Si has llegado hasta aquí es porque eres sabedor de la relevancia que atesoró David Lynch en la historia. Cómo vivió y lo que hizo en el tiempo en que permaneció en este mundo fue decisivo no sólo para quienes trataron a David Lynch, sino que a caso dejó una huella mucho más vasta de lo que podamossospechar en la vida de gente que tal vez jamás conocieron ni conocerán ya nunca a David Lynch de modo personal.David Lynch fue una de esas personas que, por alguna causa, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.
Conocer las luces y las sombras de las personas relevantes como David Lynch, personas que hacen rodar y cambiar al mundo, es algo sustancial para que seamos capaces de apreciar no sólo la vida de David Lynch, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por David Lynch, aquellas personas a quienes de de una u otra forma David Lynch influenció, y sin duda, conocer y descifrar cómo fue vivir en la época y la sociedad en la que vivió David Lynch.
Las biografías y las vidas de personas que, como David Lynch, seducen nuestra curiosidad, tienen que ayudarnos en todo momento como referencia y reflexión para proponer un marco y un contexto a otra sociedad y otra época de la historia que no son las nuestras. Tratar de comprender la biografía de David Lynch, porqué David Lynch vivió de la forma en que lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo a lo largo de su vida, es algo que nos ayudará por un lado a comprender mejor el alma del ser humano, y por el otro, la manera en que avanza, de forma inexorable, la historia.
Vida y Biografía de David Lynch
(Missoula, 1946) Director de cine estadounidense. El padre de Lynch, botánico, no escatimaba energías en el momento de viajar de un Estado a otro, examinando elementos forestales. Este incesante trasiego logró del futuro directivo un niño solitario, perjudicado por el hecho de no tener amistades durables. Por otro lado, sus progenitores eran bastante comúnes en su modo de vida, conque, siendo ahora un joven, Lynch empezó a enseñar su inclinación por aquellas extrañezas que tengan la posibilidad de vulnerar la calma familiar.
De su paso por la Corcoran School of Art, en Washington, se derivó una vocación pictórica que entonces ha podido enriquecer en la Boston Museum School. En relación a este centro, fue mucho más que destacable el influjo de ciertos instructores que supieron encauzar en Lynch un deseo de editar sus pinturas de aire surrealista en cortos experimentales. El primero de ellos, The alphabet (1968), ahora era un síntoma de lo que mucho más adelante sería recurrente reiteración de temas escabrosos.
Al enseñar ese interés por el cine, la Academia de Bellas Artes de Pensilvania, donde se encontraba matriculado, subvencionó The grandmother (1970), el primer corto que Lynch exhibió de una manera estructurada. Con su estilo aún por cultivar, el directivo mostraba en ese largometraje a un niño que planta una semilla de la que medra su abuela. En suma, un recurso metafórico ahora explotado por otros artistas, pero que en un caso así era planteado con una singular aptitud de sugestión.
Al paso que estudiaba y exponía su obra pictórica, David Lynch trataba de arrimarse al cosmos íntimo de artistas como Francis Bacon y Edward Hopper. Esa cautelosa introspección se combinaba con una atareada vida popular, ya que modificaba de trabajo a un ritmo frenético. Repartidor de periódicos, conserje, usado en una tienda de copias: Lynch probó diferentes métodos de ganarse la vida, si bien ninguno le satisfizo.
En 1970 ingresó en el Center for Advanced Film Studies de Los Ángeles, donde adquirió la habilidad técnica que se requiere para ocuparse con mayor responsabilidad al negocio del cine. Con una beca del American Film Institute empezó el 29 de mayo de 1973 el rodaje de una cinta en fase de prueba, Cabeza borradora, que no ha podido llenar hasta 1977. Se trataba de un largometraje vanguardista y un poco pretencioso, pero en el momento en que lo vio Mel Brooks, este entendió que había encontrado al cineasta conveniente para regentar el extenso film que se disponía a generar, El hombre elefante.
La película narraba una historia real, ambientada en Londres en 1884, en el momento en que el doctor Frederick Treves (Anthony Hopkins) descubrió en una feria ambulante a la criatura que llamaban hombre elefante y que de todos modos era John Merrick (John Hurt), un joven de 21 años perjudicado por una neurofibromatosis múltiple que lo transformaba en un ser deforme. Con los cuidados de Treves, Merrick probó ser un hombre bondadoso y sensible que además de esto supo conmover a la sociedad de su tiempo.
El extenso film debía rodarse en blanco y negro, y para esto Lynch contó con el apoyo de Freddie Francis, directivo de fotografía a quien hay que la melancólica atmósfera que envuelve todas y cada una de las situaciones del largometraje. Del diseño de producción se hizo cargo Stuart Craig y el maquillaje que transformaba a John Hurt en la maltrecha criatura fue obra de Chris Tucker.
