Alfred North Whitehead

La historia de la civilización la escriben las personas queen el transcurrir de los siglos, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han ocasionado quela sociedad, de una forma u otra,avance.

Ya sea inspirando a más personas o siendo parte de la actuación. Alfred North Whitehead es una de esas personas cuya vida, en efecto, merece nuestra atención por el nivel de influencia que tuvo en la historia.Comprender la biografía de Alfred North Whitehead es comprender más acerca de una época concreta de la historia de la humanidad.

Las biografías y las vidas de personas que, como Alfred North Whitehead, cautivan nuestro interés, tienen que servirnos siempre como referencia y reflexión para proponer un marco y un contexto a otra sociedad y otra época de la historia que no son las nuestras. Intentar comprender la biografía de Alfred North Whitehead, porqué Alfred North Whitehead vivió del modo en que lo hizo y actuó del modo en que lo hizo en su vida, es algo que nos impulsará por un lado a comprender mejor el alma del ser humano, y por el otro, la forma en que se mueve, de forma inexorable, la historia.

Vida y Biografía de Alfred North Whitehead

(Ramsgate, 1861 - Cambridge, Massachusetts, 1947) Filósofo y matemático inglés. Fue instructor en la University College de Londres, en el Imperial College of Science and Technology de Kensington y en el Trinity College de Cambridge. Desempeñó, asimismo, esenciales cargos administrativos y pedagógicos, cuya experiencia recogió en la obra Los fines de la educación y otros ensayos (1924). En 1924 enseñó en Harvard, donde influyó sobre George H. Mead, John Dewey, Willard van Orman Quine y, por norma general, sobre el neorrealismo americano.

La primera obra de Whitehead fue Tratado de álgebra universal (1893), que forma una vuelta en clave actualizada al ideal de Leibniz de fundamentar todas y cada una de las ciencias en el cálculo lógico. De aquí el emprendimiento elaborado con Bertrand Russell, Principia Mathematica (tres volúmenes, 1910-13), obra primordial donde la matemática se remite completamente a la lógica.

En la segunda etapa de su pensamiento, Whitehead aborda la revisión crítica del término tradicional de planeta material, fundado aún sobre principios newtonianos: La organización del pensamiento (1917), Investigaciones sobre el principio del conocimiento natural (1919), El término de la naturaleza (1920) y El principio de la relatividad (1922), donde lleva a cabo en sentido científico la teoría de la relatividad de Einstein.

En estas proyectos, Alfred North Whitehead critica la separación clásico entre cualidad principal y secundaria, tal como el fallo del "positivismo mal comprendido" consistente en estimar reales las abstracciones físico-matemáticas y los conceptos teorético-operativos de la ciencia, en el momento en que de todos modos lo real son los elementos en concreto percibidos. Con La ciencia y el planeta moderno (1925), empieza Whitehead la tercera y última etapa de su pensamiento, la "metafísica", que encuentra su mucho más completa expresión en Proceso y situación (1929). Otras proyectos suyas son El devenir de la religión (1926), Simbolismo (1927), La función de la razón (1929), Aventura de las ideas (1933), Modos del pensamiento (1938) y Ciencia y filosofía (1947).

Para Whitehead, la función general de la razón y, por consiguiente, de la filosofía, es un "gradual acercamiento de las ideas de claridad y de generalidad". El punto de inicio no son las premisas evidentes, sino más bien la complicada y multiforme experiencia de la vida y, desde ella, procurar una generalización teorética, siendo consciente de que cada teoría es una "al azar" y una simplificación abstracta y también indebida, que precisa continuas rectificaciónes. Este sendero del conocimiento refleja, por otro lado, la evolución de la naturaleza. La situación se detalla como un desarrollo, constituido por acontecimientos en recíproca conexión.

En la constitución de los procesos intervienen, aparte de los acontecimientos, formas y construcciones recurrentes que Whitehead llama "elementos eternos". Estos son, en sí mismos, abstractos mientras que no entran en la específica "ocasión de hoy" de un acontecimiento. En su mucho más prominente nivel los elementos eternos forman, al fin y al cabo, los "valores", o sea, los sentimientos de bueno, precioso y verdadero que tienen rincón esporádicamente en el desarrollo. Cada acontecimiento -incluyendo el mal que hay en la presencia- encuentra en Dios su justificación y también interpretación última.

El término fundaniental de su filosofía, esto es el de desarrollo, relacionado a la teoría de los "elementos eternos", tal como a la de la relación universal y la urgencia autora de la naturaleza, es aplicado por Whitehead aun a la religión y a la pedagogía, como cabe avisar en sus 2 libros El devenir de la religión (1926) y Los fines de la educación (1928). Precisamente en el campo educativo resultó definitiva la predominación de Harvard, más que nada en América, donde, como complemento a la orientación predominantemente científica y también instrumental de Dewey, la inclinación pedagógica de Whitehead muestra una inclinación humanística. "La educacion radica en la visión frecuente de la excelencia", escribió el creador, cuyos acólitos aseguran que esta expresión encontraba una plena situación en su enseñanza.

Whitehead fue siempre y en todo momento ciudadano inglés, pero se halló realmente bien en Norteamérica, y admiró el espíritu de universalidad y civilización de sus instituciones. Aun habida cuenta de su brevedad, las Autobiographical Notes tienen dentro quizás las páginas literariamente mucho más vivas escritas por un pensador contemporáneo; la evocación de la niñez y de la familia armoniza en ellas con la visión histórica y estética de la vida caracteristica de Whitehead, mientras en el fondo de la obra hace aparición históricamente robusta la excelencia de la tradición inglesa.

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Por eso, si eres de las personas que creen en que de modo colaborativo existen posibilidades de hacer algo mejor, y detentas información en relación con la biografía de Alfred North Whitehead, o en relación con algún peculiaridad de su persona u obra que no se observe en esta biografía, te pedimos que nos lo hagas llegar.

Las sutilezas y las peculiaridades que llenan nuestras vidas son en todos los casos determinantes, ya que marcan la diferencia, y en el tema de la vida de alguien como Alfred North Whitehead, que tuvo su significación en una época concreta, es vital tratar de ofrecer una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.

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