Edvard Grieg

Vida y Biografía de Edvard Grieg

(Edvard Hagerup Grieg; Bergen, 1843 - 1907) Compositor noruego reconocido como el primordial gerente de la música nacionalista de su país. Edvard Grieg Inició su capacitación musical con su madre, Gesine Judith Grieg, que era pianista y había estudiado con Albert Methfessel en Hamburgo. En 1858 sucedió un hecho importante para la capacitación musical del compositor noruego: un amigo de los Grieg, el compositor y violinista Ole Bull, les logró una visita en el lapso de la que escuchó tocar el piano al joven Edvard. Quedó tan impresionado que persuadió a sus progenitores a fin de que lo enviaran a estudiar al Conservatorio de Leipzig.

Grieg ingresó en tal centro de estudios en el momento en que contaba 15 años, y allí estudió piano con Louis Plaidy y Y también. F. Wenzel, que había sido amigo de Robert Schumann, y también Ignaz Moscheles. Adquirió asimismo entendimientos de armonía y contrapunto a través de Y también. F. Richter, Robert Papperitz y Moritz Hauptman. Su instructor de composición en Leipzig fue Carl Reinecke. En la localidad alemana, Grieg tuvo la posibilidad de ayudar a esenciales recitales como el que dio Clara Schumann en el Gewandhaus o a distintas representaciones de óperas de Wagner como Tannhäuser. En aquella temporada, cerca de 1862, Grieg ahora había escrito su Op. 1, que consistía en 4 piezas para piano, aparte de sus Cuatro canciones para contralto con contenidos escritos alemanes, que forman su Op. 2.

En mayo de 1863 decidió moverse a Copenhague, localidad donde se desarrollaba la mayoría de la vida cultural de Escandinavia. Allí estudió con el compositor danés Niels Gade, líder de la escuela romántica escandinava. Este le animó a crear una sinfonía que Grieg realizó pero jamás deseó estrenar. También en la ciudad más importante danesa entró en contacto con otros músicos como Emil Hartmann y Gottfred Matthison-Hansen, tal como con los escritores Benjamin Feddersen y Hans Christian Andersen. Este último le dio poemas para su obra Hjertets melodier (Armonías del corazón), Op. 5, que interpretaría fabulosamente su prima y futura mujer, la artista Nina Hagerup.

Fue asimismo en la ciudad más importante danesa donde trabó amistad con la persona que mucho más le marcó en su trayectoria posterior: el compositor Rikard Nordraak (1842-1866). Nordraak, creador del himno del país noruego, fue quien ingresó a Grieg en la música nacionalista de su país. Cuando los dos se conocieron en 1864, el joven Nordraak trabajaba en la música incidental para la obra Sigurd Slembe del dramaturgo Martinus Björnson, con quien asimismo colaboraría Grieg años después.

El agradecimiento que sintió el músico de Bergen hacia su compatriota le llevó a dedicarle su Humoresker Op. 6 para piano, primera obra de Grieg que exhibe influencias de la música habitual noruega. Su interés creciente por el folclore y la tradición musical de su país le llevó a fundar la sociedad Euterpe, al lado de los convocados Nordraak y Matthison-Hansen, cuyo propósito era publicar la música escandinava.

Entre 1865 y 1866 vivió en Roma, donde conoció al dramaturgo Henrik Ibsen, a cuya obra Peer Gynt pondría música mucho más adelante. El 15 de octubre de 1866 dio un concierto de música noruega en el Teatro de Christiania (la presente Oslo) al lado de la artista Nina Hagerup y la violinista Wilma Neruda. Al año siguiente se inauguró la Academia de Música Noruega que Grieg y el crítico Otto Winter-Hjelm habían proyectado fundar. Ese mismo año, el 11 de junio, se casó con Nina y próximamente terminó de crear su segunda Sonata para Violín Op. 13.

En 1869, Franz Liszt le escribió encomiando una de sus sonatas para violín y piano y le mostró su deseo de conocerle en lo personal. Ambos se hallaron en Roma meses después. En el verano de 1869 llegó a manos de Grieg una imitación de la compilación de canciones populares de Ludwig Mathias Lindeman (1812-1887), llamada Aeldre og myere norske fjeldmelodier (Viejas y novedosas canciones montañesas). Este hallazgo le permitió proseguir adentrándose en las opciones de la música habitual noruega y redactar su Op. 17 para piano, una sucesión de piezas fundamentadas en estas canciones.

A inicios de 1870 empezó su provechosa colaboración con el dramaturgo Björnson en proyectos como Foran sydens kloster, o distintas cantatas como Arnlijot Gelline, para voces femeninas, y Landkjending, para voces masculinas. Ambos planeaban hacer una ópera sobre tema noruego llamada Olav Trygvason que por último no llegaron a llenar. En 1871, Grieg contribuyó a la fundación de una sociedad musical para fomentar la música orquestal. En 1874, el Estado le concedió una asistencia económica de forma anual a fin de que pudiese ocuparse de lleno a la composición. De esta temporada son, por ejemplo proyectos, su Cuarteto de cuerda en sol menor, Den Bergtekne para barítono y orquesta y el Álbum para coro masculino.

