La historia del mundo la narran aquellas mujeres y hombres quea lo largo de los siglos, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han originado quela civilización, de un modo u otro,prospere.
Ya sea inspirando a más seres humanos o siendo una pieza esencial de la acción. Joseph Von Mering es una de las personas cuya vida, en verdad, merece nuestra atención por el nivel de influencia que tuvo en la historia.Comprender la vida de Joseph Von Mering es comprender más sobre periodo preciso de la historia del género humano.
Si has llegado hasta aquí es porque sabes de la relevancia que tuvo Joseph Von Mering en la historia. El modo en que vivió y las cosas que hizo mientras permaneció en este mundo fue determinante no sólo para las personas que conocieron a Joseph Von Mering, sino que tal vez dejó una huella mucho más vasta de lo que logremosimaginar en la vida de personas que tal vez nunca conocieron ni conocerán ya jamás a Joseph Von Mering en persona.Joseph Von Mering ha sido una persona que, por alguna razón, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre nunca debe borrarse de la historia.
(Joseph o Josef Von Mering; Colonia, 1849 - Halle an der Saale, 1908) Médico y fisiólogo alemán. Joseph Von Mering concluyó su intérvalo de tiempo formativo en medicina en el año 1873, tras haber vivido por las universidades germanas de Bonn, Greifswald y Estrasburgo, donde fue acólito de Freichs y Hoppe-Seyler. A partir de ese año, y a consecuencia de los méritos conseguidos a lo largo de la licenciatura, alcanzó un puesto como médico ayudar en la clínica siquiátrica y de patologías inquietas de Estrasburgo.
Allí tuvo la fortuna de formar parte de manera activa en las indagaciones que, separadamente, estaban haciendo Krafft-Ebing y Jolly. En el año 1875 logró hacerse con sendos puestos de socorrer en la Clínica de la Caridad de Berlín y en el Instituto Fisiológico de Estrasburgo. En esa temporada sus estudios se centraron en desentrañar la acción del mercurio en el organismo humano.
El éxito en su tarea estudiosa empezó desde 1885, en el momento en que logró probar de qué forma en los animales se puede ocasionar la glucosuria mediante la floridzina. En 1886 empezó su tarea enseñante al entrar a un puesto de instructor ordinario en la Universidad de Estrasburgo, localidad donde además de esto se hizo cargo, al tiempo, de regentar una clínica de otorrinolaringología y de ejercer como médico cantonal. Allí fue donde desarrolló su tarea científica más esencial, al lado de su compañero Oskar Minkowski.
En el intérvalo de tiempo comprendido entre 1886 y 1890 los dos trataron de interrumpir la digestión de la grasa en los perros extirpándoles el páncreas, el único órgano popular que segregaba la enzima que dejaba la síntesis de los lípidos. En el lapso de sus ensayos se percataron de que el animal mostraba precisamente los síntomas de la diabetes, al retener el azúcar en la sangre.
Este ensayo dejó conocer, de manera involuntaria, la insulina sintetizada en el páncreas. Aun de esta forma, la insulina no fue apartada y usada como régimen para la diabetes hasta el año 1921. A partir de ese hallazgo, Mering centró sus indagaciones en la diabetes, con lo que trabajó activamente en desentrañar la capacitación del glucógeno en el hígado, en la supresión del azúcar en las cavidades del intestino y en la transformación del glucógeno a través de la diástasis.
Entre 1890 y 1894 Mering dio clases como instructor numerario de laringología en la Universidad de Estrasburgo. En 1900 pasó a regentar la Clínica Médica de exactamente la misma localidad. Los ofrecimientos de diferentes instituciones alemanas llamaban de forma continua a su puerta y de este modo fue como, desde 1900 y hasta 1908, desempeñó el cargo de directivo de la Clínica Médica de Halle.
Asentado ahora, estudió al lado de Emil Fischer los barbitúricos, con un resultado destacable en el hallazgo del barbital, el veronal y el proponal. Estos trabajos le ocuparon entre 1902 y 1905. En este campo, y ahora de forma individual, logró ingresar en las terapias un considerable número de fármacos como la termodina, la neurodina, la peronina, la dionina y la cloralamida, aparte de múltiples preparados alimentarios como la lipanina o la odda.
Aparte del esencial hallazgo de la diabetes pancreática, Joseph Von Mering asimismo efectuó estudios sobre las características fisiológicas y tóxicas del clorato de potasio, el poder soporífero del hidrato de amilo, los efectos del hidrato de cloral en el organismo, la efectividad de la cairina, los procesos de oxidación del organismo y el accionar de los ácidos en las patologías del estómago y el sistema inquieto. En el campo de la medicina neurológica, Mering cooperó con el científico von Goltz en los estudios sobre el cerebro y el desempeño del cerebelo. Mering desarrolló durante su historia una esencial tarea editorial: redactó para el Manual de Terapéutica de Penzoldt-Stintzing el capítulo destinado a la diabetes y editó esenciales proyectos como Lehrbuch det inneren Medizin, publicada en 1906, y Klinisches Jahrbuch.
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Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son en todos los casos determinantes, ya que destacan la singularidad, y en el caso de la vida de alguien como Joseph Von Mering, que detentó su relevancia en un momento histórico concreto, es esencia tratar de mostrar una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más rigurosa posible.
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