James Tobin

La historia de la civilización la narran las personas queen el transcurrir de los siglos, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han originado quela civilización, de una forma u otra,avance.

Conocer lo bueno y lo malo de las personas relevantes como James Tobin, personas que hacen rotar y transformarse al mundo, es algo esencial para que podamos valorar no sólo la existencia de James Tobin, sino la de todas aquellas personas que fueron inspiradas por James Tobin, gentes a quienes de de una forma u otra James Tobin influyó, y por supuesto, conocer y descifrar cómo fue el hecho de vivir en la época y la sociedad en la que vivió James Tobin.

Vida y Biografía de James Tobin

(Champaign, 1918 - New Haven, 2002) Economista estadounidense. Galardonado con el Premio Nobel en 1981, James Tobin, hijo del periodista Louis Michael Tobin y de la asistente popular Margaret Edgerton, se crió en una familia de clase media del medio oeste americano. Completó la educación principal en Champaign y acabó la secundaria en Urbana, las dos ciudades ubicadas en el estado de Illinois.

En el momento en que alcanzó el nivel universitario, el país estaba en medio de una recesión económica, lo que influyó decisivamente en la capacitación que recibió en la Universidad de Harvard (Massachusetts), donde consiguió su licenciatura en 1940. En esta institución amplió sus entendimientos y recibió clases de varios de los mejores economistas de su temporada, como Schumpeter o Wassily Leontief.

Tras terminar sus estudios al principio de la Segunda Guerra Mundial, recibió una oferta laboral en la recién construída Oficina de Administración de Precios, Oferta Civil y Consejo de Producción Militar, que establecía los sistemas de cuotas para garantizar las materias primas de la industria militar. Permaneció en el puesto desde 1941 hasta abril del 1942, fecha donde se incorporó al servicio de la Marina estadounidense como oficial de link en un destructor. Durante el enfrentamiento intervino en campañas en el Atlántico y el Mediterráneo y se licenció en 1946.

En el momento en que pasó a la reserva, con el nivel de teniente, fue solicitado por la Universidad de Harvard, que le contrató como enseñante, lo que le dejó terminar su doctorado en 1947. Desde entonces y hasta 1950 perteneció al cuerpo de instructores de Harvard, y al comienzo de la novedosa década se trasladó a la Universidad de Yale como instructor asociado de economía. En 1955 ascendió al puesto de instructor titular en exactamente la misma facultad, plaza que compaginó con múltiples trabajos en la Comisión Cowles para la Investigación Económica (entre ellos el de directivo) hasta 1965.

Esta comisión, caracterizada por sus indagaciones de carácter cuantitativo, se había movido desde la Universidad de Chicago a la de Yale en 1955 y se encontraba considerada como entre los tres centros de investigación de econometría mucho más esenciales actualmente; un prestigio avalado por el trabajo de múltiples Premios Nobel en sus departamentos, como nuestro Tobin o J. Kenneth Arrow.

En 1957, Tobin accedió a la cátedra Sterling de Economía de la Universidad de Yale, cargo en el que se sostuvo hasta su jubilación y que le dejó desarrollar su actividad como instructor visitante en otras organizaciones como el Instituto de Desarrollo Económico de Nairobi o el departamento de economía de la Universidad de California. De forma paralela a su labor enseñante y también estudiosa, sostuvo contactos con otros foros de discusión económicos como el Consejo Presidencial del Consejero de Economía, al que perteneció a lo largo de la presidencia de Kennedy, entre 1961 y 1962.

Fruto de los estudios de este Consejo Presidencial fue el informe de 1962 en el que se propusieron las probables políticas económicas de estabilización y desarrollo económico, que tuvieron una esencial resonancia en el planeta académico y político. Otras organizaciones a las que aconsejó o en las que desarrolló proyectos de análisis económicos fueron la Mesa de Gobernadores del Sistema Federal de Consejeros Académicos, entre 1955 1957; el Departamento del Tesoro estadounidense, entre 1962 y 1969; la Fundación Ford, entre 1962 y 1963; o la Oficina Nacional de Investigación Económica, de la que fue directivo entre 1981 y 1986.

James Tobin fue integrante de un elevado número de organizaciones, como la Asociación Americana de Economía, de la que llegó a ser presidente en 1971; la Academia Nacional de Ciencias estadounidense, donde fue nombrado secretario; la Academia Americana de las Artes y las Ciencias; la Sociedad de Econometría, donde llegó a la presidencia en 1958; la Academia Británica, de la que fue asociado de afuera; o la Academia de las Ciencias de Portugal, por ejemplo.

También, fue premiado en elevado número de oportunidades con distinciones como la medalla de Bronce John Bates Clark, en 1955; el premio Eckstein de la Asociación Económica del Este, en 1988; la Gran Banda de la Orden del Sacro Tesoro de Japón, en 1988; o la medalla de la Presidencia Italiana, en 1993. En cualquier situación, luce por su extensión el premio Nobel de Economía que le entregó en 1981 la Academia de Sueca de las Ciencias, por sus estudios cerca de la macroeconomía y la teoría monetaria, y particularmente sobre las relaciones entre empleo, producción, costes y gasto.

Sus trabajos teóricos supieron aunar el análisis cuantitativo y el avance de herramientas econométricas con el estudio de la economía efectiva, lo que le encaró en múltiples oportunidades con los economistas mucho más liberales y recelosos de la intervención del Estado en la economía de mercado. Defensor de determinado nivel de intervencionismo estatal, se le podría situar en la corriente del institucionalismo estadounidense, lo que quedó patente en la llamada "tasa Tobin" (imposición de tasas sobre el movimiento en todo el mundo de capitales para financiar el sistema en todo el mundo de pagos, en su versión original).

Sobre esta tasa, iniciativa por el instructor Tobin a inicios de los años setenta, se ha discutido desde el destino de los capital impositivos hasta su administración, más allá de que nuestro James Tobin rechazó su app práctica por necesitar de la adhesión de todos y cada uno de los países donde se genera fluído de capitales de todo el mundo y de todas y cada una de las entidades de crédito mundiales.

Entre sus proyectos primordiales están The intellectual revolution in U.S. economic policy-making (1966); National economic policy: essays (1966), que tiene una traducción al español de Guillermo Cárdenas llamada Política Económica Nacional (1972); Essays in Economics (tres volúmenes, 1971-1982); The new economics one decade older (1974); Asset accumulation and economic activity: reflections on contemporary macroeconomic theory (1980), traducida al español por Antonio Mora como Acumulación de activos y actividad económica (1986); Policies for prosperity: essays in a Keynesian mode (1987); y Money, credit, and capital (1998) traducida al español como Dinero, Crédito y Capital.

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Las sutilezas y las peculiaridades que llenan nuestras vidas son decididamente fundamentales, ya que destacan la singularidad, y en el tema de la vida de alguien como James Tobin, que detentó su importancia en una época concreta, es vital tratar de ofrecer un aspecto de su persona, vida y personalidad lo más rigurosa posible.

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