Apreciar lo bueno y lo malo de las personas relevantes como David Hilbert, personas que hacen rotar y transformarse al mundo, es algo fundamental para que seamos capaces de valorar no sólo la vida de David Hilbert, sino la de toda aquellas gentes que fueron inspiradas por David Hilbert, aquellas personas a quienes de de una forma u otra David Hilbert influenció, y desde luego, comprender y entender cómo fue vivir en la época y la sociedad en la que vivió David Hilbert.
Las biografías y las vidas de personas que, como David Hilbert, atraen nuestro interés, deben servirnos en todo momento como referencia y reflexión para ofrendar un marco y un contexto a otra sociedad y otra época de la historia que no son las nuestras. Tratar de comprender la biografía de David Hilbert, porqué David Hilbert vivió del modo en que lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo durante su vida, es algo que nos impulsará por un lado a conocer mejor el alma del ser humano, y por el otro, la forma en que se mueve, de forma inevitable, la historia.
(Wehlan, de hoy Alemania, 1862 - Gotinga, id., 1943) Matemático alemán. Su padre era juez, y fue designado al poco de su nacimiento a Königsberg, donde David Hilbert recibió su educación y en cuya facultad inició los estudios de matemáticas. Estudió asimismo en las universidades de Heidelberg y de Berlín, asistiendo en esta última a los tutoriales de Hermann von Helmholtz y de los matemáticos Karl Weierstrass, Ernst Kummer y Leopold Kronecker.
A fines de 1884 se doctoró en Königsberg, poco antes que hiciese lo propio su amigo Hermann Minkowski. La proposición de Hilbert trataba de los invariantes algebraicos, un tema que le ha propuesto su joven instructor Ferdinand von Lindemann, quien un par de años antes había probado que «pi» es un número trascendente.
Viajó después a Leipzig, donde asistió a las clases de Felix Klein, y a París, donde conoció a Henri Poincaré, Camille Jordan y Charles Hermite. De regreso a Königsberg, en 1886 inició allí su trayectoria académica como privatdozent; siete años después, en el momento en que Lindemann marchó a Berlín, Hilbert accedió al cargo de instructor ordinario por recomendación de Klein, por entonces instructor en Gotinga; a esta facultad se incorporó asimismo Hilbert en 1895, nuevamente por intervención de Klein, y en ella desarrolló el resto de su carrera.
En Gotinga centró su atención en la geometría, intentando de plasmar en ese nuevo interés un concepto que nutría desde bastante antes: lo esencial no es la naturaleza de los elementos geométricos, sino más bien la de sus correspondencias. En su obra de 1899, encargada de proveer a la geometría euclidiana una fundamentación rigurosamente axiomática y que ha ejercido una enorme predominación sobre el avance de la matemática en el siglo XX, efectuó el primer esfuerzo sistemático y global para realizar extensivo a la geometría el carácter puramente formal que habían conseguido la aritmética y el análisis matemático.
En el Congreso Internacional de Matemáticos festejado en París en 1900, Hilbert presentó una lista de veintitrés inconvenientes que a la sazón no habían sido resueltos todavía; a su juicio, las probables líneas de avance que iba a proseguir la matemática del siglo XX habrían de estar en decisión correcta enlazadas a la resolución de estas cuestiones. Sus trabajos siguientes desembocaron en la concepción de los espacios de infinitas dimensiones llamados espacios de Hilbert, base del moderno análisis servible.
Desde el año 1904 comenzó a desarrollar un programa para dotar de una base axiomática a la lógica, la aritmética y la teoría de conjuntos, con la meta último de axiomatizar toda la matemática. Aunque su propósito de probar la rigidez de la aritmética debía verse fallido por los desenlaces siguientes (1931) conseguidos por Kurt Gödel, el software de formalización de Hilbert contribuyó al avance de la llamada metamatemática, entendida como procedimiento para detallar la rigidez de cualquier sistema formal.
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Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son siempre esenciales, ya que perfilan la diversidad, y en el tema de la vida de una persona como David Hilbert, que detentó su relevancia en una época determinada, es esencia procurar brindar un panorama de su persona, vida y personalidad lo más rigurosa posible.
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