Ya sea inspirando a más seres humanos o siendo una pieza esencial de la acción. Carlos Ruiz Zafón es una de las personas cuya vida, en verdad, merece nuestro interés debido al nivel de influencia que tuvo en la historia.Conocer la vida de Carlos Ruiz Zafón es comprender más acerca de etapa determinada de la historia de la humanidad.
Si has llegado hasta aquí es porque tienes consciencia de la importancia que atesoró Carlos Ruiz Zafón en la historia. La manera en que vivió y lo que hizo en el tiempo en que permaneció en este mundo fue decisivo no sólo para quienes conocieron a Carlos Ruiz Zafón, sino que quizá produjo una huella mucho más honda de lo que logremosconcebir en la vida de personas que tal vez jamás conocieron ni conocerán ya nunca a Carlos Ruiz Zafón en persona.Carlos Ruiz Zafón fue uno de esos seres humanos que, por algún motivo, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre nunca debe borrarse de la historia.
Las biografías y las vidas de personas que, como Carlos Ruiz Zafón, seducen nuestro interés, deben ayudarnos siempre como punto de referencia y reflexión para ofrendar un marco y un contexto a otra sociedad y otra época de la historia que no son las nuestras. Hacer un esfuerzo por entender la biografía de Carlos Ruiz Zafón, porqué Carlos Ruiz Zafón vivió de la forma en que lo hizo y actuó del modo en que lo hizo en su vida, es algo que nos ayudará por un lado a comprender mejor el alma del ser humano, y por el otro, el modo en que se mueve, de forma implacable, la historia.
Vida y Biografía de Carlos Ruiz Zafón
(Barcelona, 1964 - Los Ángeles, Estados Unidos, 2020) Escritor español, creador de La sombra del viento, entre los best sellers mucho más relevantes de la literatura reciente. En junio de 2008 se habían vendido de esta novela mucho más de diez millones de ejemplares en el mundo entero.
Carlos Ruiz Zafón se formó en el instituto de los Jesuitas de Sarrià y, a pesar de que más tarde cursó estudios de periodismo, dirigió su trayectoria profesional hacia la propaganda. En 1992 decidió dejar su trabajo como directivo creativo de una esencial agencia de la Ciudad Condal (“Antes de quedar atrapado en un nivel económico del que no me podría deshabituar”, ha dicho) y ocuparse a redactar.
Su primera incursión en la narrativa de fantasía, terror y aventuras, El príncipe de la niebla (1993), ambientada en un pueblo marítimo del sur de Inglaterra a lo largo de la Segunda Guerra Mundial, consiguió el premio Edebé de literatura juvenil. El flamante novelista decidió entonces invertir los tres millones de pesetas del galardón en llevar a cabo situación un viejo sueño de niñez (“De pequeño tenía fijación por el cine americano tradicional y por el planeta del jazz. Decía a mis amigos: Cuando sea mayor voy a vivir en Los Ángeles”) y se estableció en Los Ángeles, California, localidad donde radicó desde 1994 y donde compaginaba su trayectoria literaria con la de escritor de guiones cinematográfico.
A El príncipe de la niebla le proseguirían El palacio de la medianoche (1994), cuya trama se lleva a cabo en la Calcuta de los años treinta, y Las luces de septiembre (1995), cerca de un enigmático desarrollador de juguetes, sendos títulos asimismo liderados al público juvenil que, con el previo, se reunirían más tarde en el volumen La trilogía de la niebla (2007). En 1999 aparecería Marina, ambientada en una Barcelona nublosa y afinada que preludiaba la de La sombra de viento.
En 2001 Ruiz Zafón publicó su primera novela para mayores, La sombra del viento, una historia ambientada en la Barcelona de la posguerra al estilo del folletín decimonónico de Charles Dickens o Victor Hugo, con una trágica historia amorosa como trasfondo, donde se amalgamaban, con enorme fuerza narrativa, los elementos tradicionales del género: novela histórica, costumbrismo, intriga y suspense. La novela había quedado finalista del premio Fernando Lara 2000, que ganaría Ángeles Caso con Un largo silencio, y, si bien las bases del galardón limitaban la publicación a la obra ganadora, Editorial Planeta decidió llevar a cabo una salvedad frente a la calidad de la novela y “el acierto con el que se ha aproximado a temas universales como el cariño, el secreto o la pérdida de la inocencia”.
