La historia universal está escrita por las personas queen el transcurrir de los siglos, gracias a su forma de actuar, sus ideales, sus hallazgos o su arte; han ocasionado queel género humano, de una forma u otra,avance.
Ya sea inspirando a otros seres humanos o siendo parte de la actuación. James Cameron es uno de esos seres humanos cuya vida, indudablemente, merece nuestro interés por el nivel de influencia que tuvo en la historia.Comprender la existencia de James Cameron es comprender más acerca de periodo preciso de la historia del ser humano.
Apreciar las luces y las sombras de las personas relevantes como James Cameron, personas que hacen girar y evolucionar al mundo, es algo esencial para que seamos capaces de apreciar no sólo la vida de James Cameron, sino la de toda aquellas gentes que fueron inspiradas por James Cameron, gentes a quienes de un modo u otro James Cameron influenció, y ciertamente, comprender y entender cómo fue vivir en la época y la sociedad en la que vivió James Cameron.
Las biografías y las vidas de personas que, como James Cameron, cautivan nuestra curiosidad, tienen que ayudarnos siempre como referencia y reflexión para proponer un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Tratar de comprender la biografía de James Cameron, porqué James Cameron vivió de la forma en que lo hizo y actuó del modo en que lo hizo a lo largo de su vida, es algo que nos ayudará por un lado a comprender mejor el alma del ser humano, y por el otro, la manera en que avanza, de forma inexorable, la historia.
Vida y Biografía de James Cameron
(James Francis Cameron; Kapuskasing, Ontario, 1954) Cineasta canadiense. Especializado en sus comienzos en grabes futuristas y de ciencia ficción con una aceptable dosis de acción y de FXs, fue entonces el artífice de Titanic (1997), magnífica superproducción donde aunó la catástrofe del naufragio con una historia romántica. La película igualó con sus once Oscar a Ben-Hur y desbancó a La guerra de las galaxias como la mucho más taquillera de la historia. Doce años después, el directivo batió su récord de recaudación con el largometraje en tres dimensiones Avatar (2009), bastante menos apreciado por la crítica.
James Cameron fue el primero de los cinco hijos del matrimonio compuesto por Philip, ingeniero, y Shirley, enfermera. Según su madre, la vida del pequeño James cambió en el momento en que, en 1968, asistió a la proyección de 2001: una odisea del espacio, de Stanley Kubrick, y descubrió el género de la ciencia ficción. En 1971, por fundamentos laborales, los Cameron se establecieron en Orange County, California, donde James compatibilizaba sus estudios en el Fullerton College con sus largas horas en la biblioteca para leer guiones de cine. Cursó estudios de física en la Universidad del Estado de California, pero ha podido mucho más su pasión por el séptimo arte y próximamente decidió comenzar su singladura cinematográfica.
Los principios no fueron simples. Mientras por las noches escribía guiones y pintaba (es un avezado ilustrador que hace sus storyboards), fue camionero y conductor de un autobús escolar. En 1978 se casó con la camarera Sharon Williams, donde sería la primera de una secuencia de relaciones erradas; se divorciaron en 1984. Fue exactamente en 1978 en el momento en que escribió y dirigió, con Randall Frakes, su primer corto, Xenogénesis. Aunque no se estrenó, el corto (de 12 minutos de duración, con mucha animación, efectos visuales y pinturas mate) ahora dejaba entrever ciertas bazas que caracterizarían la filmografía de Cameron y le abrió puertas en la industria cinematográfica como directivo artístico y supervisor de FXs de Roger Corman (New World Pictures), facetas que desarrolló profesionalmente por vez primera en el largometraje Los siete espléndidos del espacio (1980).
La primera experiencia de Cameron como directivo de un extenso film no ha podido ser mucho más desepcionante. Contratado para rodar Pirañas 2: los vampiros del mar (1981), sus desavenencias con los productores le llevaron a elegir que de ahora en adelante solo dirigiría películas con guiones propios. Tres años después estrenaba Terminator (1984), una vibrante producción futurista donde el musculoso Arnold Schwarzenegger daba vida al cyborg Terminator T-800. La película, de bajo presupuesto y producida por la que sería su segunda mujer entre 1985 y 1989, Gale Anne Hurt, supuso un éxito de público y crítica y cosechó distintos premios, entre ellos los Saturn al mejor maquillaje, a la mejor película de ciencia ficción y al mejor guion. En 2008 tuvo el honor de ser incluida en el Registro Nacional de Cine de la Biblioteca Nacional de Estados Unidos.
