La historia de las civilizaciones la escriben las mujeres y hombres queen el transcurrir de los siglos, gracias a sus obras, sus pensamientos, sus creaciones o su talento; han originado queel género humano, de una forma u otra,avance.
Ya sea inspirando a más seres humanos o siendo una pieza esencial de la acción. Abd al-Qadir es una de las personas cuya vida, en efecto, merece nuestra consideración por el grado de influencia que tuvo en la historia.Conocer la biografía de Abd al-Qadir es comprender más acerca de etapa determinada de la historia del género humano.
Si has llegado hasta aquí es porque tienes consciencia de la importancia que detentó Abd al-Qadir en la historia. El modo en que vivió y aquello que hizo durante el tiempo que permaneció en este mundo fue determinante no sólo para las personas que frecuentaron a Abd al-Qadir, sino que a lo mejor produjo una huella mucho más honda de lo que podamosfigurar en la vida de gente que tal vez nunca conocieron ni conocerán ya nunca a Abd al-Qadir en persona.Abd al-Qadir fue uno de esos seres humanos que, por alguna causa, merece no ser olvidado, y que para bien o para mal, su nombre nunca debe borrarse de la historia.
Las biografías y las vidas de personas que, como Abd al-Qadir, cautivan nuestra atención, deben ayudarnos siempre como referencia y reflexión para conferir un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Tratar de comprender la biografía de Abd al-Qadir, porqué Abd al-Qadir vivió del modo en que lo hizo y actuó del modo en que lo hizo durante su vida, es algo que nos impulsará por un lado a conocer mejor el alma del ser humano, y por el otro, la forma en que se mueve, de forma inexorable, la historia.
(Mascara, de hoy Argelia, 1808-Damasco, de hoy Siria, 1883) Emir de Argelia. Tras proclamarse emir en 1832, continuó la pelea contra la dominación francesa iniciada por su padre. No obstante, se vio obligado a firmar la paz de Tafna (1837), que reducía sus pertenencias a Orán y parte de la provincia de Argel. Dos años después violó los pactos precedentes en el momento en que invadió la Mitidja y asesinó a varios colonos de europa. Como contestación, las tropas francesas ocuparon toda Argelia y Abd al-Qadir debió resguardarse en Marruecos. Sus propósitos de seguir la pelea, con apariencia de guerra de guerrillas, desde territorio marroquí, le enemistaron con el sultán de Marruecos, quien le entregó a las autoridades francesas en 1847. Permaneció en prisión hasta 1852, y una vez liberado vivió en Damasco hasta su muerte. Años después, sus cenizas fueron inhumadas en el «recinto de los mártires», en Argel.
¿Qué opinas de la crónica de la vida de Abd al-Qadir? ¿Has podido leer todo aquello que esperabas encontrar?
Obviamente conocer profundamente a Abd al-Qadir es algo que se reserva a muy pocas personas, y que pretender recomponer quién fue y cómo fue la vida de Abd al-Qadir es una suerte de puzzleque tal vez podamos rehacer si contribuimos todos a la vez.
Por ese motivo, si eres de esas personas que confían en que de forma cooperativa se puede hacer algo mejor, y conservas información sobre la biografía de Abd al-Qadir, o sobre algún peculiaridad de su figura u obra que no se observe en esta biografía, te solicitamos que nos lo hagas llegar.
Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son en todos los casos imprescindibles, ya que marcan la diferencia, y en el caso de la vida de alguien como Abd al-Qadir, que tuvo su relevancia en una época concreta, es fundamental tratar de mostrar una perspectiva de su persona, vida y personalidad lo más exacta posible.
Sin titubeos, contacta con nosotros para narrarnos qué sabes con respecto a Abd al-Qadir. Estaremos ilusionados de completar esta biografía con más información.