El éxito del libro no fue inmediato. Aquel año la novela pasó completamente inadvertida por la parte de la crítica nacional, si bien próximamente se vería que no fue de este modo entre los que leen, que lograrían, a través del boca-oreja, transformarla en un fenómeno literario, algo similar a eso que sucediera con Javier Cercas y su novela Soldados de Salamina (2001). Pronto, la estela de Ruiz Zafón se extendería a otros países. En Alemania, por poner un ejemplo, el canciller Gerhard Schröder aconsejó públicamente su lectura, y próximamente se equiparó la influencia del escritor en ese país con la de Javier Marías.
En 2004 La sombra del viento había sido traducida a 40 lenguajes. Ese mismo año consiguió el premio José Manuel Lara Hernández a la obra mucho más vendida en España; la biblioteca central de Nueva York la eligió como “libro para rememorar”, y fue conocida en Francia como la mejor novela extranjera del año. El jurado, conformado por escritores, críticos y editores, resaltó que la novela de Zafón era "al unísono alcanzable al enorme público y una obra de erudito". La obra logró asimismo un destacable éxito de crítica (el períodico The New York Times equiparó al creador con Borges). Convertido inesperadamente en entre los fenómenos editoriales mucho más esenciales de la literatura reciente, el libro dejó a su creador terminar con lo que él mismo definió como "mi etapa con las novelas juveniles".
4 años después, en el primer mes del verano de 2008, La sombra del viento llevaba 247 semanas en la lista de los diez libros mucho más vendidos en España, y en el mundo entero se habían vendido diez millones de ejemplares. Aunque Ruiz Zafón había recibido sustanciosas promociones para llevar la novela a las pantallas cinematográficas, se resistió a ceder los derechos si no le ofrecían “garantías de que se hará con un cierto decoro; si no, quiero que no haya película, lo esencial es el libro”.
El 17 de abril de 2008, con una campaña mediática sin precedentes y una tirada de un millón de ejemplares, llegaba a las librerías españolas la novedosa novela del escritor, El juego del ángel, donde el creador reanudaba el cosmos del Cementerio de los Libros Olvidados. La presentación del libro sucedió en el Gran Teatro del Liceo barcelonés, engalanado para la ocasión con una escenificación increíble que recreaba una vieja biblioteca. Pocas ocasiones un acto de estas especificaciones había generado tanta expectación y tal encontronazo en los medios (150 cronistas y 15 cámaras de televisión cubrieron el acontecimiento). Si La sombra del viento había logrado apoderarse a millones de leyentes sin solamente promoción, esta vez la novedosa distribución venía avalada por una campaña promocional mucho más caracteristica de otro género de acontecimientos, como la presentación de una película o de un conjunto de rock.
El juego del ángel nacía, desde un comienzo, para transformarse en best seller, y de esta manera fue. Diez días tras la aparición del libro, coincidiendo con la festividad de San Jordi en Cataluña (el 23 de abril), Ruiz Zafón fue la estrella mucho más pedida del firmamento literario. Ante la carpa apta para la firma de libros, ambientada tal y como si se tratase del Cementerio de los Libros Olvidados, las colas superaron todas y cada una de las esperanzas. Cientos de personas aguardaron por varias horas para hacerse con una dedicatoria del creador. Según las cantidades facilitadas a última hora de ese día, solo en Cataluña se habían vendido 250.000 ejemplares (unos 20.000 cada hora, o lo que es exactamente lo mismo, mucho más de 300 cada segundo). En una semana se habían vendido 580.000 ejemplares. Lo mismo ocurrió en el primer mes del verano en la Feria del Libro de La capital de españa.
Un éxito aguardado, pero aplastante, al que habría que añadir el que se suponía en otros países, como Francia, Alemania, Portugal o Inglaterra, con los que la editorial ahora había firmado los contratos de distribución. Carlos Ruiz Zafón no descartaba por entonces regresar a instalarse en España; si bien casado y habitante en Los Ángeles, sostenía una investigación en Barcelona al lado de la Sagrada Familia. El exitoso novelista, no obstante, continuaría ahora para toda la vida en California, escribiendo de conformidad con su inveterada práctica a la noche, entre su compilación de figurillas de dragón.
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Los matices y las sutilezas que llenan nuestras vidas son en todos los casos importantes, ya que destacan la singularidad, y en el tema de la vida de un ser como Carlos Ruiz Zafón, que detentó su relevancia en un momento histórico concreto, es imprescindible procurar ofrecer una visión de su persona, vida y personalidad lo más precisa posible.
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