La historia de la civilización está contada por aquellas mujeres y hombres queen el paso de los años, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han hecho queel género humano, de un modo u otro,progrese.
Ya sea inspirando a otros seres humanos o formando parte de la acción. John Atkinson Hobson es una de esas personas cuya vida, en verdad, merece nuestra consideración debido al grado de influencia que tuvo en la historia.Conocer la vida de John Atkinson Hobson es comprender más sobre una época concreta de la historia de la humanidad.
(Derby, 1858 - Hampstead, 1940) Economista británico. Fue integrante del Partido Liberal, en el que se significó por proteger avanzados programas de reforma popular y distribución de la renta, tal como por sus estudios sobre el avance del capitalismo y del imperialismo, al que consideró como una consecuencia del subconsumo.
Graduado en economía por la Universidad de Oxford, desde 1887 hasta 1897 dio clases de literatura inglesa y economía en la University Extension Delegacy y en la London Society for the Extension University, las dos en Londres. Fue entre los primeros economistas británicos en criticar abiertamente el control elevado de la industria y de los medios de producción por la parte de los gobiernos.
Influido poderosamente por la escuela institucionalista estadounidense, su primordial aportación a la economía política fue la teoría del subconsumo o de exceso de ahorro, plasmada en la obra que escribió en conjunto con Albert F. Mummery en 1889, llamada The Physiology of Industry (Fisiología de la industria), y que sirvió más tarde a John Maynard Keynes para publicar su teoría de equilibrio con desempleo. En esta obra, Hobson estimó que el exceso de ahorro y la retención del dinero no era deseable pues provocaba una notable dominación de la demanda, situación ineludible en un sistema económico capitalista.
Como complemento a esta obra, Hobson sacó a la luz en 1902 su otra obra capital, The Imperialism (El imperialismo), donde mantuvo que la política colonialista desplegada por las considerables potencias a lo largo de la segunda etapa de la Revolución Industrial se encontraba ocasionada por la incapacidad de invertir el exceso de ahorro en nuestra metrópoli, hecho que forzaba a invertir en los países colonizados. Hobson lanzó la iniciativa de la necesidad de invertir el excedente en puntos productivos y no como beneficio de los causantes productivos de mayor poder efectivo, como era la tónica general.
Para Hobson, la implantación de lo que él llamó Estado-Providencia suponía el control popular de los negocios, someter las ventajas a un sistema impositivo alto, utilizar una férrea política antimonopolio y subir de forma extendida los sueldos para terminar con el subconsumo interior, lo que dejaría la absorción del excedente industrial. Hobson se fundamentó en sus vivencias por África del Sur, donde asistió como corresponsal del Manchester Guardian a lo largo de la Guerra de los Boers, para denunciar en este libro la expansión capitalista sin límites que se llevaba a cabo en esos instantes. Estas afirmaciones fueron magníficamente aprovechadas por Lenin y Rosa Luxemburgo en sus asaltos a los gobiernos burgueses-liberales.
En su tercera obra de relevancia, publicada en el año 1904 bajo el título de The Industrial System (El sistema industrial), Hobson aseveró que el consumo era el que determinaba la producción industrial y no al contrario; por esta razón rechazó de chato la oportunidad de que una bajada de costos dejaría solucionar la sobreproducción. Del resto de su ingente producción meritan ser relevantes los títulos The Evolution of Modern Capitalism, 1894 (La evolución del capitalismo moderno); Work and Wealth, 1914 (Trabajo y riqueza); The Economics of Unemployment, 1922 (Las economías del desempleo); y, finalmente, Thought in the Social Sciences, 1926 (Pensamiento en las Ciencias Sociales).
Como resultado a su predisposición teorética mucho más que práctica, Hobson fué fuertemente atacado por casi todos los frentes y academias económicas, en especial por la parte de los mucho más ortodoxos; prueba de esto y de su nada repudiable sentido del humor lo forman sus memorias, escritas en el año 1938 bajo el título un poco sarcástico de Confessions of an Economic Heretic (Confesiones de un economista herético).
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Está claro que descubrir en lo más recóndito a John Atkinson Hobson es algo que se reserva a escasas personas, y que intentar reconstruir quién fue y cómo fue la vida de John Atkinson Hobson es una especie de puzzleque posiblemente consigamos reconstruir si contribuimos todos en conjunto.
Por eso, si eres de las personas que creen en que de forma colaborativa existen posibilidades de crear algo mejor, y conservas información acerca de la vida de John Atkinson Hobson, o acerca de algún particularidad de su personalidad u obra que no se observe en esta biografía, te pedimos que nos lo envíes.
Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son siempre importantes, ya que marcan la diferencia, y en el tema de la vida de una persona como John Atkinson Hobson, que detentó su trascendencia en un momento histórico concreto, es indispensable tratar de ofrecer una visión de su persona, vida y personalidad lo más precisa posible.
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