Eloy de la Iglesia

Si has llegado hasta aquí es porque eres sabedor de la importancia que detentó Eloy de la Iglesia en la historia. La forma en que vivió y lo que hizo durante el tiempo que permaneció en el mundo fue determinante no sólo para quienes trataron a Eloy de la Iglesia, sino que posiblemente produjo una huella mucho más profunda de lo que logremossospechar en la vida de personas que tal vez jamás conocieron ni conocerán ya jamás a Eloy de la Iglesia personalmente.Eloy de la Iglesia fue una persona que, por algún motivo, merece ser recordado, y que para bien o para mal, su nombre nunca debe borrarse de la historia.

Comprender las luces y las sombras de las personas significativas como Eloy de la Iglesia, personas que hacen rotar y transformarse al mundo, es algo sustancial para que seamos capaces de poner en valor no sólo la existencia de Eloy de la Iglesia, sino la de todos aquellos y aquellas que fueron inspiradas por Eloy de la Iglesia, personas a quienes de un modo u otro Eloy de la Iglesia influenció, y sin duda, comprender y entender cómo fue el hecho de vivir en el momento de la historia y la sociedad en la que vivió Eloy de la Iglesia.

Las biografías y las vidas de personas que, como Eloy de la Iglesia, cautivan nuestra atención, deben servirnos siempre como referencia y reflexión para ofrecer un marco y un contexto a otra sociedad y otra época que no son las nuestras. Tratar de entender la biografía de Eloy de la Iglesia, porqué Eloy de la Iglesia vivió como lo hizo y actuó de la forma en que lo hizo durante su vida, es algo que nos ayudará por un lado a comprender mejor el alma del ser humano, y por el otro, la manera en que avanza, de forma inexorable, la historia.

Vida y Biografía de Eloy de la Iglesia

(Eloy Germán de la Iglesia Diéguez; Zaráuz, 1944 - Madrid, 2006) Director de cine español. Muy joven, se trasladó a Madrid con el propósito de estudiar filosofía. Tratando de cerrar su cinefilia, y un tiempo antes de ayudar a los tutoriales del respetado IDHEC parisino, deseó entrar en la Escuela Oficial de Cinematografía, pero no le fue viable por no haber cumplido la edad que se requiere para cumplimentar la matriculación.

Sin embargo, esto no frenó su actividad en el campo de la civilización. Su gusto por el folklore y por la literatura infantiles quedó plasmado en su tarea adelante del Teatro Popular Infantil. Por exactamente la misma temporada se dedicó a la elaboración de cuentos premeditados a los pequeños, labor que le sirvió para afinar sus características narrativas. De hecho, su primer largometraje como directivo, Fantasía 3 (1966), es una película encargada de ese público. Protagonizado por Dianik Zurakowska, José Palacio, Juan Diego y Tomás Blanco, el mencionado extenso film está conformado por tres capítulos: "La doncella del mar" "Los tres pelos del demonio" y "El mago de Oz", libremente inspirados en las tres narraciones homónimas.

Más allá de la visible ingenuidad del tema abordado en su debut, la verdad es que Eloy de la Iglesia prontísimo probó un afán polémico que le causó distintas adversidades con la censura en las postrimerías del régimen de Franco. Títulos como La semana del asesino (1971), Nadie oyó vocear (1972) y Juego de amor contraindicado (1975) definen un estilo punzante, desgarrado y también impresionista. Durante el periodo de la transición democrática, esas características fueron intensificándose hasta lograr un cierto sensacionalismo, muy propio de aquel periodo. Así se advierte en producciones como La otra alcoba (1976), La criatura (1977), Los bienestares ocultos (1977) y El sacerdote (1978). En decisión correcta, hablamos de proyectos coyunturales, cuya viable dosis de demanda popular fué difuminándose con el lapso del tiempo.

Tal es la situacion asimismo de El diputado (1979), película interpretada por José Sacristán y María Luisa San José, donde De la Iglesia, inspirándose en Tempestad sobre Washington (1962), de Otto Preminger, narraba una historia en la que se alternaban la polémica ideológica y una reflexión muy ácida cerca de la aceptación popular de la homosexualidad en el planeta político.

Atendiendo al polémico tema de la inseguridad ciudadana, el directivo efectuó ese año Miedo a salir a la noche (1979). La angosta relación del director con el joven José Luis Manzano le llevó a ubicarlo como personaje principal de Navajeros (1980), Colegas (1982), El pico (1983) y El pico 2 (1984). En todas y cada una ellas venía a mitificarse el ambiente marginal, ubicando a los criminales como víctimas de la presión popular, y al cabo empujados a una épica mortal en la que se imponía el trágico signo de drogas como la heroína.

En contraste con la artificiosidad feísta de títulos como los convocados, el directivo deseó aproximarse a entre los escritores mucho más esenciales y refinados de la lengua inglesa, Henry James. Con ese propósito, dirigió Otra vuelta de tuerca (1985), versión del artículo homónimo interpretada por Pedro María Sánchez y Queta Claver en sus primordiales papeles. Lamentablemente, el director distorsionó el razonamiento original, reemplazando la sutileza fantasmagórica de James por el efectismo propio de su estilo. Mucho mucho más cercana a su cosmos era la parte teatral de José Luis Alonso de Santos que dio origen a La estanquera de Vallecas (1987), última película del directivo antes de pasar un largo periodo de inmovilidad provocado por distintos excesos personales.

Con el ánimo y la salud ahora restablecidos, y espoleado por el homenaje que le tributó el Festival Internacional de Cine de San Sebastián en 1996, Eloy de la Iglesia regresó a su trabajo con una adaptación televisiva de Calígula (2001). Dos años después firmó la dirección de Los novios búlgaros, que sería su testamento fílmico, pese a los varios proyectos que bullían en su cabeza hasta antes de su muerte.

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Los matices y las sutilezas que llenan nuestras vidas son en todos los casos imprescindibles, ya que perfilan la diversidad, y en la ocasión de la vida de una persona como Eloy de la Iglesia, que detentó su importancia en un momento histórico concreto, es vital tratar de ofrecer una visión de su persona, vida y personalidad lo más precisa posible.

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