La historia del mundo la narran las mujeres y hombres queen el paso de los años, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han hecho quela civilización, de una forma u otra,avance.
(Trelleck, 1872 - Plas Penrhyn, 1970) Filósofo y matemático británico. Su abuelo, el destacable político y orador John Russell, había sido nombrado conde por la reina Victoria I de Inglaterra, y desempeñó los cargos de primer lord del Tesoro y presidente. Los progenitores del joven Bertrand, de forma de pensar liberal con algunos matices radicales, hubiesen esperado para su hijo una refulgente carrera política. Y de esta forma, después de la capacitación recibida en el Trinity College de Cambridge, el joven fue enviado en 1888 y para largo tiempo a los Estados Unidos, para que pudiese estudiar allí la vida política y las instituciones del país.
Nuevamente en la patria, y en calidad de "fellow" en el Trinity College, se vio distanciado de semejante institución en 1916 gracias a la actitud pacifista intransigente adoptada en el curso de la Primera Guerra Mundial. Ello le valió además 4 meses de prisión, a lo largo de los que redactó su Introducción a la filosofía matemática (Introduction to Mathematical Philosophy, 1919).
Previamente, en 1900, había anunciado un considerable libro sobre Leibniz, y en 1910 Principia mathematica (en colaboración con el pensador Alfred North Whitehead), artículo que planteaba una interpretación "logística" de las matemáticas. Dicha proposición de la reducción absoluta de semejante ciencia a lógica había sido asimismo sostenida en Principles of Mathematics, en 1903. La "teoría de los modelos", la de los números como "clases de clases" y la "paradoja de Russell" fueron los desenlaces mucho más significativos de esta extensa tarea de investigación.
En 1920 nuestro creador se encontraba en Rusia. El mismo año llegó hasta Pekín, y en tal ocasión fue considerado fallecido por varios periódicos de europa; ello se redujo, en la verdad, a una pura pulmonía. Vuelto a Inglaterra, el pensador publicó, entre 1921 y 1927, ciertos libros que propagaron después su celebridad: Análisis de la cabeza (Analysis of Mind, 1921) y Análisis de la materia (Analysis of Matter, 1927). Con su segunda mujer, Dora Black, con la que contrajo matrimonio en 1921 (en 1894 se había casado con Alys Smith), estableció en Londres, de 1927 a 1932, una escuela infantil inspirada en una pedagogía progresiva y desentendida.
En 1936 festejó terceras nupcias con Patricia Spence, y en 1938 fue llamado a la Universidad de Chicago en calidad de "visiting professor" de filosofía. El año siguiente enseñó en la California University de Los Ángeles. En 1940 su cargo en el City College de Nueva York dio sitio a una polémica increíblemente áspera, y provocó apasionadas manifestaciones en ciertos entornos: se le recriminaba la exposición en forma singularmente cruda de sus críticas sobre la vida sexual.
Aparte de las indagaciones de carácter lógico-matemático, Bertrand Russell había de hecho cultivado, y con singular fortuna, el estudio de inconvenientes sociales y ético-políticos, y anunciado, consecuentemente, contenidos escritos como Matrimonio y ética (Marriage and Morale, 1929), La conquista de la alegría (The Conquest of Happiness, 1930) y La educación y el orden popular (Education and the Social Order, 1932). En semejantes proyectos el creador se revelaba escritor especial y agudo, a quien el racionalismo y la muy elegante ironía inducían a resoluciones habitualmente paradójicas, pero siempre y en todo momento muy estimulantes.
En 1950 recibió el premio Nobel de Literatura. En 1952, a los ochenta años, se unía en cuartas nupcias a Edith Finch, y en 1953 publicada la novela Satanás en los suburbios y otras narraciones (Satan in the Suburbs and Other Stories). En 1955 dio a la imprenta el testamento espiritual de Albert Einstein, y se manifestó abiertamente a favor de la prohibición de la guerra atómica y de los conflictos armados por norma general.
