Si has llegado hasta aquí es porque sabes de la importancia que atesoró José María Valverde en la historia. La forma en que vivió y lo que hizo durante el tiempo que estuvo en el mundo fue determinante no sólo para las personas que conocieron a José María Valverde, sino que quizá dejó una huella mucho más profunda de lo que logremossospechar en la vida de gente que tal vez nunca conocieron ni conocerán ya nunca a José María Valverde de modo personal.José María Valverde ha sido un ser humano que, por algún motivo, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.
Conocer lo bueno y lo malo de las personas destacadas como José María Valverde, personas que hacen rotar y transformarse al mundo, es una cosa sustancial para que podamos poner en valor no sólo la vida de José María Valverde, sino la de todas aquellas personas que fueron inspiradas por José María Valverde, personas a quienes de un modo u otro José María Valverde influyó, y por supuesto, conocer y descifrar cómo fue el hecho de vivir en la época y la sociedad en la que vivió José María Valverde.
Las biografías y las vidas de personas que, como José María Valverde, cautivan nuestra curiosidad, tienen que servirnos en todo momento como punto de referencia y reflexión para ofrendar un marco y un contexto a otra sociedad y otra época de la historia que no son las nuestras. Tratar de comprender la biografía de José María Valverde, porqué José María Valverde vivió como lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo en su vida, es algo que nos impulsará por un lado a entender mejor el alma del ser humano, y por el otro, la forma en que se mueve, de forma implacable, la historia.
(Valencia de Alcántara, 1926 - Barcelona, 1996) Poeta, ensayista y instructor español. Tras doctorarse en Filosofía y Letras en Madrid, se trasladó a la Universidad de Roma como lector de español (1950-1955). En 1956 consiguió por oposición la cátedra de Estética en la Universidad de Barcelona, cargo del que dimitió en 1965 como queja contra las expulsiones de sus cátedras, por la parte del régimen de Francisco Franco, de los instructores José Luis López Aranguren, Enrique Tierno Galván y Agustín García Calvo, quienes expresaron críticas críticas al sistema.
Como todos ellos, Valverde se situó próximamente entre la intelectualidad opuesta al franquismo. En los años siguientes, Valverde alternó sus estancias en universidades de Estados Unidos y Canadá con su trabajo de asesor editorial, de forma especial para la editorial Mundo. En 1977, al comienzo de la transición democrática, se restituyó a su cátedra, sin desatender por este motivo un activo deber político, relacionado siempre y en todo momento a las corrientes de síntesis católico-marxistas y próximo al Partido Comunista, apoyando los movimientos sociales en Hispanoamérica y, de forma especial, al movimiento sandinista nicaragüense. Jubilado de sus tareas universitarias en 1992, desde 1993 fue emérito.
Su producción poética se inició próximamente, y también intensamente, a los trece o catorce años, según confiesa nuestro creador. Colaboró de forma temprana en las gacetas Garcilaso, Proel y Mensaje, inscribiéndose durante un momento en el conjunto literario de la Juventud Creadora, aglutinado hacia 1939. Antes de cumplir los veinte años apareció su primer libro de poemas: Hombre de Dios (1945), urgencia de su personal voz poética, de una religiosidad agónica y en perpetua inquietud, en pos de un Dios rastreado con impaciencia. Saludado con entusiasmo por la crítica, Hombre de Dios es un libro emotivo, hondo y fatalista, en el que se advierte ahora la predominación de Rilke y otros versistas de afín huella metafísica.
En 1949 publicó La espera, poemario en el que la predominación de Antonio Machado, y de versistas sudamericanos como César Vallejo, Pablo Neruda y otros, le transporta a procurar una poesía mucho más temporal, próxima a la cotidianidad, un viraje hacia las cosas y hacia la palabra en su concreción. Tal evolución se confirmó en Versos del domingo (1954), libro surgido a lo largo de su estancia en Italia, que profundiza en la comunión con los seres anónimos y marginados de la multitud, en una superación del temor a la verdad, al paso que experimenta con construcciones formales complicadas. Se ha señalado alguna predominación de ciertos líricos italianos, como Salvatore Quasimodo y Eugenio Montale. Cierto ámbito de la crítica, que había visto en él al Paul Claudel español, comenzó entonces a recriminarle ese acercamiento a la fácil y áspera prosa de la vida.
Su siguiente libro de poesía, Voces y acompañamientos para San Mateo, hace aparición en 1959. La lectura de los evangelios es vivida como contrapunto, estímulo y consuelo, en expresiones de Valverde, en la mitad de la gris vida día tras día de instructor universitario, traductor y asesor editorial. El libro lo conforman distintas paráfrasis, en endecasílabo blanco, de extractos del Evangelio de San Mateo, consecutivas de una glosa poética personal.
