La historia del mundo la narran aquellas mujeres y hombres quea lo largo del tiempo, gracias a su proceder, sus ideas, sus innovaciones o su ingenio; han hecho queel género humano, de una forma u otra,prospere.
Si has llegado hasta aquí es porque tienes consciencia de la importancia que detentó Escopas en la historia. La forma en que vivió y las cosas que hizo en el tiempo en que permaneció en la tierra fue decisivo no sólo para aquellas personas que conocieron a Escopas, sino que posiblemente produjo una huella mucho más vasta de lo que logremosconcebir en la vida de personas que tal vez nunca conocieron ni conocerán ya nunca a Escopas de forma personal.Escopas fue uno de esos seres humanos que, por alguna razón, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.
(Escopas o Scopas; Paros, de hoy Grecia, s. IV a. C.) Escultor heleno. Junto con Praxíteles y Lisipo, se le considera la tercera enorme figura de la estatua griega del periodo de tiempo posclásico (siglo IV a.C.).
Escopas nació en la isla griega de Paros, y trabajó en la península helénica y en las ciudades griegas de Asia menor. Los pocos testimonios sobre su historia se tienen que a los cronistas tradicionales. Así, el geógrafo y también historiador heleno Pausanias cuenta que Escopas hizo la reconstrucción del templo de Atenea Alea en Tegea (Arcadia), del que se preservan extractos de los dos frontones, en los que se narraba la Caza del jabalí de Calidón y el Combate entre Aquiles y Telefo.
Por su lado, el de roma Plinio el Viejo le asigna los relieves de una columna en el templo de Artemisa en Éfeso. Se sabe además que, cerca del 350 a.C., en el momento en que era ahora un artista consagrado, le fue encomendada a Escopas, adjuntado con Timoteo, Briaxis y Leócares, la decoración escultórica del Mausoleo de Halicarnaso, construcción funeraria erigida en honor del rey Mausolo que fue entre las siete maravillas de todo el mundo viejo.
Entre las piezas escultóricas cuya paternidad se asigna a Escopas, preservadas en copias del periodo helenístico, están el conjunto de las Nióbides, que representa el sacrificio de las hijas de Níobe, y Meleagro y el jabalí de Calidón. Constituye una espléndida síntesis de su estilo la muy famosa Ménade, una danzante que encarna el movimiento y la felicidad.
Mucho más entusiasmado por enseñar el estado anímico que el físico, Escopas creó unas figuras agitadas, representadas en un movimiento convulso, y puso en los semblantes una expresión de enorme patetismo acentuada por los ojos intensamente hundidos y la boca entreabierta. En sus proyectos se advierte un estilo de enorme singularidad, caracterizado por el trazo inquieto, la fastuosidad de los drapeados y una notable intensidad trágica. Con este revolucionario régimen, Escopas deja la idealización característica del clasicismo y adelanta la carga sensible caracteristica de la estatua helenística.
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Sin duda conocer profundamente a Escopas es algo que está reservado a un grupo limitado de personas, y que pretender reconstruir quién fue y cómo fue la vida de Escopas es una suerte de puzzleque a lo mejor logremos reconstruir si colaboramos todos juntos.
Por esta razón, si eres de esas personas que creen en que cooperando se puede elaborar algo mejor, y detentas información sobre la existencia de Escopas, o con respecto a algún peculiaridad de su figura u creación que no hayamos contemplado en esta biografía, te solicitamos que nos lo envíes.
Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son siempre imprescindibles, ya que marcan la diferencia, y en el caso de la vida de un ser como Escopas, que tuvo su relevancia en una época determinada, es fundamental tratar de mostrar una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más precisa posible.
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