa en vertical el corazón de la montaña leonesa" y, ingresando además en el corazón del creador, le hace "regresar a los orígenes pues, a pesar de que los panoramas se queden inalterables, una observación nunca se reitera". De 1998 son Tras-os-montes, sobre un viaje por la comarca portuguesa de Braganza, y Los pasajeros de Madrid.
Sus primordiales productos periodísticos integraron los volúmenes En Babia (1991) y Nadie escucha (1995). Ese mismo año, publicó la recopilación de cuentos llamada En mitad de ninguna parte, y, más tarde, Cuaderno del Duero (1999).
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Evidentemente conocer profundamente a Julio Llamazares es algo que se reserva a un grupo limitado de personas, y que tratar de recomponer la persona que fue y el modo en que vivió la vida de Julio Llamazares es una suerte de enigmaque a lo mejor alcancemos a reconstruir si colaboramos juntos.
Por ese motivo, si eres de esas personas que creen en que cooperando se puede crear algo mejor, y posees información en relación con la existencia de Julio Llamazares, o en relación con algún aspecto de su figura u creación que no hayamos observado en esta biografía, te solicitamos que nos lo envíes.
Los matices y las sutilezas que ocupan nuestras vidas son en todos los casos importantes, ya que destacan la singularidad, y en la ocasión de la vida de alguien como Julio Llamazares, que poseyó su importancia en un momento histórico concreto, es imprescindible intentar mostrar un aspecto de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.
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