Enrique Congrains

La historia de las civilizaciones la escriben aquellas personas queen el transcurrir de los siglos, gracias a su proceder, sus ideas, sus innovaciones o su ingenio; han originado quela civilización, de una forma u otra,progrese.

Las biografías y las vidas de personas que, como Enrique Congrains, seducen nuestra atención, tienen que servirnos siempre como referencia y reflexión para ofrecer un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Intentar comprender la biografía de Enrique Congrains, el motivo por el cual Enrique Congrains vivió como lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo en su vida, es algo que nos ayudará por un lado a comprender mejor el alma del ser humano, y por el otro, el modo en que avanza, de forma inevitable, la historia.

Vida y Biografía de Enrique Congrains

(Enrique Congrains Martín; Lima, 1932 - Cochabamba, Bolivia, 2009) Narrador peruano. Junto con autores como Julio Ramón Ribeyro, Luis Loayza, Carlos Eduardo Zavaleta o Mario Vargas Llosa, Enrique Congrains fue entre los integrantes sobresalientes de la llamada generación del 50, que se caracterizó por el régimen verdadera de temas urbanos. Su novela No una, sino más bien muchas muertes (1958) se ocupó por vez primera en el ámbito de la literatura latinoamericana del tema de la marginación en las periferias de las enormes urbes y le valió una sólida cuenta en el panorama literario.

Enrique Congrains halló en un inicio enormes adversidades para difundir en el achicado medio editorial limeño, con lo que, animado por un espíritu al unísono aventurero y práctico, se hizo cargo en lo personal de todos y cada uno de los puntos de la publicación: impresión, edición, distribución y venta a residencia, primero en su país y después en otros sitios de América. Esta experiencia le dio un conocimiento directo de la vida popular peruana, que se refleja en su obra y que lo llevó a hacer compañías culturales y a examinar otros campos comerciales, donde tuvo éxitos y descalabros. Después de marchar a Venezuela, donde logró dinero organizando tutoriales de lectura rápida, Congrains abandonó la literatura.

Con un estilo desposeído y directo, cuyo lirismo aparece de la observación precisa y la identificación con la vida marginal de las barriadas limeñas, Enrique Congrains descubrió a los que leen una Lima poco famosa, atroz, beligerante y bullente de vida. La pelea de los apartados para subsistir cada día a su pobreza es el enorme tema del creador, como puede verse en sus libros de cuentos Lima, hora cero (1955), Kikuyo (1955) y, más que nada, en su única novela, No una, sino más bien muchas muertes (1957), que es un desgarrador testimonio del trabajo furtivo que transforma a enfermos mentales prácticamente en esclavos.

La obra cuenta la evolución de Maruja, quien, al comienzo de la novela, ahora está preparada para reconsiderar la validez de las ideas en que había apoyado su historia hasta la actualidad. Hay en No una, sino más bien muchas muertes una contestación, más allá de que un poco ingenua en ocasiones, al pesimismo: Congrains cree todavía, algo anacrónicamente quizá, en la pelea por la vida y en la oportunidad de forjarse una vida mucho más digna. No minimiza las adversidades; la omnipresencia del basural en el que la multitud vive precariamente a partir de los desperdicios todavía útiles nos recuerda a cada instante la hostilidad del ámbito.

Pero aun de este modo, semeja asegurar Congrains, brotan ciertas extrañas ocasiones que puede explotar el sujeto dotado de intención y también sabiduría. Por eso el auténtico interés de la obra radica no en la descripción del ámbito en sí, ni en los capítulos de delito y crueldad, sino más bien en el contraste entre aquéllos que desean editar su historia y quienes, uno por uno, se prueban inútiles de aprovecharla. La novela no es por consiguiente tan solo un archivo de la vida en la periferia de Lima y una queja contra la injusticia popular, sino supone un mensaje de promesa.

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Obviamente conocer en profundidad a Enrique Congrains es algo que se reserva a muy pocas personas, y que tratar de reconstruir la persona que fue y el modo en que vivió la vida de Enrique Congrains es una suerte de puzzleque posiblemente logremos rehacer si colaboramos juntos.

Por ese motivo, si eres de aquellos que confían en que colaborando existen posibilidades de elaborar algo mejor, y detentas información sobre la existencia de Enrique Congrains, o en relación con algún aspecto de su persona u creación que no hayamos observado en esta biografía, te pedimos que nos lo hagas llegar.

Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son en todos los casos fundamentales, ya que marcan la diferencia, y en el tema de la vida de un ser como Enrique Congrains, que poseyó su significación en un momento concreto de la historia, es indispensable intentar brindar una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.

No lo dudes y contacta con nosotros para narrarnos qué conoces sobre Enrique Congrains. Estaremos muy contentos de perfilar esta biografía con más información.