En exactamente la misma línea, Valverde publicó, en 1960, una traducción de los evangelios en prosa día tras día y corriente, bajo el título Las Buenas Noticias del Reino de Dios. También en 1960 apareció su siguiente poemario: La conquista de este planeta, en donde Valverde emplea una alternancia de voces (soneto-prólogo, alejandrino descriptivo, soneto-comentario personal), para marcar una especide de resumen de la historia universal, conjugando la admiración por el ahínco constructor de la raza humana con la conciencia de que la historia no salvará al hombre en su situación importante y también íntima.
Prosiguieron años de silencio poético y de gradual aceptación de la necesidad de una toma de conciencia en lo político y lo popular, en que Valverde superó con franciscana humildad el acomodaticio cinismo de determinada intelectualidad liberal inútil de abandonar las comodidades de un capitalismo del que abomina, pero solo teóricamente. Testimonio de su imbricación creciente con la historia instantánea y específica es su siguiente libro: Años dudosos (1970), compuesto de poemas breves en que clama una ineludible "apetito y sed de justicia", se asegura la incomprensibilidad extremista de Dios, si no es como amor revelado, y toma cuerpo su situación bivalente y trashumante de instructor de español en el extranjero.
En 1971 publicó una selección de su obra poética: Enseñanzas de la edad (Poesía 1945-1970), seguida en 1976 por otro corto poemario: Ser de palabra, y otros poemas, en forma de mezcla entre ensayo y poesía, que proclama aún la encarnación de la poesía en el hombre. Finalmente, en 1990, se dieron a conocer unas Poesías reunidas, novedosa antología personal.
No menos esencial, y muy estricta, es su producción ensayística: cabe apuntar 2 trabajos de investigación lingüística: Estudios sobre la palabra poética (1952) y Guillermo de Humbolt y la filosofía del lenguaje (1955), que fue su proposición doctoral en la Universidad de Madrid. Sus Cartas a un sacerdote escéptico en temas de arte moderno (1959) abordan la problemática del arte hoy día, siendo el título una irónica actualización del popular tratado del pensador católico Jaime Balmes.
De su estancia italiana brotó una Storia de ella letteratura spagnola (Historia de la literatura de españa), publicada en Turín en 1955. Importante obra de colaboración con Martín de Riquer fue la Historia de la literatura universal (1957-1959), que alcanzó varias reediciones y ampliaciones (cuarto volumen, La literatura de Hispanoamérica, 1977), hasta ocupar al final diez volúmenes en la edición de 1984-1986. Una obra de capaz síntesis es la Breve historia de la literatura de españa (1969).
Ha dedicado distintos ensayos a enseñar la figura y obra de otros escritores y pensadores: Azorín (1972), Antonio Machado (1975), Joyce (1978), Cervantes (1991) y Nietzsche, de filólogo a Anticristo, de 1993, de los mejores trabajos introductorios al pensador alemán Friedrich Nietzsche escritos en España. Un peculiar modo de narrar y entender la historia intelectual de Occidente campea en su Vida y muerte de las ideas. Pequeña historia del pensamiento occidental (1980), una de sus proyectos mucho más reeditadas.
Otras proyectos en exactamente la misma línea entre ensayística y de una alguna vulgarización, de enorme altura, sin embargo, son Breve historia y antología de la estética (última reedición 1998); El barroco, una visión de grupo (1980); La cabeza de nuestro siglo (1982); La literatura (1983); Movimientos literarios (1985); Viena, fin de imperio (1990), y su última publicación, Diccionario de historia (1995).
Particular mención merece su extensa tarea como traductor, que le valió, en su grupo, el Premio Nacional de Traducción en 1990. Destacan sus ediciones de Rainer Maria Rilke, Friedrich Hölderlin, Goethe (Fausto), Charles Dickens (Pickwick, etcétera.), el teatro terminado de Shakespeare, Herman Melville (Moby Dick, etcétera.), James Joyce (Ulises), T. S. Eliot, William Faulkner, Christian Morgenstern y Romano Guardini, por ejemplo.
Publicó asimismo distintas antologías de poesía de españa y también sudamericana y de autores como Miguel de Unamuno, Luis Felipe Vivanco y Ernesto Cardenal, tal como ediciones críticas de proyectos de Antonio Machado y Azorín. Otras proyectos que cabe refererir son Salmos, escogías y frases (1959) y Logos (1959). Obtuvo el Premio Ciudad de Barcelona en 1991. Su magisterio indiscutible (varios recuerdan la fascinación que ejercitaba desde su cátedra) y su figura de hombre íntegro y puesto en compromiso, sin alharacas ni exhibicionismos, con la justicia y la independencia, ponen a Valverde en sitio muy señalado entre la intelectualidad de españa de la segunda mitad del siglo XX.
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Debido a esto, si eres del tipo de personas que creen en que cooperando es posible elaborar algo mejor, y tienes información acerca de la vida de José María Valverde, o sobre algún detalle de su personalidad u obra que no hayamos observado en esta biografía, te pedimos que nos lo hagas llegar.
Las sutilezas y las peculiaridades que llenan nuestras vidas son decididamente fundamentales, ya que perfilan la diversidad, y en el tema de la vida de un ser como José María Valverde, que tuvo su importancia en una época determinada, es fundamental tratar de ofrecer una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.
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