La historia del mundo la escriben aquellos hombres y mujeres queen el paso de los años, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han ocasionado quela humanidad, de un modo u otro,prospere.
Si has llegado hasta aquí es porque sabes de la importancia que tuvo François Guizot en la historia. La manera en que vivió y las cosas que hizo mientras permaneció en la tierra fue determinante no sólo para quienes frecuentaron a François Guizot, sino que tal vez legó una señal mucho más vasta de lo que podamosfigurar en la vida de personas que tal vez jamás conocieron ni conocerán ya jamás a François Guizot de modo personal.François Guizot fue una persona que, por algún motivo, merece ser recordado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.
Las biografías y las vidas de personas que, como François Guizot, cautivan nuestro interés, deben ayudarnos en todo momento como referencia y reflexión para ofrecer un marco y un contexto a otra sociedad y otra etapa de la historia que no son las nuestras. Intentar comprender la biografía de François Guizot, porqué François Guizot vivió como lo hizo y actuó del modo en que lo hizo en su vida, es algo que nos ayudará por un lado a conocer mejor el alma del ser humano, y por el otro, la forma en que se mueve, de forma implacable, la historia.
Político francés (Nimes, 1787 - Val-Richer, Calvados, 1874). Procedía de una familia burguesa protestante y era historiador de profesión, destinado a la enseñanza en la Universidad de la Sorbona. Dio sus primeros pasos en política al formar parte en la oposición contra Napoleón; a lo largo del último intérvalo de tiempo de este en el poder (el «Imperio de los Cien Días»), Guizot estuvo al costado del pretendiente monárquico, Luis XVIII, a quien sirvió como asesor hasta su ingreso al trono (1814).
A lo largo del periodo de tiempo de la Restauración ocupó puestos de compromiso, orientándose hacia el liberalismo doctrinario que defendía una política de «justo medio» entre el liberalismo de la Revolución Francesa y el absolutismo del Antiguo Régimen. Desde esa posición defendió el espíritu de la Carta Constitucional de 1814, pero la orientación retrógrada del reinado de Carlos X (1824-30) le inclinó hacia las filas de la oposición.
En esa temporada encabezó una sociedad liberal llamada «Ayúdate y el Cielo te va a ayudar», y padeció represalias por sus ocupaciones (como la suspensión de su cátedra de Historia Actualizada). Apoyó, por consiguiente, la Revolución de julio de 1830, que llevó al trono a Luis Felipe de Orléans; fue entre los políticos claves de la monarquía liberal moderada que se instituyó entonces, cuyo sistema político consideraba especial.
Líder del conjunto de centro-derecha de la cámara baja, François Guizot desempeñó consecutivamente los cargos de ministro del Interior (1830-31), de Instrucción Pública (1832-37) y de Asuntos Exteriores (1840-47); en verdad, desde 1840 ejercitó como jefe de gobierno bajo la presidencia nominal de Jean de Dieu Soult, si bien de manera oficial no sería nombrado presidente hasta 1847-48.
En su administración del ministerio hay que poner énfasis la reforma de la enseñanza principal que llevó al Estado a asumir la instalación de una escuela en todos y cada concejo de Francia (1833); asimismo fue obra suya la aproximación diplomática a Gran Bretaña, que se causó en 1841-44. Pero, como orientador general de la política del centro-derecha en la última etapa de la Monarquía de Julio, François Guizot cometió el fallo de orientar las resoluciones del gobierno en beneficio único de los enormes capitalistas, ignorando las crecientes solicitudes de democratización del régimen y de reformas sociales.
Su liberalismo conservador (que respondía a las necesidades de extensión del derecho de voto sugiriendo a los excluidos por no tener capital suficientes: ¡Enriqueceos!), concitó una enorme coalición de descontentos, que reventó en la Revolución de 1848. El cese de Guizot por el rey, respondiendo a la demanda de los insurgentes, no fue bastante para socorrer al régimen, que cayó asimismo, dando paso a la Segunda República francesa. Guizot se exilió en Inglaterra, de donde volvió en 1849, para vivir retirado en sus pertenencias de Normandía, concentrado en su trabajo de historiador.
¿Qué te ha parecido la existencia de François Guizot? ¿Has encontrado toda aquella información que pensabas que ibas a hallar?
Es cierto que llegar a comprender a François Guizot es algo que se reserva a escasas personas, y que intentar reconstruir la persona que fue y el modo en que vivió la vida de François Guizot es una suerte de puzzleque posiblemente lleguemos a reconstruir si colaboramos todos juntos.
Por eso, si eres de las personas que confían en que de forma cooperativa se puede elaborar algo mejor, y conservas información con respecto a la vida de François Guizot, o sobre algún elemento de su figura u obra que no se contemple en esta biografía, te solicitamos que nos lo envíes.
Las sutilezas y las peculiaridades que llenan nuestras vidas son siempre determinantes, ya que marcan la diferencia, y en el caso de la vida de un ser como François Guizot, que detentó su relevancia en una época determinada, es esencia tratar de mostrar una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más rigurosa posible.
No lo dudes y contacta con nosotros para relatarnos qué sabes tú sobre François Guizot. Estaremos muy contentos de perfeccionar esta biografía con más información.