Comprender las luces y las sombras de las personas significativas como Inocencio II, personas que hacen girar y evolucionar al mundo, es algo básica para que seamos capaces de valorar no sólo la vida de Inocencio II, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por Inocencio II, aquellas personas a quienes de un modo u otro Inocencio II influenció, y indudablemente, conocer y descifrar cómo fue el hecho de vivir en el momento de la historia y la sociedad en la que vivió Inocencio II.
Las biografías y las vidas de personas que, como Inocencio II, atraen nuestra atención, tienen que servirnos en todo momento como punto de referencia y reflexión para ofrendar un marco y un contexto a otra sociedad y otra etapa de la historia que no son las nuestras. Tratar de comprender la biografía de Inocencio II, porqué Inocencio II vivió del modo en que lo hizo y actuó del modo en que lo hizo en su vida, es algo que nos ayudará por un lado a conocer mejor el alma del ser humano, y por el otro, la manera en que se mueve, de forma inexorable, la historia.
(Gregorio dei Papareschi; Roma, 1130 - 1143) Papa (1130-1143). Comenzó a nombrarse Gregorio del Santo Ángel en 1116 en el momento en que Pascual II le nombró cardenal de este título. En 1118 acompañó a Gelasio II en su escapada a Francia y fue el activo socorrer de sus sustituto, Calixto II. Trabajó con el cardenal Lamberto de Ostia, y con el papa Honorio II en la negociación del Concordato de Worms en 1112.
A la desaparición de Honorio II resucitaron con crueldad las rivalidades entre las familias de los Frangipani y los Pierleoni, que se disputaban la decisión de los Sumos Pontífices. Honorio II enfermó de gravedad en 1130, y se convino en denominar una comisión de ocho cardenales que se encargase de la decisión del nuevo papa en el momento en que muriese Honorio. La compusieron 2 cardenales obispos, tres cardenales presbíteros y tres cardenales diáconos. Entre los presbíteros figuraba Pierleoni y entre los diáconos, Aymeric.
Temiendo Aymeric las secuelas del cisma causado en la comisión por los 2 cardenales de los Pierleoni, precipitó la decisión del nuevo papa con el solo certamen de los presentes en el convento de San Gregorio, donde había fallecido Honorio II. Se procedió a la inhumación del cadáver por vía de simulacro y a la decisión del nuevo papa. El cardenal Pedro de Pisa no se avino a ello, y el resto votaron unánimemente al cardenal del Santo Ángel, quien aceptó tomando el nombre de Inocencio II.
El cardenal san Calixto montó en cólera y se atrajo a los cardenales enfadados por el trámite del canciller, y reunidos en la iglesia de san Marcos, continuaron a novedosa decisión sin declarar nula la previo. Fue escogido Pedro de León unánimemente, que fue ovacionado papa bajo el nombre de Anacleto II. Se apoderó de las iglesias de Letrán y San Pedro por las armas, y trató de asaltar el claustro del Palladium, sin lograrlo.
Inocencio II aprovechó para hacerse consagrar por el cardenal obispo de Ostia en la iglesia Santa María la Nueva, titular del canciller Aymeric. El mismo día, Pedro de Porto consagraba a Anacleto II al lado de la Confesión del Príncipe de los Apóstoles, introduciéndole en la iglesia de san Letrán. Anacleto II y también Inocencio II trataron de atraer hacia sí los votos de la cristiandad. Inocencio II debió escapar por fin de Roma, huyendo a Francia, pidiendo su legitimidad al rey, Luis el Indisculpable. El rey convocó un Concilio en Etampes, que se decidió a favor de Inocencio II. Esta resolución apartó al antipapa Anacleto primero de la iglesia de Francia, después de Alemania, Inglaterra, Castilla y Aragón. El cisma acabó con la reconciliación de Victor IV, sustituto de Anacleto II, con el papa Inocencio II.
En 1139 reunió Inocencio II el Concilio II de Letrán, que excomulgó a Roger de Sicilia. Inocencio II cayó preso de este y tuvo que subscribir las condiciones que le dictó, que fueron el reconocimiento de su título de rey, la ratificación de novedosas conquistas en Capua y Apulia y el alzamiento de la excomunión que pesaba sobre él. En compensación, Roger prestó juramento de vasallaje al papa y le prometió el pago de un censo de forma anual. Estas fueron las cláusulas del tratado de Miniano el 25 de julio de 1139.
En el gobierno de Inocencio II se muestran como señales de las diferentes etapas de su gobierno los Concilios que festejó y las prescripciones eclesiásticas que en ellos decretó: el de Clermont-Ferrand, en 1130, el de Reims, en 1131, el de Piacenza, en 1132, el de Pisa, en 1135, y el de Letrán, en 1139. A su muerte le sucedió Celestino II.
¿Qué opinas de la biografía de Inocencio II? ¿Hallaste todo aquello que suponías que ibas a encontrar?
Indudablemente llegar a comprender a Inocencio II es algo que se reserva a pocas personas, y que pretender reconstruir quién fue y cómo fue la vida de Inocencio II es una especie de rompecabezasque probablemente lleguemos a rehacer si colaboramos todos a la vez.
A causa de esto, si eres de las personas que confían en que de modo colaborativo existen posibilidades de hacer algo mejor, y posees información con respecto a la vida de Inocencio II, o acerca de algún característica de su figura u creación que no se contemple en esta biografía, te pedimos que nos lo envíes.
Los matices y las sutilezas que ocupan nuestras vidas son siempre importantes, ya que perfilan la diversidad, y en la ocasión de la vida de alguien como Inocencio II, que poseyó su importancia en un momento histórico concreto, es vital tratar de mostrar un aspecto de su persona, vida y personalidad lo más precisa posible.
Sin titubeos, contacta con nosotros para referirnos qué conocimientos tienes tú con respecto a Inocencio II. Estaremos muy contentos de completar esta biografía con más información.