Cuando completó El hombre elefante, Lynch ahora se había transformado en entre las jóvenes promesas del cine estadounidense. Ahora bien, no fue aquel un instante en especial feliz en lo que respecta a resoluciones expertos: defendió un emprendimiento irrealizable, Ronnie Rocket, y además de esto se dejó negar la oferta de George Lucas para regentar El retorno del Jedi (1983). Consiguió con esto ganarse alguna popularidad de arbitrario, que trató de limitar admitiendo la dirección de otro extenso film de enorme presupuesto, Dune.
En 1963 la gaceta Astounding SF había anunciado el relato "El planeta de Dune", transformado un par de años después por su creador, Frank Herbert, en una saga novelística de enorme éxito. En 1972 el productor Arthur P. Jacobs se realizó con los derechos de la novela, que a su muerte pasaron a ser propiedad de Michel Seydoux. En un principio iba a ser Alejandro Jodorowsky el encargado de regentar el emprendimiento, que contaría con un reparto conformado por Orson Welles, Gloria Swansom, Charlotte Rampling, Alain Delon y Mick Jagger, artista de los Rolling Stones. El aparato de diseño se encontraba que viene dentro, entre otros muchos, por los dibujantes H. R. Giger y Jean Giraud "Moebius".
Pero en el momento en que la financiación del largo se realizó irrealizable, el productor italiano Dino de Laurentiis adquirió en 1980 los derechos de la novela y encargó su versión cinematográfica a Ridley Scott, quien rechazó la oferta. La hija de Laurentiis, Raffaella, halló en David Lynch un conveniente sustituto, y de este modo fue como el joven directivo se vio a cargo de un colosal aparato de setecientos especialistas, cincuenta actores y 20.000 plus. La filmación, iniciada el 30 de marzo de 1983, transcurrió en los Estudios Churubusco, en México, agitada por permanentes presiones. Tanto se criticaron en su instante los desenlaces, que transcurrido un tiempo Dune se convirtió en un largo a descubrir de nuevo, lleno de instantes de interés, más que nada en el lote estético.
El fracaso comercial de Dune puso en cuestión la carrera de Lynch, quien deseó resarcirse con Terciopelo azul (1986), un interesante homenaje al cine negro que tenía características que lo aproximaban a los mundos de Franz Kafka y Luis Buñuel. Kyle MacLachlan, un recuperado Dennis Hopper y la prácticamente principiante Isabella Rossellini protagonizaban una historia que se comenzaba con el descubrimiento casual de una oreja cercenada y derivaba entonces a ámbitos de crueldad y fetichismo.
Tan personal era la iniciativa que los teóricos del postmodernismo hallaron en Lynch valores inopinados, sintomáticos de un periodo de tiempo en que los géneros iban probando su invalidez. De acuerdo con esa etiqueta postmoderna, Lynch se dedicó a sugerir novedosas muestras de su arte, como la compilación fotográfica que efectuó en 1988 con la colaboración de Linda Mason y Paul Gobel, llamada "Construcciones anímicas postmodernas".
Entusiasmado por el planeta de la televisión, probó entonces suerte con un teledrama donde pretendía reelaborar todas y cada una de las convenciones del género policiaco, Twin Peaks, emitido por la cadena ABC. El razonamiento de esta serie viraba en torno al asesinato de Laura Palmer, un delito lleno de secreto que desataba los diablos ocultos de un original grupo de individuos. Pero si en un comienzo Twin Peaks fue una moda, transcurrido un tiempo degeneró clamorosamente. Así, si bien Lynch fue premiado en el Festival de Cannes por Corazón salvaje, su trayectoria empezó a oscurecerse.
Sus novedosas películas fracasaron en taquilla y el público comenzó a desatender las excentricidades del directivo. En este nivel, procuró arrancar la carrera cinematográfica de su hija, Jennifer Chambers Lynch, pero su primer largometraje no dio los desenlaces aguardados. Cuando el directivo aceptó efectuar un aviso televisivo por encargo de una firma de tests para embarazo, varios críticos se preguntaron qué había malogrado la carrera de un constructor tan agradable y también influyente. En 1996, tras una relativa sepa, pareció comprar importancia con Carretera perdida, un largometraje opresivo y también inquietante. En 1999 sorprendió a crítica y público con Una historia verídica, un largometraje intimista alejadísimo del resto de su obra, y en 2001 volvió a su rebuscamiento y excentricidad comunes con Mulholland Drive.
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Evidentemente conocer profundamente a David Lynch es algo que está reservado a un grupo limitado de personas, y que pretender recomponer quién fue y cómo fue la vida de David Lynch es una especie de puzzleque con bastante probabilidad logremos rehacer si cooperamos juntos.
Por ese motivo, si eres de esas personas que confían en que de forma colaborativa es posible hacer algo mejor, y detentas información sobre la biografía de David Lynch, o con respecto a algún característica de su personalidad u creación que no se contemple en esta biografía, te solicitamos que nos lo hagas llegar.
Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son siempre determinantes, ya que marcan la diferencia, y en el tema de la vida de un ser como David Lynch, que poseyó su trascendencia en un momento concreto de la historia, es esencia intentar ofrecer una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.
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