Gustavo Adolfo II

La historia de la civilización está contada por las mujeres y hombres quea lo largo de los siglos, gracias a su proceder, sus ideas, sus innovaciones o su ingenio; han originado quela humanidad, de una forma u otra,prospere.

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Vida y Biografía de Gustavo Adolfo II

(Gustavo Adolfo II o Gustavo II Adolfo de Suecia; Estocolmo, 1594 - Lützen, Sajonia, 1632) Rey de Suecia (1611-1632). Era hijo de Carlos IX, a quien sucedió en 1611. Enseguida dio un giro a la política sueca, tendente a hacer mas fuerte su predominación en el norte de Europa: con asistencia de su canciller Oxenstierna (cabeza de la aristocracia sueca), centralizó el poder, creó un Tribunal superior de Justicia, reglamentó las atribuciones de la Dieta, apartó la Administración civil de la militar y, más que nada, ingresó reformas militares que dotaron a Suecia de entre los ejércitos mucho más modernos y poderosos de la temporada.

Gustavo de Suecia prescindió de los habituales contingentes de mesnaderos, sustituyéndolos por un ejército «nacional» que combatía por su rey y por su religión luterana (desde 1621 implantó el servicio militar obligación); encuadrados en pequeñas formaciones móviles inteligentes poderosamente disciplinadas y con enorme capacidad de fuego, ya que iban armados con mosquetones rápidos y culebrinas, los soldados suecos terminaron transformándose en el terror de los campos de guerra de europa.

Desde el principio de su reinado, Gustavo Adolfo tuvo que realizar en oposición al enfrentamiento con Dinamarca por el control de la Laponia noruega, heredado del reinado previo (Guerra de Kalmar, 1611-13), que él liquidó imponiendo la Paz de Knäred, que dejaba a Suecia sostener un ingreso al mar del Norte. También heredó de su padre el enfrentamiento con Rusia, a la que derrotó privando de toda salida al mar Báltico a través de la conquista de Finlandia, Carelia y las bocas del Neva, lo que asentó la hegemonía de Suecia en el Báltico (Paz de Stolbova, 1617). Más tarde se encaró a Polonia (1621-29), a la que arrebató Livonia y múltiples plazas en Prusia Oriental.

No obstante, a lo largo de los primeros periodos de la Guerra de los Treinta Años (1618-48), Gustavo Adolfo sostuvo a Suecia alejada del enfrentamiento general que arrasaba Europa; fue en 1630 en el momento en que, deseoso de explotar las opciones de expansión territorial que le ofrecía el enfrentamiento, decidió intervenir apoyando al bando protestante, cuyas armas habían salido mal paradas en los años precedentes.

Comenzaba de esta forma el llamado «periodo de tiempo sueco» (1630-35) de la Guerra de los Treinta Años: Gustavo Adolfo desembarcó en Pomerania (norte de Alemania) y estableció su campamento en Stettin; pactó con la Francia de Richelieu el Tratado de Bärwalde, por el que se comprometía a respetar la religión católica en los territorios que conquistara, en lugar de recibir un subvención de forma anual; consiguió el acompañamiento de Brandenburgo y Sajonia; venció al ejército imperial que mandaba Tilly en la guerra de Breitenfels (1631), salvando de esta forma a los protestantes del norte de Alemania de la aniquilación; y avanzó por Turingia y Franconia, triunfando nuevamente en la guerra de Rain (1632), donde murió Tilly.

No obstante, su avance hacia Viena fue detenido por la contraofensiva imperial apuntada por Albrecht von Wallenstein. Gustavo murió en la guerra de Lützen (1632), más allá de que su desenlace fue conveniente al ejército sueco. La corona del país, alto por Gustavo Adolfo al rango de enorme capacidad, pasó a su hija Cristina de Suecia, a lo largo de cuya minoría de edad rigió el país Oxenstierna, adelante de un Consejo de Regencia.

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