Ya sea inspirando a otras personas o tomando parte de la acción. Johann Friedrich Herbart es una de las personas cuya vida, en efecto, merece nuestro interés por el grado de influencia que tuvo en la historia.Comprender la existencia de Johann Friedrich Herbart es conocer más acerca de etapa determinada de la historia del ser humano.
Apreciar lo bueno y lo malo de las personas relevantes como Johann Friedrich Herbart, personas que hacen rodar y cambiar al mundo, es algo fundamental para que podamos poner en valor no sólo la existencia de Johann Friedrich Herbart, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por Johann Friedrich Herbart, personas a quienes de un modo u otro Johann Friedrich Herbart influyó, y desde luego, entender y comprender cómo fue el hecho de vivir en la época y la sociedad en la que vivió Johann Friedrich Herbart.
Vida y Biografía de Johann Friedrich Herbart
(Oldenburg, 1776 - Gotinga, 1841) Filósofo y pedagogo alemán. Estudió en Suiza los métodos de Pestalozzi y fue instructor en las universidades de Gotinga y de Königsberg, donde sucedió a Kant. Es creador de Pedagogía general (1806), La psicología como ciencia (1824-1825) y Metafísica general (1828-1829).
Tras cursar estudios en el centro de Oldenburg, Johann Friedrich Herbart ingresó en 1794 en la Universidad de Jena, donde tuvo por instructores al kantiano Karl Leonhard Reinhold, a Friedrich Schiller y a Johann Gottlieb Fichte; este último influyó en sus ideas de modo singular en un primer instante, pero próximamente se distanció de su filosofía. Su vocación pedagógica fue temprana: entre 1797 y 1800 fue preceptor de los Von Steiger en Berna. De la agudeza de sus visualizaciones pedagógicas se preservan, como atrayentes documentos, los reportes bimestrales que Herbart redactaba para el padre de sus tres acólitos, dispares en edad y temperamento.
A lo largo de este periodo visitó la próxima escuela de Johann Heinrich Pestalozzi en Burgdorf, que suscitaría en Herbart ricas medites, expresadas por vez primera en el opúsculo La iniciativa pestalozziana de un ABC de la intuición. Tras un corto paréntesis de enseñanzas y polémicas pedagógicas (figuró entre los filantropistas y los neo-humanistas), pasó a la Universidad de Gotinga (1802) y a la de Königsberg (1809) como instructor de filosofía, en la cátedra que había ocupado nuestro Kant. No por este motivo redujo su interés por la pedagogía; en 1810 creó en Königsberg un seminario pedagógico con una escuela en fase de prueba aneja destinada a las prácticas educativas. En 1835 volvió a Gotinga, donde ejercitó la docencia hasta su fallecimiento.
En el aspecto gnoseológico, la filosofía de Johann Friedrich Herbart es una inversión de la situación idealista; asegura la verdad objetiva de las cosas, intenta ser una "elaboración de los conceptos" (esto es una aclaración conceptual de los datos de la experiencia, de forma frecuente contradictorios) y se distribuye en lógica, metafísica y estética. Sobre la base de una crítica de las ideas escenciales de "cosa", "cambio" y "yo" (los tradicionales inconvenientes del uno y de los varios, de la substancia y del devenir), Herbart llega a un realismo pluralista, según el que toda la verdad se encuentra dentro por una multiplicidad sin limites de "reales" sencillos y también inalterables, no vinculados entre sí, cualitativamente diferentes, indeterminables en su carácter intrínseco y solo cognoscibles en su aparente relación con los otros (en analogía con la concepción monadista de Leibniz). El devenir aflora de las acciones y reacciones de los "reales", poseedores de una fuerza singular de autoconservación que los ubica en una relación aparente y fenoménica, la que en su grupo forma el planeta de la experiencia, el único susceptible de ser popular por nosotros.
Herbart procuró traspasar intensamente en el estudio de los fenómenos psíquicos, más que nada en el aspecto pedagógico. Según Herbart, asimismo el alma, naturalmente, pertence a los "reales", fácil y también inmutable en sí y, sin embargo, activo y reactivo respecto de los otros reales. Las fuerzas de acción y reacción tienen dentro la vida psíquica, la que se disminuye a un complejo dinámico de representaciones, divididas en sentimientos, deseos, voliciones y entendimientos, transformados por su parte en facultades, según se hallen, en la pelea incesante y llena de contrariedades, encima o bajo el umbral de la conciencia.
Estas "mecánica y estática del espíritu" producen el fenómeno del yo o unidad de conciencia y el fenómeno de la percepción, esto es la capacitación de masas de representaciones hacia las cuales tienden a cristalizar otras imágenes (fundamento herbartiano de la doctrina pedagógico-didáctica de los centros de interés). El sueño de la presencia de Herbart fue la elaboración de una ciencia sicológica de base matemática, a través de la que resultara viable saber "en las fórmulas matemáticas las leyes en general de los fenómenos psíquicos".
Siguiendo la tradición de Kant, hace aparición afirmada asimismo por Herbart la autonomía de la "ciencia de los valores" o "Estética", transformada en "Ética" en el momento en que se convierte en ciencia de los valores obligatoriamente realizables. A diferencia de la ética kantiana, para Herbart la ética se basa en cinco imperativos o ideas prácticas, o conceptos-modelo: la independencia interior, la perfección, la benevolencia, el derecho y la igualdad. El sistema filosófico de Herbart se encuentra expuesto más que nada en las proyectos Filosofía práctica general (1808), Introducción a la filosofía (1813) y Metafísica general según los principios de la doctrina filosófica de la naturaleza (1828-1829).
Pero mucho más que a la filosofía, el nombre de Herbart se encuentra predominantemente relacionado a su pedagogía científica, que pretendió fundamentar en la ética y en una psicología estricta, tal como en las indagaciones educativas, que brindaron un enorme impulso a la renovación didáctica de la escuela y a la conciencia de la educación a través de el término de la instrucción didáctica. Su obra mucho más señalada en este lote es Pedagogía general deducida de la intención de la educación (1806), donde, apoyándose en la ética, que da los fines, y en la psicología, que la dota de medios, Herbart eleva la pedagogía a la categoría de ciencia.
Para Herbart, el papel del educador es "edificar el espíritu infantil, construirle una experiencia cierta", función para la que tiene tres enormes medios: la instrucción, la civilización ética y el gobierno de los pequeños. Las 2 primeras tienen como fin el cultivo de el intelecto y la capacitación del carácter; la instrucción, particularmente, debe procurar un mayor número de representaciones y su organización, al tiempo que la civilización ética debe de desarrollar los sentimientos. En cuanto al gobierno de los pequeños, lo comprende como la precisa condición de orden para el desempeño de la educación. La Pedagogía general lleva a cabo asimismo la teoría de los intereses, voluntarios y también involuntarios, y el papel que desempeñan en el desarrollo educativo; en esta obra está también su conocida teoría de los grados formales, o sea, los 4 pasos que prosigue el espíritu para capturar los entendimientos: claridad, asociación, sistematización y procedimiento o app práctica. Otra obra donde desarrolló sus concepciones pedagógicas es Proyecto de enseñanzas de pedagogía (1835).
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Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son siempre esenciales, ya que marcan la diferencia, y en el caso de la vida de alguien como Johann Friedrich Herbart, que poseyó su importancia en una época determinada, es vital tratar de ofrecer un aspecto de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.
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