(Diane Hall; Los Ángeles, California, 1946) Actriz de cine estadounidense. Tras estudiar interpretación en el Santa Ana College de California y en la Neighborhood Playhouse de Nueva York y accionar a lo largo de múltiples meses en teatro de repertorio, alcanzó una alguna notoriedad con su presencia en el musical Hair (1967), lo que le dejó pasar al cine en 1970.
Compañera sentimental del asimismo actor y cineasta Woody Allen, participó en múltiples películas dirigidas por él que la lanzarían a la popularidad, como Sueños de un seductor (1972), El dormilón (1973), La última noche de Boris Grushenko (1975) y, más que nada, Annie Hall (1977), relato de una especial historia amorosa entre Alvy Singer, un neurótico humorista (Woody Allen), y Annie Hall (Diane Keaton), una casquivana aspirante a actriz y artista.
Sin una composición precisamente definida, Annie Hall exhibe diferentes ocasiones en las que se marcha cimentando la relación entre los dos y de qué manera esta relación, indudablemente, se estropea y termina por romperse. Allen y Keaton interpretaron de manera atractiva unos individuos muy próximos a su forma de ser, algo que no es de extrañar sabiendo que Allen acostumbraba a redactar sus guiones basándose en personas de su ambiente.
La película, donde la profusión de gags no es tan aplastante como en los primeros grabes de Allen, e inclusive se puede ver un cierto tono agridulce en varios de los diálogos, supuso el paso a la madurez narrativa del director de cine y mereció, aparte del Oscar a la mejor película, al mejor directivo y al mejor guion original (escrito por nuestro directivo en colaboración con Marshall Brickman), el Oscar a la mejor actriz para Diane Keaton, que vio de esta manera de forma temprana consagrada su trayectoria.
La colaboración con Woody Allen siguió en grabes como Interiores (1978) y Manhattan (1979), novedosa historia de embrollos sentimentales entre 2 parejas en el marco del ámbito pseudointelectual neoyorquino. En estos trabajos logró Diane Keaton retratar con plena naturalidad a la actualizada mujer urbana y contribuyó a hacer una inclinación de tendencia con sus ropas extensas. También fueron recordables las actuaciones de Diane Keaton en El padrino (1972) y sus consecuencias.
Tras la separación de Woody Allen y Mia Farrow, Diane Keaton aceptó el papel que Mia Farrow debería haber interpretado en Misterioso asesinato en Manhattan (1993), recobrando la sintonía de sus primeras películas. A partir de una historia de detectives apasionados redactada con Marshall Brickman, con quien ahora había cooperado en Annie Hall y Manhattan, Woody Allen volvía a la comedia tras haber efectuado múltiples grabes mucho más serios. Woody y Diane encarnaron esta vez a Larry y Carol Lipton, un matrimonio de intelectuales de clase media que vive en Manhattan y entabla amistad con sus vecinos Paul y Lillian. Cuando Lillian muere de pronto de un ataque al corazón, la indiferente reacción del marido induce a Carol a suponer que ha ejecutado a su mujer, y la necesidad de localizar un aliciente en la vida y de presenciar conmuevas transporta a Carol y después al propio Larry a implicarse en una cómica investigación.
Con Woody Allen había rodado asimismo Días de radio (1987), pero, ajeno de sus trabajos con este cineasta, Diane Keaton desarrolló su carrera interviniendo en películas como Buscando al señor Goodbar (1977), Después del amor (1981), La muchacha del tambor (1984), Mrs. Soffel (1985), Crímenes del corazón (1986), Baby, tú vales bastante (1987), El padre de la novia (1991), El club de las primeras esposas (1997), Aprendiendo a vivir (1998) y Enredos de sociedad (2001). Fue nominada al Oscar por Rojos (1980), película sobre la revolución rusa donde encarnó a una periodista, La habitación de Marvin (1996), donde compartió letrero con Robert de Niro y Meryl Streep, y Cuando menos te lo esperas (2003), comedia sentimental que coprotagonizó con el veterano Jack Nicholson.
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