Francis Thompson

Ya sea inspirando a más personas o formando parte de la acción. Francis Thompson es una de esas personas cuya vida, realmente, merece nuestra consideración por el grado de influencia que tuvo en la historia.Comprender la vida de Francis Thompson es comprender más sobre una época concreta de la historia de la humanidad.

Si has llegado hasta aquí es porque tienes conocimiento de la importancia que tuvo Francis Thompson en la historia. La forma en que vivió y aquello que hizo durante el tiempo que permaneció en la tierra fue determinante no sólo para las personas que frecuentaron a Francis Thompson, sino que a lo mejor legó una señal mucho más profunda de lo que logremosfigurar en la vida de personas que tal vez jamás conocieron ni conocerán ya nunca a Francis Thompson en persona.Francis Thompson ha sido uno de esos seres humanos que, por alguna razón, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre nunca debe borrarse de la historia.

Apreciar las luces y las sombras de las personas destacadas como Francis Thompson, personas que hacen rotar y transformarse al mundo, es una cosa básica para que seamos capaces de apreciar no sólo la existencia de Francis Thompson, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por Francis Thompson, aquellas personas a quienes de de una u otra forma Francis Thompson influenció, y desde luego, comprender y entender cómo fue vivir en la época y la sociedad en la que vivió Francis Thompson.

Vida y Biografía de Francis Thompson

(Preston, 1859 - Londres, 1907) Poeta inglés. Fue hijo de un médico homeópata. De acuerdo con sus inclinaciones, bien vistas por la familia, que era católica, se le orientó hacia el sacerdocio, y, gracias a ello, se formó en el Ushaw College (Durham) en los estudios tradicionales. Tras un cambio de método, aconsejado por los superiores, estudió entonces medicina, aun en el momento en que sin conseguir nunca título alguno, en el Owens College de Manchester y en Glasgow.

Fervoroso católico, enamorado de la literatura y de carácter sin dependencia, abandonó a la familia y los estudios en el momento en que advirtió no ser comprendido en sus pretensiones, todavía poco visibles, y marchó en 1885 a Londres, donde los descalabros de las distintas y humildes ocupaciones a través de las que intentó ganarse la vida por espacio de 4 años (vendedor de fósforos, guardián de caballos, ligado de librería) le lanzaron, gracias a la creciente y amarga tristeza de la soledad, al vicio del opio, contraído después de una patología.

En un pedazo de papel azul designado a envolver azúcar escribió su primera poesía, Encuentro de sueño (Dream Tryst, 1888), lanzada por los cónyuges Meynell, de los que el marido, Wilfrid, era editor-periodista y directivo del periódico Merry England, y la mujer, Alice, versista y madre de siete hijos. El matrimonio en cuestión acogió y cuidó a Francis Thompson, quien había llegado a conocer impedido su ingreso en las bibliotecas públicas (situación realmente trágica para la víctima, que leía a Esquilo, Blake y De Quincey todas y cada una de las horas del día).

La familia Meynell le sostuvo, no sin adversidades, distanciado del opio; "a lo largo de los sobrantes diecinueve años de su historia -asegura el biógrafo Francis Meynell, hijo del célebre matrimonio- se ahorró al menos las tres cuartas unas partes de las penalidades propias de su juventud hambrienta y sin hogar". Con la publicación de tres pequeños volúmenes de versos, Poems (1893), destinado a Alice Meynell; Sister Songs (1895), inspirado por 2 pequeñas del matrimonio, y New Poems (1897), anunciado de nuevo con ciertas sumes a la desaparición del poeta, el éxito de éste fue afianzándose poco a poco más.

El lebrel del Cielo, obra definida por Patmore como "entre las elegías mucho más consagrados de la lengua inglesa", es, sin lugar a dudas, la mejor de Francis Thompson; hablamos de la poesía religiosa donde mucho más visible hace aparición el catolicismo místico no solo de nuestro creador, sino más bien aun de todo el conjunto poético de los místicos del siglo. La poesía de Thompson, intensamente influido por Crashaw y el conceptismo metafísico del siglo XVII, queda caracterizada por una inspiración galáctica, cuyo tema central es la concepción de todo el mundo, y tiene una policromía de palabras, una abundancia de imágenes, unos tonos musicales y una maestría de versificación ahora anticuada o actualizada que compensan con creces su aparente obscuridad, sus ideas abstrusas o confusas y la persistencia en el empleo de analogías y símbolos.

El "poeta del retorno a Dios", dado a los neologismos excéntricos, escribió asimismo poesías de una inspiración muy pura, preciosas en su íntima y reverente simplicidad, como Daisy, To a Snow-Flake, In no Strange Land (muchas de ellas aparecidas póstumas) y To a fallen Yew, cuya grandiosidad formal -juzgada barroca por ciertos- no se restringe al término poético, sino aun atiende a los inferiores datos expresivos.

Proponen también una hermosura destacable los 2 ensayos sobre De Quincey y Shelley (póstumo, 1908) publicados en el curso de su tardía colaboración en gacetas críticas. Su juicio sintético sobre Shelley -"hasta el objetivo fue el jóven encantado"- semeja a la perfección aplicable al mismo Thompson, ingenuo y maduro al unísono. Las proyectos de prosa periodística como Salud y santidad (Health and Holiness, 1905), sobre la vida ascética, y las biografías de figuras católicas como Ignacio de Loyola (1909) y J. B. de la Salle (1911, aparecida ahora en Merry England), las dos póstumas, revelan de qué forma el abstracto creador, infantil, tímido y afligido por su incapacidad práctica, halló cobijo en la fe, y no solo como poeta, sino más bien asimismo en relación hombre.

Poco aproximadamente desde 1898 vivió una vida prácticamente eremítica en el convento de capuchinos de Pantasaph, en Gales; más tarde pasó a Storrington. Víctima de la excitada tensión y de la desorganización de toda su historia, murió gracias a la tuberculosis.

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Obviamente llegar a comprender a Francis Thompson es algo que se reserva a un grupo limitado de personas, y que tratar de reconstruir quién y cómo fue la vida de Francis Thompson es una suerte de enigmaque posiblemente logremos rehacer si colaboramos conjuntamente.

Por ese motivo, si eres de aquellos que confían en que de forma cooperativa se puede hacer algo mejor, y detentas información en relación con la vida de Francis Thompson, o en relación con algún particularidad de su personalidad u creación que no hayamos observado en esta biografía, te pedimos que nos lo hagas llegar.

Los matices y las sutilezas que llenan nuestras vidas son siempre fundamentales, ya que perfilan la diversidad, y en la ocasión de la vida de alguien como Francis Thompson, que poseyó su relevancia en una época determinada, es fundamental intentar brindar un panorama de su persona, vida y personalidad lo más precisa posible.

Sin dudarlo, contacta con nosotros para relatarnos qué conocimientos posees sobre Francis Thompson. Estaremos complacidos de perfeccionar esta biografía con más información.