A Terminator, considerada entre las películas de la década y un tradicional por sus revolucionarios FXs, le proseguirían múltiples títulos que contribuyeron a aumentar su renombre. Aliens, el regreso (1986, directivo y escritor de guiones) resultó ganadora de 2 premios Oscar de la Academia (mejores efectos visuales y efectos de sonido) y confirmó su reputación como entre los mucho más hábiles directivos de ciencia ficción. Pero su siguiente película, Abyss (1989, directivo y escritor de guiones), fue un rotundo fracaso comercial y de crítica.
Volvería a lograr el éxito con la secuela Terminator 2: el juicio final (1991, directivo, escritor de guiones y productor), largometraje en que por vez primera se dio brida suelta a las inmensas opciones de los FXs generados por pc y que fue premiada con 4 Oscar (mejores efectos visuales, mejor sonido, mejor maquillaje y mejor edición de sonido). Cameron fue asimismo directivo y escritor de guiones de Mentiras peligrosas (1994) y, simultáneamente, productor ejecutivo de Le llaman Bodhi (1991), una película apuntada por su entonces tercera mujer, Kathryn Bigelow. Este matrimonio tampoco funcionó, pero los 2 cineastas sostuvieron una aceptable relación profesional, como lo prueba dado que, en 1995, el canadiense generara y firmase el guion de la próxima película de la realizadora, Días extraños.
Apreciado ahora como una importante figura en sus géneros preferidos, James Cameron sorprendió después con un nuevo registro llevando a la pantalla la catástrofe del Titanic. Director, escritor de guiones y productor del largometraje, Cameron pergeñó en Titanic (1997) una superproducción al estilo Hollywood, adscrita por igual al género de catástrofes y al drama romántico, y de una insólita calidad. Epopeya cinematográfica quizá mucho más caracteristica de los tiempos gloriosos del cine épico, esta a nivel económico osada aventura (2 de las considerables productoras de Hollywood debieron sumarse para llevar a cabo en oposición al presupuesto) desbancó a La guerra de las galaxias como película mucho más taquillera de la historia del cine, ubicando el listón en los mucho más de 1.843 millones de dólares estadounidenses que colectó en el mundo entero. Un récord que raramente le quitaría, 12 años después, otra película del mismo directivo.
Más allá de que el drama romántico que relata Titanic es pura ficción, el marco en el que se lleva a cabo es historia, y James Cameron deseó reconstruirla con la mayor certeza, documentándose extensamente: bajó cámaras de Panavisión a unas profundidades oceánicas a las que jamás se había llegado para filmar los restos del navío; recreó los datos mucho más meticulosos del barco, que logró reconstruir en una playa de México, encargando aun ciertos elementos (pescantes, alfombras, etcétera.) a exactamente las mismas compañías que edificaron los auténticos de 1912; y renunció a su salario para ver su sueño en la pantalla.
El ahínco mereció la pena: las situaciones del hundimiento del célebre transatlántico, que costaron una genuina fortuna, consiguen un efecto bien difícil de argumentar a quien no haya visto el largometraje. Centenares de plus se desplazan agobiados y en especial sincronía por la área de una especial reconstrucción del Titanic, mientras que la cámara brinca habilidosamente del puente a los botes salvavidas, y de allí a las bodegas. Protagonistas, plus y público se hunden entonces otra vez con el enorme, y no resulta bien difícil opinar que de manera bastante similar a como sucedió en la verdad.
Titanic igualó el record de Oscar que ostentaba Ben-Hur (1959), ratificando el éxito sin precedentes del largometraje. La Academia únicamente dejó sin premiar las nominaciones a la mejor actriz (Kate Winslet), al mejor maquillaje y a la mejor actriz secundaria (Gloria Stuart). Leonardo di Caprio, el personaje principal del largometraje y uno de sus máximos atractivos, más que nada de cara a la audiencia juvenil, no había sido nominado. Aunque Titanic había encumbrado a los actores personajes principales, Leonardo DiCaprio y Kate Winslet, la Academia no pareció ver la historia romántica del largometraje, del revés de lo que logró el público. James Cameron rompió aquí con un factor tradicional del cine de catástrofes como es el cruce de historias de múltiples individuos, y lo reemplazó por una historia trágica de amor irrealizable. Fox y Paramount por el momento no vacilan en apuntar esta decisión como entre los puntos clave que comentan su éxito arrollador.