A partir de 1876 emprendió enormes giras de recitales por Europa, en las que interpretó y dirigió sus proyectos. Su presentación en Londres en 1888 supuso el reconocimiento en todo el mundo de su obra. Entre 1880 y 1882 dirigió la orquesta del Harmonien (Sociedad Armónica) de su natal Bergen. Este fue entre los últimos compromisos oficiales que admitiría, en tanto que el resto de su historia lo dedicó a otras tareas como la composición de su Sonata para violonchelo Op. 36 y de múltiples cuadernos de Piezas Líricas. Además, participó en el bicentenario del nacimiento del escritor Ludvig Holberg en 1884 con la suite Fra Holbergs tid (Del tiempo de Holberg).

En el verano de ese año empezó la construcción de su porvenir hogar en Troldhaugen, hoy en día casa-museo del compositor. Fue en esa ciudad donde pasó el resto de sus años, construyendo y mirando viejas partituras o paseando por las montañas noruegas. En 1898, sus sacrificios para la difusión de la música de su país acabaron con la creación del primer festival de música de Noruega, que se festejó en Bergen. Para este acontecimiento compuso sus populares Danzas Sinfónicas Op. 64, fundamentadas en las canciones de Lindeman. Su salud se deterioró, pero continuó dando recitales en ciudades extranjeras como Varsovia y París. En 1906 compuso su última obra, los Fire salmer (Cuatro cánticos), basados en armonías populares.

La música de Grieg tiene aires de vida campestre y de contacto con la naturaleza, aspecto que tuvo enorme peso en la vida del músico. No es una música de enormes contrastes desgarradores, pero tiene enorme lirismo y fluye de forma ágil y descansada. Grieg es eminentemente un melodista: sus proyectos tienen un enorme atrayente melódico y esto propició su rápida difusión. Es asimismo un instrumentador fino que maneja con perfección las cuerdas y los instrumentos de viento-madera como el clarinete o el fagot. No utiliza en demasía los metales como otros contemporáneos suyos, si bien sí saca partido de las tubas en el momento en que es requisito.

En su etapa de capacitación, Grieg centró su interés en la música romántica y más que nada en el compositor alemán Robert Schumann. A partir de 1865, y tras comprender a Nordraak, empezó a inspirarse en el folclore de su país. Supo tratar la música habitual noruega de manera renovadora y es en sus arreglos de armonías folclóricas como las Norwegische Tänze Op. 35 (Danzas noruegas) para piano donde se muestran con mayor claridad los primordiales adelantos armónicos de su lenguaje. También están huellas del impresionismo musical en varias proyectos suyas como el Cuarteto en Sol menor Op. 27 (1877-8), en el que emplea la discordancia de manera muy libre, como después haría Claude Debussy en sus cuartetos.

Grieg escribió varias compilaciones de canciones, en parte pues su mujer, la artista Nina Hagerup, era su mucho más próxima fuente de inspiración, aparte de una increíble intérprete de sus armonías. Los temas de sus canciones tienden a ser cariñosos, como en las Hjertets melodier Op. 5, o populares como el período Haugtussa Op. 67, apoyado en poemas habituales noruegos.

El piano fue el instrumento, además de la voz, al que mucho más proyectos dedicó. El estilo pianístico de Grieg tiene frágiles adornos y debe bastante a la obra del polaco Frédéric Chopin y, como es natural, a los ritmos y armonías de Noruega. Su Concierto para piano en La menor, compuesto en 1868 y inspeccionado en 1907, es una obra de enorme exuberancia, con tintes folclóricos y rica en material contrastante.

Otro increíble ejemplo de su obra pianística es la Balada en Sol menor Op. 24, estéticamente próxima a su Cuarteto de cuerda en exactamente el mismo tono. La balada está inspirada en entre las canciones de Lindeman y está estructurada como un período de variantes. Sus diez compilaciones de Piezas líricas forman una parte del repertorio de varios pianistas apasionados, por su encanto melódico y disponibilidad técnica.

La producción camerística de Grieg, más allá de que no es tan abundante como su obra pianística o vocal, tiene hermosos ejemplos como las tres sonatas para violín, la Sonata para violonchelo o los 2 cuartetos de cuerda. La obra que le dio mucho más popularidad fue la música incidental para la obra Peer Gynt del dramaturgo Ibsen. Grieg trabajó fuertemente en esta obra, que hoy en día se interpreta en 2 suites (Op. 46 y Op. 55), que tan solo tienen dentro ocho de los veintiséis números inicialmente concebidos por el compositor para la obra de Ibsen.

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