La historia de la civilización la cuentan aquellas mujeres y hombres quea lo largo de los siglos, gracias a su forma de actuar, sus ideales, sus hallazgos o su arte; han originado quela humanidad, de una forma u otra,progrese.
Las biografías y las vidas de personas que, como Jesús Ábrego, atraen nuestra atención, tienen que servirnos siempre como punto de referencia y reflexión para ofrecer un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Hacer un esfuerzo por entender la biografía de Jesús Ábrego, el motivo por qué Jesús Ábrego vivió del modo en que lo hizo y actuó del modo en que lo hizo en su vida, es algo que nos impulsará por un lado a comprender mejor el alma del ser humano, y por el otro, la manera en que avanza, de forma inexorable, la historia.
(Arróniz, 1910 - San Sebastián, 1997) Pelotari navarro. Debutó profesionalmente en Pamplona con solo catorce años y en una época donde resultaba singularmente bien difícil resaltar en un deporte donde la hegemonía de José Irigoyen, el popular "León Navarro" de Vera de Bidasoa, no podía discutirse. Sin embargo, Ábrego logró marcar una época en el planeta de la pelota vasca y a él se le asigna el mérito de dotar de distinción y sentido estético a un deporte comúnmente robusto.
En el momento en que se confrontaron por vez primera Ábrego y también Irigoyen, el de Arróniz tenía quince años, y el de Vera, treinta y 2. Venció Irigoyen, pero el entonces rey del remonte ahora presagió que, en pocos años, el joven pelotari que terminaba de llegar a las canchas le quitaría el cetro de vencedor. Se cumplió la predicción y Jesús Ábrego sostuvo el reinado indiscutible del remonte a lo largo de veinticinco años. Una muy inoportuna lesión impidió alargar, aún mucho más, el éxito deportivo de la que se considera la mayor figura de la crónica de la pelota vasca. Se retiró en 1951.
Con una técnica refinada, un físico distinguido y sus inusuales facultades, Ábrego marcó diferencias insuperables con sus contrincantes y, a lo largo de su dilatado orden se acuñaron prácticamente todos los apodos probables: "El Mago", "La Golondrina de Arróniz", "La Joya", "El Fenómeno", "El Emperador", "El Artista" y, más que nada, "El Rey del Remonte". Además del juego de pelota, Jesús Ábrego fue un enorme apasionado de la literatura y, a lo largo de sus largas estancias en Madrid tuvo ocasión de entender a ciertos escritores como Azorín, e inclusive de establecer amistad con Jardiel Poncela.
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Sin duda conocer en profundidad a Jesús Ábrego es algo que se reserva a un grupo limitado de personas, y que pretender recomponer quién fue y cómo fue la vida de Jesús Ábrego es una especie de puzzleque a lo mejor alcancemos a reconstruir si cooperamos todos en conjunto.
Por ese motivo, si eres de aquellos que confían en que cooperando es posible hacer algo mejor, y detentas información acerca de la biografía de Jesús Ábrego, o en relación con algún peculiaridad de su persona u creación que no hayamos observado en esta biografía, te pedimos que nos lo hagas llegar.
Las sutilezas y las peculiaridades que llenan nuestras vidas son en todos los casos fundamentales, ya que perfilan la diversidad, y en la ocasión de la vida de un ser como Jesús Ábrego, que detentó su importancia en una época determinada, es vital procurar mostrar una visión de su persona, vida y personalidad lo más rigurosa posible.
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