Ya sea inspirando a otras personas o formando parte de la acción. James Dean es una de esas personas cuya vida, en efecto, merece nuestro interés por el grado de influencia que tuvo en la historia.Comprender la existencia de James Dean es conocer más sobre un periodo concreto de la historia del ser humano.
Apreciar las luces y las sombras de las personas destacadas como James Dean, personas que hacen rodar y cambiar al mundo, es una cosa sustancial para que podamos poner en valor no sólo la existencia de James Dean, sino la de todas aquellas personas que fueron inspiradas por James Dean, personas a quienes de de una u otra forma James Dean influyó, y sin duda, conocer y descifrar cómo fue vivir en el periodo histórico y la sociedad en la que vivió James Dean.
Las biografías y las vidas de personas que, como James Dean, cautivan nuestra atención, deben ayudarnos siempre como punto de referencia y reflexión para proponer un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Tratar de entender la biografía de James Dean, el motivo por el cual James Dean vivió como lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo durante su vida, es algo que nos ayudará por un lado a vislumbrar mejor el alma del ser humano, y por el otro, el modo en que avanza, de forma implacable, la historia.
Vida y Biografía de James Dean
(Marion, Estados Unidos, 1931 - Paso Robles, id., 1955) Actor estadounidense. Tras cursar estudios de arte dramático en Nueva York, inició su trayectoria haciendo un trabajo en pequeños teatros de Broadway. Su interpretación en El inmoralista (1954) parte teatral de André Gide, le valió la posibilidad de firmar un contrato en Hollywood, donde, por año siguiente, rodó Al este del Edén, apuntada por Elia Kazan. En 1955 se puso bajo el mando de Nicholas Ray para interpretar, al lado de Natalie Wood y Sal Mineo, Rebelde sin causa, en la que Dean daba vida a un joven incomprendido y en conflicto con la verdad que le rodeaba. Poco después actuó en Gigante (1956), apuntada por George Stevens desde la novela de Y también. Ferber y donde Dean, esta vez un peón de rudos modales, afianzó su imagen de joven inconformista. Dicha imagen, tal como su férrea oposición a la guerra de Corea y su trágica muerte en un incidente automovilístico antes del estreno de la película, lo transformaron en símbolo para una generación marcada por sus ansias de independencia y en perenne enfrentamiento con sus mayores.
De los tres films que protagonizó, Rebelde sin causa (1955) fue el definitivo en el momento de forjar su historia de historia legendaria. James Dean y la frágil Natalie Wood formaron, en la película de Nicholas Ray, un dúo joven cuya identidad entra en crisis al confrontar con el planeta de los mayores y con el de los de su edad. El rostro angustiado de James Dean fue, indudablemente, el más destacable reflejo del mal de una masculinidad problemática enfrentada a los ritos de paso impuestos para entrar en la red social.
Tres jóvenes con inconvenientes familiares son los personajes principales de Rebelde sin causa: Jim Stark (James Dean), Judy (Natalie Wood) y Platón (Sal Mineo), que coinciden en la comisaría tras ser detenidos. Como su familia cambió de residencia, el día después es para Jim Stark el primero en el nuevo centro. Allí se rencuentra con Platón, un joven guardado y solitario de quien en seguida se hace amigo, y con Judy, que es la novia de Buzz, el líder de una banda de jóvenes rebeldes. A la salida de clase, Buzz, que ha detectado una alguna atracción entre Judy y Jim, hace a este hasta desatar una riña con navajas. La aparición de un instructor la pausa, quedando postergada. Esa misma noche, en un barranco próximo, el desafío por el momento no es con navajas; radica en ver quién tarda mucho más en saltar de un vehículo que avanza hacia un precipicio a toda agilidad. Buzz no lo logra y se estrella contra las rocas. A partir de ese instante Jim y Judy, acompañados por Platón, se van a ver envueltos en una espiral aciaga que terminará con la trágica muerte de este último.
Rebelde sin causa no fue, quizás, la mejor película de Nicholas Ray, pero sí la mucho más simbólica y famosa de toda su trayectoria y la que reúne casi todas las peculiaridades de su cine: un tema muy de su gusto, con individuos jóvenes, agobiados y frecuentemente fuera de la ley, que emprenden alocadas escapadas hacia enfrente debido, en decisión correcta, a los inconvenientes de identidad y personalidad que padecen. En cualquier situación, el largometraje transformó a James Dean, enfundado en aquella cazadora reversible negra y roja que imitarían los jóvenes en el momento de vestirse, en el icono juvenil de los prósperos y conflictivos años 50.
Si bien no tan míticos, no son desdeñables sus trabajos en los otros 2 grabes que protagonizó: el papel de Cal Trask, el hijo rechazado y solitario de Al este del Edén (1955), de Elia Kazan, y el abrupto y autodestructivo Jett Rink que acompañaba a Liz Taylor en Gigante (1956), de George Stevens. Hermoso, indócil, tierno, incomprendido, le bastaron estos tres títulos a fin de que su historia de historia legendaria de antihéroe raro y desarraigado se viese catapultada al frío y reluciente territorio de la inmortalidad, tras deshacer su deportivo una noche en una curva de Salinas. Al conocerse la novedad de su fallecimiento (tenía 24 años), los jovenes estadounidenses enloquecieron. Se había cumplido lo de "vive veloz, muere joven y deja un precioso cadáver"; no obstante, los mitos jamás mueren, y James Dean continúa en la memoria de todos como el ideal romántico del joven rebelde que una generación aceptó como ídolo y punto de referencia.
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Sin duda alguna llegar a comprender a James Dean es algo que se reserva a escasas personas, y que tratar de reconstruir quién fue y cómo fue la vida de James Dean es una suerte de enigmaque a lo mejor podamos reconstruir si colaboramos juntos.
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Los matices y las sutilezas que llenan nuestras vidas son en todos los casos importantes, ya que destacan la singularidad, y en el caso de la vida de una persona como James Dean, que tuvo su relevancia en un momento concreto de la historia, es fundamental tratar de brindar una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más rigurosa posible.
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