Russell rechazó próximamente el idealismo metafísico en que fue educado. Su teoría del conocimiento es verdadera y desea conectar, a semejanza de la de su compañero George Edward Moore, con las intuiciones del los pies en el suelo ordinario. Por un lado, es el heredero de la vetusta tradición del empirismo británico, una corriente filosófica unida siempre y en todo momento al espíritu del liberalismo y de la Ilustración, que quiere achicar todo contenido cognitivo a los datos de la experiencia sensible. Por otro, es el lógico contemporáneo mucho más ambicioso, ofuscado con la iniciativa de un lenguaje simbólico especial que suprima toda ambigüedad expresiva. El resultado de todas y cada una estas intranquilidades es el llamado atomismo lógico de Russell, una sobria metafísica empirista que se cuenta entre los más destacados logros de la filosofía moderna.
En sus Principia mathematica (1910-1913), escritos en colaboración con Alfred North Whitehead, ha propuesto la solución de inconvenientes lógicos que venían atormentando a la filosofía y a la matemática de las últimas décadas. Sus trabajos en la "teoría de tipos" y en la "teoría de las especificaciones" tienen la posibilidad de citarse entre lo mucho más representativo del estilo analítico de filosofar, que una parte de la lógica para intentar aclarar puzzles seculares de la historia del pensamiento.
Russell consideraba misión del intelectual la difusión de una cultura que habitúe a los hombres a la revisión de sus ideas y a la tolerancia recíproca; la ciencia, en calidad de semejante, no es suficiente para la alegría de los humanos, quienes, en la consecución de semejante propósito, tienen que asistir al arte, al amor y al respeto recíproco. El mismo Russell no fue un caso de muestra de normalismo ni de adhesión a los valores establecidos.
Parte importante de su obra es de contenido popular y ética, en una vena inconformista poquísimo capaz para psiques esquemáticas. Respecto a la filosofía política, escribió múltiples estudios, entre ellos Los caminos de la independencia (1924), en el que expuso las etapas históricas del socialismo, el anarquismo y el sindicalismo y trató temas relacionados con el gobierno, la ciencia y la civilización en el socialismo, aparte de investigar las ideas de Karl Marx, Mijail Bakunin y otros.
En Vieja y novedosa ética sexual (1929) examinó ciertas instituciones y valores básicos de la sociedad como el matrimonio, la prostitución, la naturaleza del amor, la educación sexual, el divorcio y otros temas vinculados a la moralidad sexual. En su obra El Poder en los hombres y en los pueblos (1938), examinó la categoría del poder, ampliándola a varios atributos sociales, militares, científicos, públicos y económicos; lo mucho más atrayente de su análisis es la proposición que figuró décadas después como entre los elementos claves de la filosofía actualizada de que entre semejantes instituciones y figuras no hay jerarquía alguna, solo relaciones aproximadamente activas que se solapan unas a otras según las situaciones históricas.
En 1945 publicó la gran Historia de la filosofía occidental, obra increíble por su erudición, el poder persuasivo mediante relaciones auténticos entre pensadores y tendencias, y más que nada por la maestría de la prosa, no exenta de talento y sentido del humor, lo que favorece el acercamiento amable de los que leen a este libro monumental por su extensión y propósitos.
¿Qué juicio te merece la vida de Bertrand Russell? ¿Hallaste toda aquella información que esperabas encontrar?
Sin duda alguna descubrir en lo más recóndito a Bertrand Russell es algo que se reserva a pocas personas, y que tratar de reconstruir la persona que fue y el modo en que vivió la vida de Bertrand Russell es una suerte de enigmaque probablemente alcancemos a reconstruir si colaboramos conjuntamente.
Por ese motivo, si eres de aquellos que confían en que colaborando existen posibilidades de crear algo mejor, y conservas información con respecto a la vida de Bertrand Russell, o acerca de algún elemento de su personalidad u obra que no hayamos contemplado en esta biografía, te pedimos que nos lo envíes.
Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son decididamente importantes, ya que destacan la singularidad, y en la ocasión de la vida de alguien como Bertrand Russell, que detentó su trascendencia en un momento concreto de la historia, es imprescindible procurar ofrecer una visión de su persona, vida y personalidad lo más precisa posible.
Sin dudarlo, contacta con nosotros para contarnos qué sabes acerca de Bertrand Russell. Estaremos complacidos de poder completar esta biografía con más información.