Antonio Quintanilla

Si has llegado hasta aquí es porque tienes conocimiento de la relevancia que detentó Antonio Quintanilla en la historia. El modo en que vivió y aquello que hizo durante el tiempo que estuvo en el mundo fue decisivo no sólo para aquellas personas que trataron a Antonio Quintanilla, sino que quizá dejó una huella mucho más insondable de lo que podamosconcebir en la vida de personas que tal vez nunca conocieron ni conocerán ya nunca a Antonio Quintanilla en persona.Antonio Quintanilla fue un ser humano que, por alguna razón, merece ser recordado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.

Las biografías y las vidas de personas que, como Antonio Quintanilla, cautivan nuestra curiosidad, tienen que ayudarnos siempre como punto de referencia y reflexión para ofrecer un marco y un contexto a otra sociedad y otra etapa de la historia que no son las nuestras. Hacer un esfuerzo por entender la biografía de Antonio Quintanilla, el motivo por qué Antonio Quintanilla vivió como lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo a lo largo de su vida, es algo que nos impulsará por un lado a conocer mejor el alma del ser humano, y por el otro, la forma en que avanza, de forma inevitable, la historia.

Vida y Biografía de Antonio Quintanilla

(Santander, 1789 - Madrid, 1863) Militar español que fue el último gobernador español de Chiloé y la última autoridad de españa que rigió sobre una parte del territorio chileno. Nació en el seno de una modesta familia santanderense, lo que le forzó a emigrar a América. Llegó a Chile en 1813 y se estableció en la ciudad de Concepción, donde se empleó como ligado en una tienda y entró en contacto con bastante de los políticos independentistas chilenos. Se alistó en el ejército verdadera, que tenía como misión reconquistar Chile para la corona de españa.

Merced a su brava participación en la mayor parte de las acciones bélicas contra los patriotas chilenos fue ascendiendo de a poco hasta llegar al rango de coronel. Tras la guerra de Chacabuco fue designado por el virrey de Perú gobernador de la isla Grande de Chiloé, donde desplegó un considerable contingente de fuerzas realistas. Al poco de su llegada recibió los galones de general.

En 1817 resistió todos y cada uno de los asaltos de las tropas chilenas, puesto que Chiloé era el único territorio de Chile que continuaba bajo la soberanía de la Corona de España. Rechazó a los hombres del coronel Beauchef y por un par de veces a las tropas del general Freire. Todos los amos militares chilenos trataron de negociar múltiples tratados de capitulación, pero todos fueron rechazados por Quintanilla.

El general Freire, que en aquel instante era presidente de la República, organizó un fuerte ejército en 1825 que se lanzó sobre la última provincia que los chilenos consideraban territorio nacional que estaba dominada por las tropas españolas. Los hombres de Quintanilla padecieron 2 fuertes derrotas en las peleas de Pudeto y Bellavista, que tuvieron rincón a inicios de enero de 1826.

Quintanilla envió a Antonio Manuel de Garay con plenos poderes para negociar un tratado de paz con Freire. Ambos llegaron a un convenio en el que se establecía la retirada de las tropas españolas y la distribución de la soberanía de Chiloé a Chile. Quintanilla declaró con posterioridad que aceptó por causas estratégicas y por eludir una guerra que tiñera de sangre la zona.

Garay regresó a Tantauco, donde estaba el cuartel general del general español, con una carta personal de Freire a Quintanilla, quien le recordaba sus vieja amistad, le ofrecía sus servicios y le invitaba a establecerse de manera determinante en el país. El Tratado de Tantauco se firmó el 19 de enero de 1826; Freire lo logró en su cuartel de San Carlos y Quintanilla en nuestra Tantauco.

El 22 de enero sucedió en San Carlos la solemne liturgia donde se causó la rendición del gobernador español y Chiloé era puesta bajo la soberanía de Chile. El general español rechazó la oferta de mantenerse en Chile y prefirió regresar a España en compañía de su mujer, Antonia Álvarez Garay. En 1830 recibió el nivel de mariscal de campo. Uno de sus hijos, Antonio de Quintanilla y Álvarez, se vio envuelto en 1860 en un movimiento innovador contra la Reina Isabel II, con lo que fue procesado y culpado. Pero la reina lo indultó en honor a los servicios prestados por su padre a la patria.

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Por ese motivo, si eres de aquellos que creen en que cooperando es posible crear algo mejor, y conservas información sobre la biografía de Antonio Quintanilla, o sobre algún aspecto de su figura u obra que no hayamos contemplado en esta biografía, te pedimos que nos lo hagas llegar.

Los matices y las sutilezas que llenan nuestras vidas son decididamente importantes, ya que destacan la singularidad, y en el caso de la vida de un ser como Antonio Quintanilla, que detentó su trascendencia en una época concreta, es fundamental tratar de ofrecer una visión de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.

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