La historia de la civilización la escriben aquellos hombres y mujeres quea lo largo de los siglos, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han ocasionado queel mundo, de un modo u otro,progrese.
Ya sea inspirando a otras personas o siendo una pieza esencial de la acción. Hugo Wast es una de las personas cuya vida, en efecto, merece nuestro interés debido al grado de influencia que tuvo en la historia.Comprender la existencia de Hugo Wast es conocer más acerca de etapa determinada de la historia del ser humano.
Si has llegado hasta aquí es porque eres consciente de la relevancia que tuvo Hugo Wast en la historia. Cómo vivió y las cosas que hizo durante el tiempo que estuvo en este mundo fue decisivo no sólo para las personas que frecuentaron a Hugo Wast, sino que a caso dejó una señal mucho más profunda de lo que logremosconcebir en la vida de personas que tal vez jamás conocieron ni conocerán ya jamás a Hugo Wast de modo personal.Hugo Wast ha sido un ser humano que, por algún motivo, merece ser recordado, y que para bien o para mal, su nombre nunca debe borrarse de la historia.
Conocer lo bueno y lo malo de las personas relevantes como Hugo Wast, personas que hacen rodar y cambiar al mundo, es algo esencial para que podamos valorar no sólo la vida de Hugo Wast, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por Hugo Wast, gentes a quienes de un modo u otro Hugo Wast influenció, y sin duda, entender y comprender cómo fue vivir en el momento de la historia y la sociedad en la que vivió Hugo Wast.
(Córdoba, 1883 - Buenos Aires, 1962) Seudónimo del novelista argentino Gustavo Martínez Zuviría, entre los escritores argentinos mucho más discutidos del siglo XX. De ciertas de sus novelas, como Flor de durazno (1911), llevada a la enorme pantalla en el que fue el debut actoral de Carlos Gardel, se vendieron mucho más de cien mil ejemplares, y de muchas de ellas se hicieron traducciones hasta en ocho lenguajes; no obstante, la crítica es en general negativa: ciertos historiadores de la literatura sudamericana llegan a prescindir de su nombre; otros llegan a asegurar que su obra no tiene valor literario.
Hugo Wast, entre los escritores de charla de españa mucho más leídos en todo el mundo, se realizó letrado en la Universidad del Litoral (Santa Fe), fue instructor de Economía en tal Universidad y dirigió la Biblioteca Nacional, en Buenos Aires, de 1931 a 1955. Diputado a Cortes (1916-1920) y ministro de justicia y de Educación Pública (1943-1944), consiguió en 1922 la medalla de oro de la Real Academia Española de la Lengua por su novela Valle Negro (1918), que fue elogiada por Miguel de Unamuno, y el Premio Nacional de Literatura de 1926 por su Desierto de piedra (1925), quizá su obra mucho más estimable por su valor costumbrista y su sentido del paisaje.
Tras las citadas, su novela mucho más atrayente es La casa de los cuervos, publicada en 1916. Tomando como referencias a los prosistas españoles Vicente Blasco Ibáñez y Armando Palacio Valdés, se le ha llamado el "Blasco Ibáñez católico" y el "Palacio Valdés argentino"; la primera afirmación tiene bastante menos fundamento que la segunda. Hugo Wast es un narrador verdadera que siente horror frente a lo que evalúa excesos del naturalismo; pero su realismo costumbrista no está regulado por una preocupación estética, sino más bien por una obsesión ética; el creador pone su literatura al servicio de la ética católica, sin intentar reforzar mucho más, y sus novelas resultan superficiales y sesgadas, sin la correcta penetración sicológica.
Pero no se le puede denegar soltura y hasta distinción a su estilo, como no se tienen la posibilidad de regatear al novelista talentos de observación, facultades gráficas y un sentido increíble de los deseos y también inclinaciones del enorme público. Dio a la imprenta mucho más de treinta libros; aparte los convocados, meritan particular mención Alegre (1905); Pequeñas enormes ánimas (1907), reeditado en 1917 con nuevo título: Novia de vacaciones; Fuente sellada (1914); Ciudad turbulenta, localidad alegre (1919); La corbata celeste (1920); El amor vencido (1921); El vengador (1922); Las espigas de Ruth (1926); Myriam la conspiradora (1926); El jinete de fuego (1926); Tierra de jaguares (1927); y Lucía Miranda (1929). A la biografía de San Juan Bosco llamada Don Bosco y su tiempo (1932) le prosiguieron El Kahal (1935), Oro (1935), Juana Tabor (1942), 666 (1942), Esperar contra toda promesa (1944) y Aventuras del Padre Vespignani (1948).
¿Qué juicio te merece la biografía de Hugo Wast? ¿Has encontrado toda aquella información que deseabas encontrar?
Evidentemente descubrir en lo más recóndito a Hugo Wast es algo que se reserva a escasas personas, y que tratar de reconstruir quién y cómo fue la vida de Hugo Wast es una especie de rompecabezasque a lo mejor alcancemos a rehacer si colaboramos juntos.
Por ese motivo, si eres de aquellos que creen en que de modo colaborativo existen posibilidades de crear algo mejor, y conservas información sobre la biografía de Hugo Wast, o sobre algún aspecto de su persona u obra que no se contemple en esta biografía, te pedimos que nos lo envíes.
Las sutilezas y las peculiaridades que llenan nuestras vidas son en todos los casos esenciales, ya que destacan la singularidad, y en la ocasión de la vida de un ser como Hugo Wast, que detentó su trascendencia en un momento concreto de la historia, es vital intentar mostrar una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más rigurosa posible.
contacta con nosotros para relatarnos qué sabes tú sobre Hugo Wast. Estaremos ilusionados de completar esta biografía con más información.