La historia del mundo la cuentan aquellas personas queen el transcurrir de los siglos, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han hecho quela civilización, de una forma u otra,prospere.
Si has llegado hasta aquí es porque tienes consciencia de la importancia que tuvo Ignacio López Tarso en la historia. El modo en que vivió y las cosas que hizo durante el tiempo que permaneció en la tierra fue decisivo no sólo para aquellas personas que trataron a Ignacio López Tarso, sino que posiblemente legó una huella mucho más honda de lo que podamossospechar en la vida de gente que tal vez nunca conocieron ni conocerán ya jamás a Ignacio López Tarso personalmente.Ignacio López Tarso ha sido una persona que, por alguna causa, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.
Comprender las luces y las sombras de las personas destacadas como Ignacio López Tarso, personas que hacen rodar y cambiar al mundo, es una cosa básica para que seamos capaces de apreciar no sólo la existencia de Ignacio López Tarso, sino la de todas aquellas personas que fueron inspiradas por Ignacio López Tarso, gentes a quienes de un modo u otro Ignacio López Tarso influyó, y por supuesto, comprender y entender cómo fue vivir en el momento de la historia y la sociedad en la que vivió Ignacio López Tarso.
Las biografías y las vidas de personas que, como Ignacio López Tarso, cautivan nuestra curiosidad, tienen que ayudarnos en todo momento como punto de referencia y reflexión para conferir un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Intentar entender la biografía de Ignacio López Tarso, el motivo por el cual Ignacio López Tarso vivió como lo hizo y actuó del modo en que lo hizo durante su vida, es algo que nos impulsará por un lado a conocer mejor el alma del ser humano, y por el otro, la forma en que se mueve, de forma inevitable, la historia.
(Localidad de México, 1925) Actor teatral y cinematográfico considerado entre los mucho más esenciales de la escena mexicana del siglo XX. Ignacio López Tarso estudió arte dramático en la Escuela de Arte Teatral del Instituto Nacional de Bellas Artes, y también inició su trayectoria de actor en la Compañía de Teatro Estudiantil Autónomo. Posteriormente pasaría a ser parte de la compañía de Teatro Clásico de México, con la que interpretó un repertorio de proyectos del teatro tradicional español, como La Celestina de Fernando de Rojas y Las mocedades del Cid de Guillén de Castro.
Alcanzó el pleno reconocimiento profesional encarnando al soberano azteca Moctezuma Xocoyotzin en Moctezuma II, de Sergio Magaña. A partir de ese instante se transformó en un actor indispensable en las proyectos de los dramaturgos Emilio Carballido, Luisa Josefina Hernández y Sergio Magaña, y en los montajes del directivo teatral de origen japonés Seki Sano. Discípulo de Stanislavski, Seki Sano ingresó en México el procedimiento de capacitación y dirección de actores de su profesor, lo que propició el avance del realismo. Estos artistas formaron un conjunto que lideraría la renovación del teatro mexicano en los años cincuenta.
Bajo la dirección de Seki Sano, Ignacio López Tarso trabajó en Las brujas de Salem (1953), de Arthur Miller, y en Prueba de fuego. Otras proyectos en las que probó su solvencia como actor fueron El precio (asimismo de Arthur Miller), Enrique IV (1922), de Luigi Pirandello, y El rey se muere (1962), de Eugène Ionesco.
Por lo relacionado a su trayectoria cinematográfica, López Tarso desempeñó asimismo una tarea esencial en el avance del cine de su país, participando en títulos recordables como Nazarín (1958), de Luis Buñuel; Juana Gallo (1960), de Miguel Zacarías, o Tarahumara (1964), de Luis Alcoriza. Con el directivo Roberto Gavaldón rodó relevantes grabes como Macario (1960), El gallo de oro (1964) y La vida inútil de Pito Pérez (1970).
Ganó en un par de ocasiones el Premio Golden Gate al mejor actor, la primera por su trabajo en El hombre de papel (1963), de Ismael Rodríguez, y la segunda por la citada Macario (1960), de Roberto Gavaldón. En los años 70 y 80 participó en múltiples series históricas de televisión, como El derecho de nacer (1981) o Senda de Gloria (1987), ambientadas en la Revolución Mexicana.
¿Qué te ha parecido la biografía de Ignacio López Tarso? ¿Has encontrado la información que esperabas encontrar?
Está claro que llegar a comprender a Ignacio López Tarso es algo que se reserva a un grupo limitado de personas, y que pretender reconstruir la persona que fue y el modo en que vivió la vida de Ignacio López Tarso es una especie de rompecabezasque probablemente podamos reconstruir si colaboramos todos en conjunto.
Por esta razón, si eres de las personas que creen en que colaborando se puede crear algo mejor, y detentas información con respecto a la vida de Ignacio López Tarso, o sobre algún faceta de su figura u creación que no hayamos observado en esta biografía, te solicitamos que nos lo hagas llegar.
Los matices y las sutilezas que ocupan nuestras vidas son siempre imprescindibles, ya que perfilan la diversidad, y en el tema de la vida de alguien como Ignacio López Tarso, que detentó su relevancia en una época concreta, es esencia intentar brindar una visión de su persona, vida y personalidad lo más rigurosa posible.
No lo dudes y contacta con nosotros para contarnos qué conocimientos posees acerca de Ignacio López Tarso. Estaremos ilusionados de completar esta biografía con más información.