Ignacio Merino

Ya sea inspirando a otros o siendo una pieza esencial de la acción. Ignacio Merino es uno de esos sujetos cuya vida, indudablemente, merece nuestra consideración debido al nivel de influencia que tuvo en la historia.Conocer la existencia de Ignacio Merino es conocer más acerca de etapa determinada de la historia del ser humano.

Si has llegado hasta aquí es porque sabes de la relevancia que atesoró Ignacio Merino en la historia. El modo en que vivió y lo que hizo durante el tiempo que estuvo en este mundo fue decisivo no sólo para aquellas personas que trataron a Ignacio Merino, sino que a lo mejor dejó una huella mucho más vasta de lo que logremosimaginar en la vida de personas que tal vez nunca conocieron ni conocerán ya nunca a Ignacio Merino de forma personal.Ignacio Merino ha sido una persona que, por alguna razón, merece ser recordado, y que para bien o para mal, su nombre jamás debe borrarse de la historia.

Apreciar lo bueno y lo malo de las personas significativas como Ignacio Merino, personas que hacen girar y evolucionar al mundo, es algo básica para que podamos poner en valor no sólo la existencia de Ignacio Merino, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por Ignacio Merino, personas a quienes de un modo u otro Ignacio Merino influenció, y indudablemente, comprender y entender cómo fue vivir en el momento de la historia y la sociedad en la que vivió Ignacio Merino.

Vida y Biografía de Ignacio Merino

(Piura, 1817-París, 1876) Pintor peruano. Influido por la escuela romántica francesa, efectuó acuarelas y dibujos de tono romántico, inspirados en temas históricos. Es también creador de una secuencia de creaciones sobre temas populares peruanos, como los retratos de Santa Rosa de Lima y Fray Martín de Porres.

Ignacio Merino nació en el seno de una familia distinguida de origen español, asentada en la localidad de San Miguel de Piura, en la costa norte del Perú. En París transcurrió su niñez y concluyó su bachillerato, iniciándose en el arte de la pintura en los talleres de Raymond Monvoisin y Paul Delaroche. Completó su primera experiencia artística en Italia, regresando a la edad de 21 años a su patria.

En la ciudad más importante de la República fue primero subdirector y después directivo de la Academia de Dibujo y Pintura y catedrático de dibujo en el Convictorio de San Carlos. En la Academia tuvo ciertos acólitos refulgentes que después destacarían en la plástica nacional, como Francisco Laso, Luis Montero y Francisco Masías.

Nuevamente en Europa, mejoró sus visualizaciones del arte a través de los periplos que efectuó por España, Holanda y, de nuevo, por Italia, resolviendo establecerse finalmente en París. En la ciudad más importante francesa fue el primer profesor peruano que alcanzó una situación de renombre, llegando a recibir la Medalla de Honor en la Exposición de Bellas Artes.

La temática de varios de los cuadros de este artista se basa en proyectos literarias españolas, inglesas y francesas, manifestándose de esta forma su vena romántica y el gusto por temas de carácter histórico y dramático recogidos de William Shakespeare, Miguel de Cervantes, Walter Scott, etcétera. Dedicó lonas a hechos y figuras históricas como Cristóbal Colón y el hallazgo de América (Colón en Salamanca), el emperador español Carlos V (La mano de Carlos V) y individuos literarios (Hamlet), proyectos todas y cada una ellas importantes en esa inclinación. Pero, adjuntado con ello, manifiesta las iniciales propensiones de determinados pintores nacionales a plasmar temas relacionados con su país, como en sus retratos de los santurrones limeños San Martín de Porres y Santa Rosa de Lima, o en las estampas costumbristas La jarana y Limeña en el portal.

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Por eso, si eres de aquellos que confían en que de forma colaborativa existen posibilidades de hacer algo mejor, y conservas información sobre la biografía de Ignacio Merino, o con respecto a algún peculiaridad de su personalidad u obra que no hayamos contemplado en esta biografía, te solicitamos que nos lo hagas llegar.

Las sutilezas y las peculiaridades que ocupan nuestras vidas son siempre esenciales, ya que destacan la singularidad, y en el caso de la vida de un ser como Ignacio Merino, que detentó su relevancia en un momento concreto de la historia, es imprescindible procurar ofrecer un panorama de su persona, vida y personalidad lo más precisa posible.

Sin titubeos, contacta con nosotros para narrarnos qué conocimientos tienes tú sobre Ignacio Merino. Estaremos ilusionados de ultimar esta biografía con más información.