Ya sea inspirando a más personas o formando parte de la acción. Eduardo Marquina es uno de esos sujetos cuya vida, sin duda alguna, merece nuestro interés por el nivel de influencia que tuvo en la historia.Comprender la existencia de Eduardo Marquina es conocer más acerca de época determinada de la historia del ser humano.
Si has llegado hasta aquí es porque eres sabedor de la relevancia que tuvo Eduardo Marquina en la historia. La manera en que vivió y lo que hizo en el tiempo en que estuvo en el mundo fue decisivo no sólo para quienes trataron a Eduardo Marquina, sino que posiblemente produjo una huella mucho más vasta de lo que podamossospechar en la vida de personas que tal vez jamás conocieron ni conocerán ya jamás a Eduardo Marquina de forma personal.Eduardo Marquina fue una persona que, por alguna causa, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre nunca debe borrarse de la historia.
(Barcelona, 1879 - Nueva York, 1946) Poeta y dramaturgo español. De familia aragonesa, Eduardo Marquina estudió en su localidad natal. Aun en el momento en que en su juventud escribió un drama lírico en catalán (Emporium, 1906), no se sumó al poderoso movimiento modernista de Cataluña, encabezado por la alta figura de Joan Maragall; compuso su obra en español y, más que nada en su teatro histórico en verso, fue el cantor del Cid Campeador y de la España mística y también imperialista.
Inició su tarea literaria con la publicación de poemarios de signo modernista como Las vendimias (1901), Églogas (1902) y Elegías (1905); por estas compilaciones se le considera, adjuntado con Salvador Rueda, Francisco Villaespesa y Manuel Machado, como entre los mucho más relevantes versistas del modernismo español. Posteriormente, no obstante, se orientó hacia una temática mucho más apegada a la verdad popular en Canciones actualmente (1910) y Tierras de España (1914). Escribió asimismo novelas que dan un interés menor.
Su teatro, más esencial por su volumen y su éxito, está compuesto por una secuencia de estampas históricas de gusto modernista en las que lo lírico se destaca sobre lo dramático. Se trata en su mayor parte de dramas históricos en verso y muy representativos de un teatro poético que encomia los valores de un pasado glorioso. También cultivó temas orientales con un decorativismo superficial. De su producción trágica resaltan En Flandes se puso el sol (1910) Las hijas del Cid (1908), Doña María la Brava, El monje blanco (1930), Pasos y trabajos de Santa Teresa de Jesús (1943) y La Santa Hermandad (1939).
En junio de 1946 fue nombrado embajador increíble para ayudar a la toma de posesión del nuevo presidente de Colombia; visitó otras repúblicas sudamericanas, donde dio charlas, y murió de repente en Nueva York en el momento en que se disponía a regresar a España.
¿Qué juicio te merece la vida de Eduardo Marquina? ¿Has podido leer toda aquella información que deseabas encontrar?
Es cierto que descubrir en lo más recóndito a Eduardo Marquina es algo que está reservado a muy pocas personas, y que pretender recomponer la persona que fue y el modo en que vivió la vida de Eduardo Marquina es una especie de puzzleque posiblemente podamos rehacer si contribuimos todos en conjunto.
Por esta razón, si eres de esas personas que confían en que colaborando se puede hacer algo mejor, y tienes información sobre la existencia de Eduardo Marquina, o con respecto a algún característica de su figura u obra que no hayamos observado en esta biografía, te solicitamos que nos lo hagas llegar.
Los matices y las sutilezas que llenan nuestras vidas son decididamente esenciales, ya que marcan la diferencia, y en el caso de la vida de un ser como Eduardo Marquina, que poseyó su importancia en un momento concreto de la historia, es vital tratar de brindar un aspecto de su persona, vida y personalidad lo más precisa posible.
No lo dudes y contacta con nosotros para relatarnos qué conoces con respecto a Eduardo Marquina. Estaremos ilusionados de perfeccionar esta biografía con más información.