La selección de Oscar dejaba bien claro que Hollywood premiaba frente todo la minuciosa reconstrucción de la catástrofe que habían realizado James Cameron y su aparato, y la atención que se prestó a la elaboración de todos y cada uno de los puntos del largometraje: dirección artística, fotografía, vestuario, sonido y FXs. Mereció también el Oscar la inolvidable banda sonora compuesta por James Horner, creador aparte de la muy famosa canción My Heart Will Go On, asimismo oscarizada y también interpretada por Celine Dion. Cameron se llevó las estatuillas al mejor directivo, mejor montaje y mejor producción.
Exactamente el mismo año del estreno de Titanic, 1997, el director volvía a evaluar suerte con las mujeres y se casaba con Linda Hamilton, la Sarah Connor de Terminator. La pareja tuvo un hijo, pero de nuevo el matrimonio fracasó y Cameron encadenó un nuevo divorcio. Volvió a casarse en el año 2000 con la ex- modelo y actriz Suzy Amis, con la que tendría tres hijos. Tras el éxito de Titanic, Cameron se embarcó en la realización de reportajes, como el deslumbrante Aliens of the Deep (Criaturas del abismo, 2005), en el que experimentaba con las técnicas del formato IMAX tres dimensiones.
Próximamente los adelantos cinematográficos y tecnológicos iban a dejarle recobrar un viejo emprendimiento que descansaba en el fondo de un cajón y retomar el género de la ciencia ficción. La expectación que produjo Avatar (2009) fue colosal. Amparada por una increíble campaña de marketing, se presentaba como una película de perfección técnico-visual, que usaba las técnicas cinematográficas mucho más modernas y también originales y marcaría un antes y un después no solo en el género, sino más bien en la cinematografía generalmente.
Avatar se estrenó el 18 de diciembre de 2009 en Estados Unidos en Cine RealD y también IMAX tres dimensiones. Cameron firmaba el guion, la dirección y la producción. Cinco semanas después, el 25 de enero de 2010, había colectado en el mundo entero 1.858 millones de dólares americanos y desbancaba a Titanic en la guerra de récords históricos de taquilla. En la gala de la 67ª edición de los Globos de Oro, conmemorada el 17 de enero en Beverly Hills, Los Ángeles, el largometraje consiguió los premios a la mejor película y al mejor directivo. Pero en la carrera por los Oscar (aspiraba a nueve estatuillas, entre ellas las de mejor directivo y mejor película), Avatar fue la enorme perdedora, al caer derrotada por la bélica En tierra hostil, apuntada raramente por su ex- mujer Kathryn Bigelow, que fue la primera mujer que conseguía el Oscar a la mejor dirección.
Tras terminar en las pantallas de todo el planeta, el 22 de abril de 2010, coincidiendo con el Día de la Tierra, el directivo canadiense presentó la versión Blu-ray de Avatar. En un solo día se vendieron en Estados Unidos 1,5 millones de entidades en este formato, un nuevo récord histórico para la película. Parte de los fondos estaban premeditados a impulsar el software ecologista Home Tree Initiative, que contemplaba cultivar un millón de árboles en 2010. Tras el éxito de Avatar, Cameron anunció que preparaba la reedición de Titanic en tres dimensiones; estrenada en 2012, fue fabulosamente acogida por el público y la crítica.
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Es cierto que conocer en profundidad a James Cameron es algo que está reservado a un grupo limitado de personas, y que pretender recomponer quién y cómo fue la vida de James Cameron es una especie de rompecabezasque a lo mejor logremos reconstruir si colaboramos todos en conjunto.
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Las sutilezas y las peculiaridades que llenan nuestras vidas son siempre esenciales, ya que marcan la diferencia, y en la ocasión de la vida de un ser como James Cameron, que poseyó su importancia en un momento concreto de la historia, es esencia procurar mostrar un panorama de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.
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